El defensa del Barcelona Iñigo Martínez ha protagonizado un tenso incidente con un aficionado, aparentemente menor de edad, a la salida del entrenamiento del equipo. A través de un vídeo que ha corrido como la pólvora en redes sociales, se ve cómo el central se baja de su coche para encararse con el chico. “¡La última vez que me llamas tonto, la última!”, le grita en reiteradas ocasiones.
El chico parece querer replicarle, pero el jugador no le da pie, y repite varias veces el mismo mensaje: “¡Que sea la última vez que me insultas, y tu amigo lo mismo!”, dice, visiblemente enfadado y dirigiéndose a quien está grabando la escena.
Tras unos segundos de mucha tensión, el futbolista deja de señalar con el dedo al chico y se da la vuelta camino de su vehículo, que había dejado abierto en mitad de la calle. “¡Y no vayas de chulo, que me cago en Dios!”, termina diciendo.
Se da la circunstancia que hace unos meses su compañero, Joao Cancelo, se había quejado de un grupo de chavales que siempre están en la salida de los coches de los jugadores del Barcelona: “Sois muy pesados, no podemos estar firmando todos los días”, dijo el portugués.
Hace tiempo que en el periodismo deportivo, por encima de cualquier otra cosa, se frunce el ceño. Se lanzan opiniones a un volumen muy alto y dotando de una solemnidad incomprensible a un entretenimiento magnífico, pero superficial por naturaleza. El futuro de Mbappé, el peinado de Xavi, la entonación del árbitro del VAR... todo es cuestión de Estado. En ese ambiente, el éxito de David Sánchez (Barcelona, 1974) es refrescante porque ha llegado a ba
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Un paseo por la Villa Olímpica dos días antes del comienzo de unos Juegos es un deambular de deportistas ansiosos por que empiece la acción. Un Babel de superdotados, una ciudad dentro de una ciudad, 14.000 personas (atletas, entrenadores y resto de personal) dispuestos a vivir una experiencia única y, si es posible, ganar una medalla. En Saint Denis, no muy lejos del estadio, se levanta un pasarela arquitectónica con 82 edificios y 3.000 apartamentos. Todas las comodidades posibles para los protagonistas de las dos próximas semanas y también un buen puñado de curiosidades.
A la vuelta del edificio que ocupa la delegación española, engalanado cada balcón con una bandera rojigualda, y que linda con el de la italiana, un grupo de deportistas de Samoa rompe la tranquilidad con un potente altavoz en el que suena música reggae. La Villa cumple estereotipos. En el bloque de Australia te recibe un canguro y un koala. Un poco más allá, Teddy Riner, posiblemente la mayor leyenda en activo del deporte francés -tres oros olímpicos en judo, 11 veces campeón del mundo- hace cola pacientemente para la típica foto con los aros olímpicos. Es el rincón más concurrido e instagrameado.
En la Villa hay supermercado (2.000 metros cuadrados de Carrefour), servicio de basuras, alquiler de bicicletas, línea de autobus, lavandería, un centro de información turística, conserjería de maletas, un banco, servicio postal, un pequeño hospital, un Fnac, salón de belleza con peluquería y servicio de manicura y pedicura, un par de áreas de juegos recreativos que incluyen dardos, videojuegos y hasta un futbolín... Por haber, hay hasta un rincón para los fumadores. Hay bebederos de agua en cada rincón y muchos árboles. En la Villa de los Juegos de París, por supuesto, hay un gimnasio de 3.000 metros cuadrados con más de 300 máquinas y un abrumador restaurante.
Para comer, los deportistas tienen cuatro opciones gastronómicas elaboradas por tres prestigiosos chefs (francesa, internacional, africana y caribeña y asiática) y 3.262 asientos. Más de 500 recetas sin descanso, pues el restaurante está abierto las 24 horas. Y, por primera vez, comen en platos de porcelana y cubiertos no desechables.
Además de todos esos servicios, están las peculiaridades. Un piano al aire libre para quien quiera arrancarse, un rincón donde se imparten clases de taichi... Y varios campos de petanca, un deporte tan francés.
Y las novedades. La principal, la sala de lactancia y la guardería. Una iniciativa de la que el CIO tomó nota tras las denuncias de Ona Carbonell en los pasados Juegos de Tokio.
Pero el producto estrella de la Villa son las camas, en cuyo cabecero reza un lema: "Sueña con tus hazañas de mañana". Porque, como ya ocurrió en Tokio, su somier está hecho de cartón. Diseñadas también por la marca japonesa Airweave, se componen de tres módulos que suman 190 centímetros -¿cómo lo hará Wembanyama?- y que se customizan para cada deportista. Para eso se les realiza un escaneado previo de su fisionomía. Todo sea por el descanso: los colchones son de un llamativo plástico (¿?) lavable.
Las habitaciones dobles -también hay apartamentos más grandes- tienen 12 metros cuadrados, no tienen cocina y son minimalistas: paredes blancas y suelo de parquet. No tienen aire acondicionado y sí ventiladores. Hay un perchero, una lámpara de lectura y una mesita de noche. Nada de lujos.
Es difícil imaginar algo que les pueda faltar a los deportistas en la Villa, un impresionante espacio cuya inversión fue de casi 1.500 millones de euros y que, después de los Juegos Paralímpicos, se destinará a casas familiares y de estudiantes.
El croata Luka Modric lamentó el anuncio de retirada de Toni Kroos, con quien forma una pareja legendaria para la historia del Real Madrid, confesó sentirse "muy triste" por el adiós de "una leyenda" y aseguró que nunca olvidará la "época dorada" que han compartido en el club blanco.
"Querido Toni, se me hace difícil escribir estas palabras. El mundo del fútbol está triste porque se va un futbolista histórico y te reconozco que yo también estoy muy triste. Amigo, eres una leyenda de este deporte y una leyenda del Real Madrid", inició Modric su mensaje en redes repleto de emoción.
"He disfrutado mucho jugando a tu lado. De verdad que ha sido un honor compartir el centro del campo del Real Madrid contigo. Tienes unas cualidades que te hacen un futbolista único y especial, y ya no habrá otro Toni Kroos", añadió.
Junto a imágenes de diez años juntos en el Real Madrid, de complicidad, con trofeos conquistados como la Liga de Campeones, LaLiga o el Mundial de Clubes, Modric marcó un último reto juntos.
"Inolvidables noches europeas, títulos, la magia del Bernabéu.... nunca olvidaremos esta época dorada en el club de nuestras vidas. Lo has conseguido todo pero todavía te queda una. Juntos a por la 15. Te echaré de menos, amigo", sentenció.
Kroos respondió a la publicación de Modric con mucho afecto. "Tantos recuerdos... guau. ¡Este amor durará para siempre, amigo mío!", aseguró en un hilo de respuestas al que se sumó Vinicius: "Los mejores!!!".
Kroos entrega "el control" a Bellingham
El alemán respondió al mensaje de agradecimiento de Jude Bellingham por el año que han compartido en el Real Madrid y, tras anunciar su retirada, apuntó que el centrocampista inglés "está listo para tomar el control" del juego del equipo en su ausencia.
"Un año no fue suficiente. Gracias por todo lo que has dado al juego, ha sido un absoluto placer disfrutar de tu fútbol y de tu personalidad como aficionado y aún más como compañero de equipo", escribió Bellingham en redes sociales junto a una fotografía abrazando a Kroos.
El inglés enfocó al último reto junto a Kroos, la conquista de su primera 'Champions', que sería la sexta del alemán, el 1 de junio en Wembley.
"Todavía queda trabajo por hacer esta temporada, pero te deseo todo lo mejor para lo que sea que venga a ti y tu familia. ¡LEYENDA!", añadió.
Kroos no tardó en responder a la publicación de su compañero y apuntó a Bellingham como su heredero al mando del fútbol del Real Madrid.
"Gracias mi amigo. Más años juntos habrían sido injustos ¡Disfruté cada minuto desde que te uniste! ¡Estás más que listo para tomar el control! A los 20 años...", escribió Kroos.