El golf español arranca con fuerza en la semana del Masters
A Cayetana Fernández, sus más allegados la conocen como Cata. Para todos los que todavía no saben quién es, podríamos definirla como lo más parecido a la versión femenina de Jon Rahm. Con solo 17 años acaba de poner boca abajo el santuario más sagrado del golf, Augusta National.
Cata terminó cuarta en el Augusta National Womens Amateur (ANWA). A solo unos días del comienzo del Masters de Augusta, lo rectores del campo más exclusivo del mundo decidieron hace cuatro años abrir su recorrido para las mejores jugadoras amateurs del Mundo, un gigantesco acierto. El torneo tiene más audiencia de televisión que cualquiera de las grandes citas profesionales del golf femenino.
Durante dos días, las jugadoras juegan en el campo vecino y solo las mejores 30 y empatadas tendrán el privilegio de jugar la última y definitiva ronda en Augusta National, un privilegio solo reservado a unos pocos aficionados. Inicialmente cuatro españolas Carolina López-Chacarra (hermana de Eugenio), Julia López, Carla Tejedo y Cayetana disputaron el torneo, pero solo Cata sobrevivió para pisar las inmaculadas calles del edén golfístico más deseado. “Está siendo increíble, ha sido una locura poder estar aquí“, el entusiasmo de la española desborda. Sus 71 golpes finales en Augusta fueron la segunda mejor vuelta del día y una de las únicas tres por debajo del par del campo.
Cata comenzaba ordenada en su golf, con seis pares, el primer birdie llegó en el hoyo 7 y cerraba con el segundo sus primeros 9 hoyos. Se acercaba al liderato marcado por la número uno del mundo Rose Zhang. “La he liado un poco en el amen corner“, reconocía Cata que no pudo controlar su ímpetu y tropezó con bogey en el 10, una bola al agua en el hoyo 11 que le hizo perder dos golpes y un nuevo bogey en el emblemático par 3 hoyo 12. Sacó entonces la española una de sus principales virtudes la garra con la logró terminar con tres birdies en los últimos cuatro hoyos. Recordará para siempre el final de su primer ANWA, el birdie en el hoyo 17 pasado el green y que celebró la madrileña como si hubiera ganado la chaqueta verde.
Solo un hoyo más tarde, ya en el 18, coronó una despedida de lo más efusiva, un nuevo birdie desde fuera, que revolucionó la tranquilidad del sábado pre Masters.
Cata abandonó el jardín entre saltos y abrazos y con la cuarta plaza en el bolsillo con un -3 total. Su resultado le dejó a seis golpes del -9, donde Zhang y Bae disputaron un desempate que cayó en favor de la número uno del mundo.
La conclusión final de estos tres días es que la semana de Augusta ha comenzado muy bien para el golf español y que el futuro del golf nacional femenino está más que asegurado.