Derrotó al ruso por un doble 6-4, manteniendo su progresión a lo largo del torneo.
Se acaba el año sin que Carlos Alcaraz dé señales de rendición. Contra lo que pudiera parecer después de sus malos resultados en los últimos torneos y de su debut en estas ATP Finals, el número dos del mundo estará en las semifinales del torneo después de imponerse a Daniil Medvedev por 6-4 y 6-4. Termina primero del Grupo Rojo y se medirá este sábado a Novak Djokovic. La otra plaza en la final se la jugarán Jannik Sinner y Medvedev, que ya estaba clasificado antes de medirse con Alcaraz.
Con numerosas hipótesis abiertas, como suele ocurrir en un torneo distinto a cualquier otro, Alcaraz salió a hacer aquello que estaba en su mano y que le otorgaba plenas garantías de disputar sus primeras semifinales del torneo. Una victoria ante Medvedev le daría el pase y certificaría la evidente progresión apuntada en el partido contra Andrey Rublev, después de caer en el debut frente a Alexander Zverev. Medvedev fue el primer hombre en obtener plaza entre los cuatro mejores, gracias a su victoria en dos sets ante Zverev. Era la suya una situación análoga a la de Jannik Sinner, que en la noche de este jueves dio un lección de dignidad peleando hasta el límite para sobreponerse a la tenaz oposición de Holger Rune y a sus problemas físicos.
Tardaron poco en presentársele dificultades al español y tardó poco en solventarlas. Dos servicios le permitieron zafarse del acoso de su oponente en el tercer juego, antes de hacer suyo el punto con una contradejada que puso fin a un intercambio de 33 golpes. Fue un punto excepcional en un partido de diálogos cortos y fue también el mayor contratiempo que hubo de soportar. Alcaraz estaba fino, y certero a la hora de llevar a cabo su planteamiento, que pasaba por no dejar quieto a Medvedev en instante alguno, en hacerle descender desde sus 198 centímetros con bolas cortadas, en acortar los puntos con servicio y aproximación a la red, en traerle a la cinta con el mimo de sus dejadas.
Los precedentes
Venía de perder ante el ruso en semifinales del Abierto de Estados Unidos, tras arrasarle en la final de Indian Wells y en las semifinales de Wimbledon. A diferencia de lo acontecido en Nueva York, donde dejó escapar sucesivas oportunidades, en esta ocasión acertó de entrada, llevándose en blanco al resto el séptimo juego, cosecha suficiente para apuntarse el primer parcial.
Medvedev se jugaba los 200 puntos de cada victoria en la fase de grupos, los 390.000 dólares de premio por partido ganado e incluso la posibilidad de optar al título invicto y concluir el año como número 2, en caso de que el español hubiera quedado fuera. También podía elegir rival en semifinales: terminando primero del Grupo Rojo se las vería con Novak Djokovic, segundo en el Verde, con quien tiene un 5-10 adverso en el cara a cara. Siendo segundo, su rival sería Sinner, ante quien le saludaba un 6-2, si bien cedió recientemente en las finales de Viena y Pekín.
Quién sabe si falto de verdaderos estímulos para desgastarse a un día de las semifinales o simplemente superado por un rival que no deja de crecer a lo largo del torneo, lo cierto es que el ruso volvió a perder su saque, con una doble falta, en el noveno juego, y con él acabaría por marchársele el partido. Plácido y convincente triunfo del español, que llega muy entero a las semifinales.