“Ojalá encontremos algo para decir que fue penal. Porque primero dijo el árbitro que fue mano y luego que hubo algo de Koke“. Esas eran las palabras de Diego Simeone tras la conclusión del encuentro en el que su equipo cayó derrotado ante el Lille en el Metropolitano por 1-3. Pero, 12 horas después, nadie la ha encontrado.
Así, el club rojibanco ha decidido presentar una queja formal a la UEFA por la resolución de una jugada que marcó el devenir del partido en el feudo colchonero. El tercer gol francés ya llegó en el último minuto de partido con los de Simeone volcados en el área de Chevalier.
Al volver al minuto 74, nadie del mundo del fútbol encuentra una explicación no sólo a lo que sucedió, tampoco a lo que se interpretó. En la salida de un córner, un balón llovido cae entre Koke y los jugadores franceses, Alexsandro y André. El esférico golpea en la mano de André y queda muerto entra las piernas de los tres hasta que el capitán rojiblanco consigue sacarlo con la puntera tras varias patadas al aire.
Un momento después, Marco Guida, señala el punto de penalti y se desata la locura dentro y fuera del campo. En un inicio el italiano parece indicar que fue un toque con la mano el que le inclina a pitar penalti, algo inverosímil ya que el responsable es un jugador francés. Entonces, y tras unos minutos de deliberación con la sala VAR y sin acudir a la pantalla del videoarbitraje, el colegiado reitera su decisión.
“No sé, él ha dicho que la mano, pero al final no sé qué ha pitado. Nadie entiende, espero lo entienda él”, afirmó Jan Oblak a los medios depués del encuentro. Y Julián Álvarez añadía el factor de la mano en ataque como un elemento que excluye todo lo que ocurre posteriormente. “Fue decisiva en el partido”, afirmó el argentino. Y Simeone sentenciaba poco después: “No fue nada, muchacho”.
En el club rojiblanco están indignados con una jugada que no tiene explicación. Consideran que es una acción sin zonas grises ni interpretaciones limítrofes. A su juicio es claro que “nadie ve nada punible” y reiteran, como afirmaba Julián, que esa mano previa anularía cualquier circunstancia posterior.
Desde la entidad colchonera no comprenden por qué la tecnología no sirvió en la señalización de este penalti, que les deja fuera de los puestos de clasificación de la Champions League. Una competición en la que no deberían ocurrir situaciones como esta.
ABRAHAM P. ROMERO
Enviado especial
@AbrahamRomero_
Riad (Arabia Saudí)
Actualizado Martes,
9
enero
2024
-
16:46El uruguayo fue el protagonista de una previa en...
"Aquí manda usted", le dijo en una ocasión Luis Aragonés a Xavi Hernández. Tras esas palabras, llegó la mejor selección española de la Historia, la única que ha logrado de manera consecutiva Eurocopa, Mundial, Eurocopa. El Sabio de Hortaleza sabía que en el pequeño mediocentro de Terrassa estaba la clave del juego del equipo y así se lo hizo saber. El fútbol, a día de hoy, debe mucho a una posición desde la que hay un especial conocimiento del juego.
"Yo a mis mediocentros, sólo tenía que mirarlos y ya me colocaban al equipo". Es Juan Antonio Anquela, 'Anquelotti', el entrenador de aquel maravilloso Alcorcón que sorprendió al Real Madrid en una Copa del Rey con un juego vistoso el que alaba esa posición y lanza la tesis del razonamiento: "Normalmente, son la conexión con el entrenador".
Carlo Ancelotti, Pep Guardiola, Xabi Alonso, Arteta, Simeone o el citado Xavi, entre otros muchos, fueron "conexiones con el entrenador" en sus carreras como jugadores. Ahora, ocupan los principales banquillos de Europa, unos con más éxito que otros. Estamos en la época de los entrenadores mediocentros.
Ancelotti en el encuentro ante el Leipzig.EFE
"Quizás la posición sí te permite entender mejor las fases del juego", comienza el gran organizador y hoy entrenador, Rubén de la Red. El que fuera futbolista del Real Madrid, Getafe y de la Selección Española tuvo que dejar el fútbol muy pronto. Tenía 25 años cuando anunció su retirada por problemas de salud, era 2010 y desde ese momento ya se puso con los carnets de entrenador. Probó un poco de comentarista de televisión, pero en seguida se dio cuenta que lo suyo eran los banquillos.
"Estar en el medio te obliga a entender mejor la situación de cada uno de tus compañeros, ahí sí creo que tenemos un plus a la hora de ser entrenadores", apunta De la Red, aunque no cree que el hecho de haber sido mediocentro te convierta en un buen entrenador per se sino que hace falta mucho "trabajo y capacidad de adaptarte a nuevas situaciones".
Esas características son las que ensalzan en la Escuela de Entrenadores de la Real Federación Española de Fútbol de la que Pep Sansó fue director. "Ser capaz de entender el juego es un punto diferencial", destaca Sansó porque es lo que te permitirá posteriormente "crear tu propia idea de juego". Los mediocentros no juegan solo por intuición sino que añaden conocimiento de juego y eso, "sin ser un requisito imprescindible, ayuda mucho a ser luego entrenador", aprecia el formador.
Simeone observa el partido ante el Sevilla.EFE
Por la escuela en el tiempo en que Sansó era director han pasado los Raúl, Xavi o Xabi Alonso, entre otros muchos. "Alumnos especiales", les califica el formador por las vivencias que han tenido en su carrera, pero les divide en dos tipos: los que llegan con una idea fija como Xavi o Guardiola y los que se adaptan al equipo o a la idiosincrasia del club en el que recalan. "Xabi Alonso ha bebido de muchísimas fuentes y esa influencia se nota en su potencial como entrenador", destaca Sansó. El donostiarra ha pasado por las manos de Mourinho, Benítez, Guardiola o Ancelotti. Casi nada a la hora de ampliar su riqueza táctica en los banquillos.
Porque eso, el estilo o la idea, es lo que define a los técnicos más allá de lo que hayan sido en sus carreras como futbolistas. No obstante, como dice el refranero español, la cabra tira al monte, así que muchos entrenadores tienen un modo de juego, normalmente, parecido al que desarrollaron en el campo. "Mira al Cholo o Xavi. Es un rasgo que aportas al equipo. Inconscientemente tiras hacia lo que más te llena y son tus condiciones como futbolista", cuenta De La Red.
Xavi en el duelo ante Granada.AP
Otra de las cosas que beneficia a los mediocentros a la hora de convertirse en entrenadores es su capacidad de "hablar, mandar y corregir", como destacaba De La Red de su época de jugador. Esa personalidad ayuda a llevar plantillas, que no es una parte pequeña del trabajo de técnico. "Lo más difícil de un entrenador es manejar el vestuario y que los futbolistas crean en lo que les dices", expresa Anquela.
No se puede decir, precisamente, que José Mourinho sea un mal entrenador. Sin embargo, el mensaje dejó de calar en el vestuario de la Roma. Llegó Daniele De Rossi y el equipo romanista obtuvo 4 victorias en sus primeros cinco partidos. La derrota se la infligió el Inter de Milan, líder destacado de la Serie A italiana. "Soy hijo futbolístico de Spalleti, él dice: 'si juegas bien y pierdes, significa que algo has hecho mal", valoró el que fuera mediocentro y capitán del equipo de la capital italiana.
Mayoría en LaLiga
Xavi, Xabi Alonso, Guardiola, Arteta, Ancelotti, Simeone, cada uno en su estilo, pero todos observando el campo desde los 360º, como le gusta decir a De la Red. Otro jugador que militó en esa posición acaba de ocupar un puesto de entrenador en LaLiga EA Sports. Íñigo Pérez, ex mediocentro de Athletic Club y Numancia entre otros clubes, es el sustituto de Francisco en el banquillo del Rayo Vallecano.
Los mediocentros están de moda en los banquillos. Nueve entrenadores de LaLiga EA Sports han desempeñado su carrera de jugadores en esa posición. Hay una anécdota que cuenta Sansó en unas jornadas de evaluación a los nuevos técnicos en 2018, en las que Luis Enrique bromeó diciendo que no se podían hacer más cursos de entrenadores porque allí había 800 aspirantes a sólo 40 banquillos profesionales.
Afortunadamente, como dice el ex director de la escuela, "el entrenador español es muy valorado en todo el mundo" porque entiende muy bien el juego, lo que le abre la puerta a otros lugares del globo. Si además ha sido mediocentro, en los tiempos que corren, parece que las posibilidades se multiplican.
Entre el Metropolitano y el Coliseum hay 23,3 kilómetros por carretera, ida y vuelta, 46,6. Esa es la distancia que el Atlético de Madrid tendrá que recorrer durante el mes de noviembre. El Getafe es el único partido fuera de los rojiblancos de los próximos seis encuentros, cuatro de liga y dos de Champions League. Lo que significa que el club colchonero no tiene que salir de la Comunidad de Madrid durante un mes de competición. "Al final todo se compensa", responden fuentes del Atlético, que tienen un mes de diciembre más movido.
El vecino, por contra, tendrá que desplazarse 5.875 kilómetros durante el mismo periodo, 11.750 si es ida y vuelta, y el FC Barcelona recorrerá 3.951 kilómetros de ida y 7.902 si contamos también el retorno. Si el Atlético jugará ante el Sevilla, Levante y Oviedo en casa en Liga, hará lo propio en Champions ante el Unión Saint Gilloise y el Inter de Milán. El Barça se enfrentará en casa a Elche, Athletic y Alavés en Liga y fuera en competición doméstica lo hará con el Celta y en Europa ante Chelsea y Brujas. "Lógicamente es mucho mejor no salir de Madrid, pero luego en diciembre también tenemos varios partidos seguidos fuera" recuerdan desde el entorno rojiblanco.
Pero el Madrid tiene la situación contraria a los colchoneros. Todos los partidos de noviembre de los blancos son fuera de casa menos el encuentro contra el Valencia del día 1. Así, el equipo de Xabi Alonso se desplazará a Vallecas, el único que se juega dentro de la Comunidad, a Elche y a Girona en Liga. En Champions viajará a Liverpool y a Atenas.
Lógicamente, también hay que mencionar que muchos futbolistas de los tres grandes del fútbol español tendrán parón internacional entre el 10 y el 21 de noviembre. El Atlético, que cuenta con media selección argentina, perderá a muchos de sus internacionales para el duelo amistoso ante Angola en el país africano del día 14. Por contra, los internacionales españoles viajarán a Georgia el 15 y recibirán a Turquía en La Cartuja el 18. Habrá que ver cuántos aporta el FC Barcelona a esos encuentros, aunque muchos de sus internacionales están lesionados o tocados. El Madrid también sufre un gran éxodo en estos paréntesis.
El Cholo siempre se ha mantenido muy crítico con respecto al calendario que hoy favorece al Atlético de Madrid. El argentino ha llegado a comentar en varias ocasiones que durante el año se intenta "descansar más que entrenar" ya que al estar en tres competiciones es complicado realizar entrenamientos demasiado específicos tácticamente. Aunque el pasado domingo, en la sesión abierta al público, se pudo ver cómo los que fueron titulares ante el Betis realizaron una labor específica de mejora de la presión y basculación de una banda a otra. Eso sí, apenas 15 minutos.
No obstante, desde el club aseguran que, pese a reducirse los viajes, no da tiempo a hacer más entrenamientos específicos. "Lo fundamental es que el jugador tiene más descanso, en eso sí que se le saca partido", apuntan fuentes del vestuario. Los futbolistas están encantados con este mes y lo agradecen especialmente cuando vienen de una temporada en la que tuvieron que desplazarse a Estados Unidos por el Mundial de Clubes.
Menos fatiga muscular
Los expertos en la salud física de los jugadores son contundentes. "Es lo mejor que les puede pasar", explica Alejandro Lanchas, ex fisioterapeuta del Leganés y director del centro 180º. Para el especialista jugar en casa "elimina el estrés del viaje y reduce la fatiga a nivel muscular" lo que, lógicamente, beneficia a la hora de prevenir lesiones en los jugadores. Recuerda que vuelos de más de dos horas producen "acortamiento de las cadenas musculares" que pueden afectar a nivel deportivo. "Ya no es sólo el estrés del viaje a nivel físico, salir de tu casa y separarte de tu familia afecta a nivel emocional", añade el fisioterapeuta.
Encima, el Atlético afronta este mes con la enfermería casi vacía. Tras el susto dado por Pablo Barrios en el partido ante el Betis, parece que el internacional español no podrá estar ante el Sevilla en el encuentro de esta tarde en el Metropolitano, pero quizás llegue para el duelo de Champions ante el Union Saint Gilloise. Es el único lesionado de Simeone para este mes de "sofá y manta" en casa. Para noviembre ni le hace falta al Atlético haber roto el maleficio de sus duelos a domicilio ante el Betis. Sólo tendrán que afrontar lejos del Metropolitano el partido ante el Getafe, un duelo, por cierto, en el que se despidieron prácticamente de la lucha por LaLiga la temporada pasada.