Miraba espectante Antoine Griezmann a Munuera Montero cuando volvía del VAR. Le esperaba la historia. Cuando pitó el colegiado, no había dudas de para quién era ese penalti. Tampoco había dudas de que el francés lo embocaría, aunque Soria estuvo a punto de tocarlo. Pero la historia no se detiene.
El francés elevaba los brazos al cielo y corría a celebrarlo con su entrenador. Las dos personas más importantes de este Atlético de Madrid fundidas en un abrazo mientras Luis Aragonés los miraba desde el cielo. 173 goles para Zapatones. 173 goles para Grizzie. “Alegría absoluta para un futbolista que es historia en el club. Que lo ha dado todo siempre. Hay que cuidarlo y necesitamos este tipo de futbolistas para crecer”, le piropeaba Simeone.
También se llevaba el halago del Riquelme, al que le debe, por cierto, el primer gol de la noche. Un centro precioso que el francés remató en escorzo. “Me alegro por Grizzie que haya alcanzado a Luis que es una barbaridad”, concedía el canterano de la máxima estrella de su equipo y uno de los grandes jugadores de LaLiga.
Ya en el retrovisor de la historia rojiblanca dejaba a Adrián Escudero con 169 goles, a Paco Campos con 158, Gárate y sus 136 y, por supuesto, la otra leyenda del Atlético de Madrid, Fernando El Niño Torres y sus 129 goles.
El protagonista se revolvía humilde ante la comparativa y explicaba que nunca podrá igualar lo que representa Luis Aragonés para el club y, sin embargo, lamentaba en el postpartido que se hubiera escapado la victoria en casa. “Queríamos los tres puntos, es una pena”. Algo, por cierto, que no ocurría desde hacía 20 partidos.
El Getafe se colaba en la fiesta de Griezmann y en la racha del Atlético. Una racha que se iniciaba después del empate, el 14 de febrero, que también arrancaba el conjunto madrileño. Aquel fue a uno y este a tres.
Más allá del resultado, los videomarcadores mostraban al finalizar la gélida noche del Metropolitano un montaje de Griezmann y Luis juntos bajo la cifra de sus goles. 173, no es un mal número para un jugador que tuvo que ganarse la redención tras la espantada al FC Barcelona. 260 partidos después vistiendo la rojiblanca, el francés hacía historia.
LaLiga EA Sports
LUIS NÚÑEZ-VILLAVEIRÁN
@LNvillaveiran
Actualizado Domingo,
8
octubre
2023
-
22:15Ver 1 comentarioEl técnico vasco es el segundo entrenador destituido en...
Ayer, a las 19:28, el Real Madrid anunciaba de manera oficial el fichaje de Kylian Mbappé. El madridismo abrazaba la llegada del galo y lo mostraba haciendo crecer sus seguidores en más de dos millones en apenas tres horas. Esa es una pequeña muestra del impacto que esta estrella genera a su paso. El club blanco tiene a su duodécimo galáctico y LaLiga recupera un reclamo mundial para su competición. "A día de hoy no hay otro jugador en España que pueda hacerle frente", sentencia Jorge Troncoso, director del Máster en Marketing Deportivo de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR).
Uno de los socios de LaLiga, el fondo CVC, reconoce que la captación de grandes jugadores es uno de los motores económicos para las competiciones nacionales. "Las 'estrellas' generan interés en los torneos y ayudan a LaLiga a mantener el interés de los aficionados a través de su rendimiento en el campo y de su presencia en redes sociales", recoge el texto del documento del acuerdo con la competición según Cinco Días.
No cabe duda de que Mbappé es uno de esos sujetos que generan atención en la competición en la que jueguen. "Es una industria de entretenimiento y se trata de una conquista de horas de consumo porque a más audiencia más ingresos y el efecto Mbappé es demoledor", explica Diego Ballesta, Managing Director Spain Partner en You First, una de las mayores agencias deportivas de España.
El presidente de LaLiga, Javier Tebas, aseguraba por su parte antes de la oficialidad del fichaje: "Por supuesto, la llegada de Kylian Mbappé es una ventaja para nosotros y para seguir creciendo. Pero si los jugadores colaboran y ayudan, no son la única clave para el éxito de un campeonato, como suelen pensar los aficionados o los medios de comunicación. Cristiano Ronaldo, por ejemplo, pasó a la Serie A y el Campeonato no explotó. El Paris Saint-Germain tenía a Messi, Neymar y Mbappé y la Ligue 1 tampoco tuvo un gran éxito durante su etapa. Seguimos y seguiremos progresando".
Lo cierto es que la salida de Mbappé no ha facilitado que los derechos televisivos de la Ligue 1 puedan venderse con facilidad. De hecho, aunque no puede establecerse de manera fehaciente que sea causa- efecto, la competición francesa sigue sin operador para la próxima temporada y hoy se producirá una reunión de urgencia para abordar esa situación.
Aunque gran parte de la dificultad del acuerdo también puede deberse al incremento de un 40% que pretendía la competición para el periodo 2024-2029. "Se habla de que la Ligue 1 no tiene comprador. Claro, ese es el efecto de sacar a una pieza fundamental y que genera esa atracción porque la gente quiere ver a Mbappé y es que las personas se asocian a un club pero se personalizan con un jugador", razona Troncoso.
Salida de Cristiano y Messi
LaLiga ya afrontó un reto similar, como apuntaba Tebas, cuando se marcharon Cristiano Ronaldo y Messi, un dúo que acaparó el mundo del fútbol casi una década. No obstante, la competición sí consiguió vender sus derechos para el periodo entre 2021-22 hasta el 2026-27 por 4.950 millones de euros a Movistar y Dazn. Un 1% más que en el anterior, aunque en esta ocasión la franja de venta se alargó a un lustro para generar "mayor estabilidad a medio plazo".
Precisamente, Telefónica, contaba con 3,59 millones de clientes en 2015, año en que se hicieron por primera vez con los derechos de la competición. Durante el periodo de coincidencia de ambos cracks, la operadora ganó casi 340.000 clientes. En 2019, seis meses después de la marcha de Ronaldo del Real Madrid, la plataforma se encontraba en máximos con más de cuatro millones de abonados. A finales de 2023, los clientes habían caído en casi 600.000 hasta los 3,4. "En los últimos años, con la marcha de Cristiano y Messi, LaLiga ha ido perdiendo generación de ingresos, interés, globalidad y referentes", apunta Ballesta.
Ahora ha vuelto el principal referente del panorama fútbol a LaLiga española, una persona que va a multiplicar la creación de contenidos, que es lo que ayuda a fidelizar a la audiencia. "Mbappé y el Real Madrid son la simbiosis perfecta", apunta Troncoso para recuperar el foco que se había desplazado hacia la Premier League. "Va a dar ese impulso para que la liga se acerque a la competición inglesa", añade.
Un foco de atención de audiencia, pero también dentro del ecosistema del deporte. Diego Ballesta cree que la llegada del francés generará un "efecto llamada" hacia LaLiga. "El efecto Mbappé es tan demoledor que será un efecto dominó", apunta el partner de YouFirst. Audiencias, jugadores, notoriedad, relevancia... son muchos los elementos de crecimiento que generará Mbappé para LaLiga sin olvidar el deportivo.
España ha conquistado 36 títulos internacionales en este siglo, 11 Champions, 12 Europa League y 13 Supercopas frente a los 14, por ejemplo, que ha obtenido la Premier. El Madrid, con siete Copas de Europa en este siglo, cuatro de ellas con Cristiano, es el gran dominador del continente. Por eso llega Mbappé, para ayudar en mantener la hegemonía del Madrid... y de LaLiga.