Una apuesta aún mayor por el espectáculo. Eso es lo que promete la Fórmula 1 con el nuevo formato esprint, que se estrenará este fin de semana en Azerbaiyán y se repetirá en otros cinco Grandes Premios esta temporada.
Se trata de una propuesta con menos entrenamientos libres y más sesiones de clasificación. “Reforzará el espectáculo de los fines de semana esprint y mejorará la acción en pista para los aficionados del mundo entero”, indicó la FIA en un comunicado conjunto con el promotor Formula One.
Los pilotos sólo correrán una sesión de ensayos libres durante el fin de semana, el viernes por la mañana, seguida de la clasificación clásica por la tarde para determinar la parrilla de salida del Gran Premio el domingo.
La jornada del sábado estará dedicada al esprint. Los pilotos saldrán a pista para una segunda sesión de clasificación (denominada ‘Sprint Shootout‘), sobre el mismo modelo que la de viernes pero más corta, que determinará el orden de salida para la carrera esprint que se disputará el mismo día.
El formato que se estrena en Bakú también se utilizará en otros cinco Grandes Premios: Austria (2 de julio), Bélgica (30 de julio), Qatar (8 de octubre), Estados Unidos (Austin, 22 octubre) y Brasil (5 noviembre).
Cambios
Este cambio de formato se produce dos años después de la llegada de las carreras esprint en la categoría reina. Hasta ahora, en los fines de semana esprint, los pilotos disputaban calificaciones clásicas, es decir contrarreloj, el viernes, que definían el orden de salida de una carrera de 100 kilómetros el sábado, que a su vez definía la parrilla de salida del GP el domingo.
Según la FIA, el nuevo formato “incitará a los pilotos a rodar a fondo el sábado” ya que estos no solían asumir todos los riesgos durante el esprint para asegurar su posición en la parrilla para la carrera principal.
La carrera sprint se convierte así en un evento independiente cuyos resultados no tendrán consecuencias en la parrilla de salida del GP. La atribución de puntos al término del esprint no cambia: sólo los ocho primeros pilotos sumarán puntos.
El fin de semana contaba también con dos sesiones de ensayos libres; la primera (FP1) corrida el viernes antes de las calificaciones y la segunda (FP2) al día siguiente antes del esprint. Si la primera se mantiene, la segunda desaparece.
La Fiscalía Provincial de Madrid ha presentado una denuncia contra los insultos racistas que recibió Nico Williams durante el encuentro que el Athletic de Bilbao disputó contra el Atlético de Madrid en el Metropolitano el pasado 27 de abril.
El Ministerio Público considera en su escrito que los gritos que un espectador profirió contra el jugador cuando se disponía a realizar un saque de esquina tiene un "evidente desprecio al color negro de la piel de éste", y los escenificó, además, con gestos de menosprecio de carácter racista.
Según recoge el escrito, se trataron de sonidos "uh, uh, uh, uh", que reflejan una onomatopeya que imita el sonido emitido por los monos, "que, como es público y notorio, ha sido proferido en diversas ocasiones por grupos de aficionados de distintos países para ofender públicamente a deportistas por el color de su piel".
El organismo entiende que los gritos proferidos contra el futbolista podrían ser constitutivos de un delito de lesión a la dignidad. Según el artículo 510 del Código Penal las penas son de uno a cuatro años de prisión y multa de seis a 12 meses para quienes "públicamente fomenten, promuevan o inciten directa o indirectamente al odio sobre un individuo o grupo por su pertenencia al mismo por razones de raza, sexo, religión, origen, identidad sexual o ideología" y de seis meses a dos años y multa de seis a doce meses "a quienes lesionen la dignidad de las personas mediante acciones que entrañen humillación, menosprecio o descrédito de alguno de los grupos que debe estar basado en una característica común de sus miembros, como su raza".
El futbolista, tras el encuentro afirmó: "He escuchado sonidos de mono, han sido pocos, gente tonta hay en todas partes y no pasa nada. Espero que esto vaya pasando poco a poco, al final estamos haciendo una lucha interna y externa contra esto y es lo que hay".
El responsable, socio de la grada de animación del Atlético de Madrid, ya fue suspendido cautelarmente por el club por esos hechos en aplicación de su normativa interna al considerarlo una falta muy grave.
La Policía identificó a ese socio como un miembro veterano del Frente Atlético, el grupo ultra que se sienta en la grada de animación del fondo sur del estadio Metropolitano.
El club fue sancionado por el Comité de Competición con el cierre de dos partidos de este sector del estadio por estos hechos y una multa de 20.000 euros.
No obstante, el Comité de Apelación de la Real Federación Española de Fútbol aceptó el recurso del Atlético de Madrid por su activa colaboración, la identificación del responsable y el hecho de que fuera un incidente aislado. Todo ello permitió afirmar que concurrió la máxima diligencia posible por parte del Club.
El Barça ya ha dado con la fórmula para poder inscribir tanto a Dani Olmo como a Pau Víctor, los únicos fichajes que llegaron al club el verano pasado y que inicialmente fueron inscritos hasta finales de este año aprovechando la lesión de larga duración de Christensen. El pasado viernes, el juez Ignacio Fernándezde Senespleda, titular del Juzgado de lo Mercantil número 10 de Barcelona, echó un jarro de agua fría sobre la entidad al denegar la cautelar para que ambos futbolistas pudieran seguir jugando sin más, tal y como ocurrió hace unos años con Gavi.
Ahora, el club ya tiene en sus manos una nueva palanca en forma de ingresos para lograr el fair play necesario: la venta de localidades VIP del Spotify Camp Nou en Oriente Medio por valor de 100 millones de euros.
La operación está cerrada, pero no es aún oficial a todas luces. El Barça, en este caso, podría esperar a que se sepa en principio este mismo lunes la resolución de los juzgados de Primera Instancia ante los que se pidió también la cautelar para ambos jugadores. En caso de que los tribunales atiendan la petición de la entidad azulgrana, la operación podría ser aparcada hasta finales de la presente temporada, a pesar de que los ingresos que se obtendrían con la misma podría facilitar el retorno a la fórmula del 1-1 para inscribir jugadores. Una circunstancia que, en este caso, deberá también contar con el visto bueno de La Liga.
Siu WuEFE
El organismo que preside Javier Tebas ya advirtió al club de que los ingresos conseguidos con el nuevo acuerdo de patrocinio deportivo con Nike, ratificado la semana pasada en el marco de una asamblea extraordinaria de compromisarios, no era suficiente y, ahora, la entidad barcelonista quiere asegurarse del todo de que los cálculos de todas las partes coinciden.
El peligro de su marcha
En el caso de Dani Olmo, un jugador que firmó unos números excelentes en su regreso a la disciplina azulgrana y que ahora mismo, no obstante, no pasa por su mejor momento, el hecho de que no pudiera ser inscrito sería un golpe durísimo para el Barça en más de un sentido. En el entorno barcelonista se asegura que el jugador cuenta con una cláusula en su contrato que, en caso de no poder seguir jugando bajo las órdenes de Hansi Flick a partir de enero, obtendría de manera automática la carta de libertad para negociar su marcha.
Algo que ha hecho que se multipliquen en las últimas horas las especulaciones sobre su posible llegada al PSG o con un hipotético salto a la Premier League. En los últimos días, de hecho, el agente del egarense, Andy Bara, según ha señalado The Times, habría sido visto en las gradas del Etihad Stadium, donde juega sus partidos como local un Manchester City de Pep Guardiola que está atravesando en estos momentos un considerable bache de resultados en la competición inglesa.
«Respeta al árbitro, respeta el fútbol». Ése fue el mensaje que la RFEF y LaLiga quisieron transmitir esta jornada para acabar con semanas de polémica y tensión antes de que el calendario se empine, pero no lo consiguieron. Las decisiones de los colegiados volvieron a estar en el punto de mira tanto en la disputa por el título como en la huída del descenso. Hubo aficiones que silbaron, como ocurrió en el Bernabéu al grito de «¡Corrupción en la Federación!», y los mismos clubes que pusieron a sus jugadores junto al trío arbitral detrás de la pancarta mostraron después su descontento con decisiones que o bien consideran que les perjudicaron o no entendieron cómo se gestionaron. Eso sí, ninguna cayó en contra de los intereses de quienes pelean el título y fueron especialmente relevantes en el caso de los duelos Valencia-Atlético de Madrid y Las Palmas-Barcelona, donde el descenso también estaba en juego.
Fue el Valencia el equipo que, con más contundencia, cuestionó el arbitraje de Busquets Ferrer con Iglesias Villanueva en el VAR. En el minuto 55, con el 0-2 en el marcador y el Valencia volcado en la portería del Atlético, un centro de Gayà lo cabeceó Sadiq y el balón impactó a bocajarro en el brazo de Javi Galán, abajo pero separado del cuerpo. Mestalla reclamó penalti, pero no lo pitó y el VAR ni siquiera intervino. Minutos después de finalizar el encuentro, el Valencia lanzó un mensaje en sus redes sociales con el vídeo de la jugada: «Nosotros respetamos a los árbitros, pero esto es penalti».
Nadie entendía que ni siquiera se hubiera avisado al colegiado para que peritara con las imágenes. Ni siquiera Simeone. «Me mostraron la imagen del penalti y es la misma jugada de la Eurocopa. Le pega en la mano; no entiendo nada. En la Eurocopa era penal de Cucurella. Dicen que la mano estaba muerta, pero le pega en la mano. Ojalá que sea más claro siempre para todos porque la situación es poco entendible, un día va a ser penal, otro no... Ojalá que se pudiera manejar la misma línea en todos los equipos», reconoció el argentino, que se llevó la victoria 0-3, pero pudo ver complicarse el duelo en esa jugada.
Eso es lo que pensó Corberán, que quiso ser más diplomático: «Prefiero pensar que no ha sido penalti, duele menos. Porque un gol creo que hubiera cambiado la dinámica del partido por completo». «Hay un VAR para corregir errores y creo que es más saludable pensar que no ha sido penalti que pensar que lo era y no ha sido señalado», añadió el técnico.
La duda, como evidenciaba Simeone, permanece. Para la mayoría de árbitros españoles no es penalti. El CTA afinó esta temporada los criterios para que la manos en posición natural no fueran falta. En este caso consideran que no es sancionable porque, pese a estar despegada del cuerpo, no ocupa una posición antinatural. El problema es que para la UEFA sí lo es o, al menos, así lo determinó en septiembre en una reunión del Comité de Árbitros con el ejemplo de aquella de Cucurella que, en los cuartos de final contra Alemania en la Eurocopa, no se pitó.
La mano de Cucurella en el España-Alemania de la Eurocopa.REUTERS
El criterio, que hizo público una filtración para enfado de la UEFA, es que los ingleses Anthony Taylor y Stuart Attwell (VAR) debieron pitar penalti. «El contacto mano con balón que detiene un tiro a puerta debería castigarse de forma más estricta, y en la mayoría de los casos debería concederse un tiro penal, a menos que el brazo del defensor esté muy cerca del cuerpo o sobre el cuerpo», recogieron en el documento de observaciones. «En este caso, el defensor detiene el tiro a puerta con el brazo, que no está muy cerca del cuerpo, haciéndose más grande, por lo que se debería haber concedido un tiro penal», zanjaron.
La única diferencia con la de Galán es que no interceptó un remate a diez metros como el de Musiala, sino el testarazo a bocajarro de Sadiq. Como Simeone, en el Valencia no entienden el criterio ni que el VAR no llamara a Busquets para que evaluara la jugada, por lo que no hay audio de la interpretación.
Revisión de un fuera de juego
Sí lo hay de la jugada polémica que encendió el partido en el estadio de Gran Canaria entre Las Palmas y el Barça. En el minuto 81, con los azulgranas ganando 0-1 pero con los insulares volcados, hay una mano de Eric García en el área, de espaldas y cayéndose, que ataja un disparo de Álex Suárez. Cordero Vega no señala el punto de penalti, pero Del Cerro Grande enseguida le llama desde el VAR. «El brazo, aunque va al apoyo, está extendido, ocupa un espacio, y es un disparo a portería, pero quiero que valores que también hay una posición de fuera de juego previa», le explicaba.
Le muestra primero la imagen de la mano y después varias tomas para verificar el fuera de juego que en LaLiga esta temporada ya es semiautomático. Sin embargo, el colegiado revisa hasta comprobar la posición adelantada del lateral Álex Muñoz en el centro del que nace toda la jugada y que la invalida. ¿Por qué entonces avisó el VAR? «Después de esta semana, es normal que todo se revise», comentó entre sonrisas Eric García. Las protestas del Real Madrid, la carta de queja por los arbitrajes y la reunión privada con el CTA es «la semana» a la que se refería el central azulgrana.
Cordero Vega revisa en Las Palmas la polémica jugada en el VAR.AFP
No quiso Diego Martínez buscar explicaciones sino que se las pidió al árbitro al final del partido. «¿Por qué paráis?», preguntó el entrenador en un diálogo que cazaron las cámaras de Movistar Plus. «No, pero está bien ejecutado, porque si no hubiera fuera de juego, hubiera sido falta...», decía el árbitro. «Ya pero es que... entonces, ¿por qué lo paráis?», reclamaba el técnico ante lo que se encontró esta respuesta: «Para que la gente lo sepa, para que no se piensen que no...». Y ahí quedó la conversación que luego Martínez resumió en sala de prensa. «Es un tema de interpretación y ojalá que a partir de ahora alguna de estas jugadas extrañas nos caiga de cara».
Tampoco se libró de la polémica el Rayo. Se quedó con diez ante el Villarreal por la roja que García Verdura mostró a De Frutos al filo del descanso por una entrada que el videoarbitraje. Eso provocó el enfado del presidente Martín Presa, que dejó el palco para bajar a los vestuarios. En el Bernabéu, el Real Madrid, después de las quejas, tuvo una tarde plácida con el Girona.
No es que no hubiera penaltis o expulsiones en el resto de la jornada, pero fueron jugadas claras en las que ni siquiera tuvo que mediar el VAR.
Sólo un árbitro 'Elite'
El comunicado de los árbitros pidiendo respeto y la campaña de la RFEF contrasta con que para esta jornada el CTA sólo haya designado a un colegiado 'Elite UEFA'. Fue Sánchez Martínez y arbitró el Celta-Osasuna, un duelo donde se esperaba menos tensión que en otros que marcaba el calendario. Hernández Hernández, que arbitró competición europea, y Gil Manzano descansaron.
Sánchez Martínez en el Celta-Osasuna.AFP
Sin embargo, a Cordero Vega, que ha vuelto a Primera esta temporada, se le asignó el partido Las Palmas-Barcelona, auxiliado por Del Cerro Grande.
Al frente de la Sala VOR en Vallecas y en Mestalla hubo dos colegiados descendidos a Segunda el pasado verano pero que siguen en el VAR de Primera: Figueroa Vázquez, que avisó de la expulsión que desde el Rayo ven muy rigurosa, e Iglesias Villanueva, que no consideró revisar la mano de Galán.
La razón de estas designaciones hay que situarla, según fuentes federativas, en que se realizan dos semanas antes, que los árbitros suelen pitar cada 15 días y que había que encajar esta jornada con la elección de los colegiados en la ida de las semifinales de la Copa del Rey con dos partidos tensos entre Barça y Atlético y Real Sociedad-Real Madrid.