Alcaraz firma una trabajada venganza contra Tommy Paul en Cincinnati

Alcaraz firma una trabajada venganza contra Tommy Paul en Cincinnati

Actualizado

El murciano se deshace de su verdugo en Toronto por 7-6, 7-6 y 6-3 tras más de tres horas de partido

Alcaraz firma una trabajada venganza contra Tommy Paul en CincinnatiATP MEDIA vía AP (Vídeo) // AP (Foto)

Tommy Paul empieza a convertirse en una piedra en el zapato para Carlos Alcaraz. Ganó el español en tercera ronda del Masters de Cincinnati, sí, pero derrochando sangre, sudor y lágrimas sobre la pista central contra un estadounidense, número 13 del mundo, que parece haberle tomado la medida al murciano. No solo le derrotó en Toronto la semana pasada sino que lo mantuvo en pista durante más de tres horas, levantando tres pelotas de partido en el segundo set.

Finalmente Alcaraz se vengó de Paul en un encuentro correoso y marcado por el viento y la lluvia, un 7-6 y 6-7 y 6-3 que deja ciertas dudas sobre las opciones del joven de 20 años de repetir victoria en Nueva York, a pocos días de que arranque el US Open que conquistó el año pasado. Veremos.

Lo cierto es que el americano de 26 años llegaba con mejores sensaciones al choque. Su victoria la semana pasada en los cuartos de final del Masters 1.000 canadiense ante el español le dieron la confianza suficiente como para intentar la gesta de nuevo y aumentar su ventaja en su duelo particular con el murciano. Se quedó corto.

Aún así, logró incomodar al número uno del mundo desde el principio. El juego del murciano no fluía, entorpecido por las condiciones en pista. Soplaba el viento con fuerza sobre la central del torneo de Cincinnati y las imprecisiones se empezaron a acumular. Paul aprovechó mejor los extraños constantes de las bolas y la evidente falta de ritmo de su rival para poner tierra de por medio a la primera ocasión de que dispuso (4-2). Salvó además las dos bolas de break que concedió en el siguiente juego para encarrilar el primer set.

Apareció entonces la genialidad del murciano. Su juego salió del letargo tirando de fortaleza mental en el momento más oportuno. Empezó a sentirse a gusto. Dos golpes magistrales le pusieron al borde de recuperar la desventaja, que culminó con un error de Paul en la red y con ello las sensaciones para restablecer las tablas en el marcador (5-5). Pudo haberle dado la vuelta al tortilla acto seguido con tres bolas de ruptura para el 6-5, pero la solidez del servicio de Paul y el viento las disiparon.

Entró entonces el encuentro en su mejor fase, con un punto magistral antes del tiebreak y la sensación de que el set podía caer de cualquier lado de la red. Y así fue el desenlace, un intercambio de golpes donde Alcaraz puso un punto más de brillantez, como suele ser habitual, para anotarse la primera manga en poco más de una hora.

El viento y las sensaciones parecieron asentarse con la mitad del trabajo resuelto para Alcaraz, pero la segunda manga no fue ni mucho menos un paseo. Fue tan disputada y correosa como la primera. Paul apretó los dientes y se apuntó tres veces el juego sobre el servicio de su rival, obligando al número uno a ir a remolque durante gran parte del parcial.

Alcaraz se defendió como gato panza arriba para evitar que el de Nueva Jersey se llevara la manga. Levantó bolas de set y se adjudicó el décimo juego tras disponer de cuatro pelotas para romper, una pequeña gesta que parecía anunciar el final de las hostilidades. No fue así. El partido dio aún otro giro extraño de guion.

El duodécimo juego acabó convertido en drama, con ovación cerrada incluida de la grada de Ohio. Casi 14 minutos con tres pelotas de partido para el español que no supo cerrar, impreciso en los momentos decisivos. Después sintió el golpe y cedió el tiebreak por 7-0, hundido y forzado a jugar el sexto set contra el norteamericano en poco más de una semana.

Además se puso a llover, con dos parones por el agua, la reanudación horas después y un set que ahora sí, pudo cerrar sin ceder su servicio en toda la manga. Un alivio tras una jornada inesperadamente maratoniana. Su rival en cuartos de final será el australiano Max Purcell, con Novak Djokovic como principal amenaza por la otra parte del cuadro.

kpd