La deportista neerlandesa Joy Beune, campeona mundial de patinaje de velocidad sobre hielo, protagoniza la portada de la revista Playboy. Según publican medios holandeses como De Telegraaf, este número de la revista, que salió a la venta a principios de diciembre, ha superado los récord de ventas de Playboy en Holanda.
Según publica el citado medio, sólo el primer día en el que salió a la venta, se vendieron diez ejemplares más de lo habitual.
Beune, que es una de las mejores patinadoras holandesas del momento, se ha mostrado sorprendida tras conocer su éxito en los quioscos: “No esperaba que se vendieran tantos”. Según dijo a De Telegraaf, la que peor llevó que posase para la revista fue su madre: “Se sentó con las manos delante de los hojos durante un minuto, diciendo ‘oh, no’. A mi padre le pareció gracioso y en tono broma dijo: ‘Bueno, nos saltaremos la edición de diciembre”, haciendo alusión a la aparición en ella de su hija, de 25 años.
Desde este domingo 27 hasta el 3 de agosto se desarrollará la natación pura, la clásica, en los Mundiales de Deportes Acuáticos (World Aquatics Championships), que comenzaron el pasado día 11 en Singapur con el resto de especialidades. En los años postolímpicos suelen relajarse los deportes más importantes, aunque no sólo ellos, de los Juegos. Se produce algo así como una relajación de los cuerpos y las mentes después de tanta tensión, tanta presión, tanta ansiedad, tantas emociones.
Además, los calendarios siguen todavía reajustándose a causa del desbarajuste general provocado por la pandemia. Los Mundiales de Natación, programados para celebrarse cada dos años, se aprietan en el tiempo. En 2022 se celebraron en Budapest. En 2023, en Fukuoka. En 2024, en Doha. A partir de este Singapur 2025 recobrarán su bienal periodicidad con las ediciones ya designadas de 2027 (de nuevo Budapest) y 2029 (Pekín).
Ausencias un año después de los Juegos
Así que, entre la depresión post-Juegos y los sucesivos agobios anuales, van a faltar algunas máximas figuras en la próspera ciudad-Estado del Sudeste asiático. Se conceden un respiro físico y mental, por ejemplo, tres fenómenos como el húngaro Kristóf Milák, el estadounidense Caeleb Dressel y el británico Adam Peaty. Está embarazada Sarah Sjöström, la «reina» de Suecia, que espera en agosto su primer hijo. En la radiante galaxia femenina australiana, se toma un año sabático Ariarne Titmus. Y Emma McKeon ha decidido retirarse de las piscinas de competición.
Pero el catálogo de comparecientes abruma. Estados Unidos aporta a Luke Hobson, Bobby Finke, Shaine Casas, Michael Andrew, Carson Foster, Torry Huske, Kate Douglass, Simone Manuel, Gretchen Walsh, Katie Ledecky, Regan Smith, Lilly King...
Australia acude con Kyle Chambers, Cameron McEvoy, Mollie OCallaghan, Kaylee McKeown... Otros países derraman estrellas. Para abreviar, eligiendo un solo nombre por país, hombre o mujer, brillan Zhanle Pan (China), David Popovici (Rumanía), Lukas Maertens (Alemania), Thomas Ceccon (Italia), Benjamin Proud (Gran Bretaña), Ruta Meilutyte (Lituania)... Y, obviamente, Léon Marchand y Summer McIntosh. El francés y la canadiense forman la pareja estelar del Campeonato. Su máxima expresión. La 'crème de la crème'.
La canadiense Summer McIntosh.OLI SCARFFAFP
Marchand nadará las mismas pruebas que le proporcionaron los correspondientes oros en París: los 200 mariposa, los 200 braza y los 200 y 400 estilos. McIntosh, aún con 18 años (cumplirá 19 el 18 de agosto), se atreverá, según sus hazañas en los 'trials' canadienses, con cinco: las dos de estilos, los 400 y 800 libre y los 200 mariposa. En París ganó la mariposa y los dos estilos. Y fue plata en los 400 libre, en la llamada, aunque en natación no se corra, «carrera del siglo», dominada por Ariarne Titmus y con Katie Ledecky en el bronce. Titmus estableció entonces un récord del mundo que McIntosh le ha arrebatado este año, en junio, en esos 'trials' canadienses.
A causa de las sanciones a Rusia por la invasión de Ucrania -ocioso es recordarlo-, los Campeonatos, destinados a celebrarse en Kazán, fueron «desviados» a Singapur. Los nadadores rusos no pueden participar como tales. Pero 30 de ellos (18 hombres y 12 mujeres) son de la partida como NAB (Neutral Athletes B), sin derecho a la bandera y el himno nacionales. No forman una expedición cualquiera. Hay mucho talento ahí. Especialmente en los casos de Kliment Kolesnikov, plusmarquista mundial de los 50 espalda, y Evgenyia Chikunova, 'recordwoman' de los 200 braza. Kolesnikov renunció a París porque no estaba de acuerdo con semejantes condiciones de participación. Pero se lo ha pensado mejor esta vez.
Desde una guardería china situada en las controvertidas profundidades no sólo deportivas del gigante amarillo, aparece Yu Zidi, una niña de 12 años, especialista en 200 mariposa y en 200 y 400 estilos. Se entrena en la ciudad de Hengschui, al sur de Pekín, en la provincia de Hebei, y ha nadado en tiempos de finalistas olímpicas y mundiales. World Aquatics (la Federación Internacional) establece los 14 años como edad mínima para competir en los grandes eventos. Excepto en casos excepcionales, sostenidos por las marcas. Y a fe que éste lo es. La precocidad ha sido siempre una de las características de la natación. Pero Yu Zidi se encuentra en un estadio cronológico previo a la precocidad: en la mismísima infancia. En la descripción de sus capacidades, baste decir que, a su edad, a esos 12 insólitos años, Summer McIntosh, un auténtico prodigio tempranero, nadaba en registros bastante peores.
España, sin Hugo González
España envía a Singapur una delegación de nueve hombres y siete mujeres, sin Hugo González, vigente campeón mundial de 200 espalda, en baja forma tras la descompresión olímpica, su traslado de Estados Unidos a Tarrasa y los cambios en sus programas de entrenamiento. Tampoco es de la partida, naturalmente, Mireia Belmonte, aún oficialmente en activo. Sí, en cambio, repescado, Carles Coll, campeón mundial de los 200 braza en piscina corta. El equipo es joven, con las sensaciones de Luca Hoek (17 años) y María Daza (18 en agosto), que traen oros de los Europeos júniors, en los que también destacaron Jimena Ruiz y Estella Tonrath.
Estados Unidos reúne históricamente 606 medallas (254-205-147), por delante de Australia, con 278 (101-107-70). España ocupa la decimoctava posición con 18 (5-7-6).
Carlos Alcaraz, actual número 3 del mundo, debutó con victoria, por 7-6 (3), 3-6 y 6-1, ante el neerlandés Botic Van de Zandschulp (84), en la primera ronda del ATP 500 de Rotterdam. Se medirá al ganador del duelo entre el canadiense Felix Auger-Aliassime y el italiano Andrea Vavassori en los octavos de final.
Alcaraz suma así su tercera victoria ante el neerlandés en el cara a cara particular (3-1), a pesar de que en el último duelo Van de Zandschulp eliminó al del Palmar en la segunda ronda del último Abierto de Estados Unidos, en tres sets (6-1, 7-5, 6-4).
Además, el de Wageningen fue quien venció a Nadal en el último encuentro del balear en su carrera en la final entre ocho de la Copa Davis en Málaga por un doble 4-6 en los cuartos de final que cruzaron a España y a Países Bajos.
El murciano empezó el encuentro con un juego agresivo pero precipitado, con exceso de riesgo desde el fondo de pista y abusando de las voleas, lo que le llevó a perder el servicio en el tercer juego, y le obligó a ir a remolque el resto del set.
Los fallos de Carlos
Delante tenía a un gigante neerlandés con las ideas muy claras: apoyarse en su revés para salir de los aprietos y 'machacar' con la derecha las bolas a media pista del rival, un muro paciente y sin fisuras que esperaba a los fallos de Carlos.
La rotura de Van de Zandschulp al murciano en el quinto juego parecía definitivo para el set, sin embargo Alcaraz se repuso y llevó al rival al tie-break, donde se impuso por 7-3 con comodidad.
El segundo set empezó con susto para el del Palmar, que tuvo que salvar dos pelotas de rotura ante un neerlandés un poco más agresivo y muy metido en pista.
Van de Zandschulp acabó por romper el servicio de Alcaraz, de nuevo en el quinto juego, ante la desesperación del español, que veía como poco a poco su rival le iba comiendo terreno y no cedía su saque.
Siempre a remolque, el murciano intentó volver a darle la vuelta al marcador, pero a diferencia del primer set, el neerlandés estuvo más entero con su saque y disipó cualquier esperanza de remontada de Carlos con un 6-3 final.
La manga para el desempate no pudo comenzar mejor para Alcaraz, que repuesto mentalmente y más acertado con la derecha empezó mandando 3-0 en el tanteo ante un Van de Zandschulp sin soluciones ni reacción.
El ritmo del número tres del mundo había subido considerablemente, sobre todo en el duelo de derechas en el que se encuentra siempre tan cómodo, además de mejorar sus prestaciones al servicio.
Con 4-1 a favor, el español logró romper al neerlandés y matar definitivamente el partido, que sólo tuvo un dueño en un tercer set que terminó 6-1 y un partido que duró 2 horas y 27 minutos.
En el duelo español de dieciseisavos de final se impuso el 44 del mundo Pedro Martínez -por 6-3 y 6-2- a Roberto Bautista (52) y se enfrentará en la próxima ronda al ganador del encuentro entre el danés Holger Rune (14 del mundo) y el italiano Lorenzo Sonego (34).