Una estratagema de Hamilton como plan de Verstappen para ser campeón: “Que tengan cuidado. No tengo nada que perder”

Una estratagema de Hamilton como plan de Verstappen para ser campeón: "Que tengan cuidado. No tengo nada que perder"

El primer mensaje de radio para Gianpiero Lambiase, su ingeniero de pista, ya suponía una declaración de intenciones: “Mañana vamos a divertirnos”. Aunque esa advertencia subió de tono cuando Max Verstappen quiso atender ayer a la prensa en la zona mixta de Yas Marina: “Que tengan cuidado. No tengo nada que perder. Vamos a darlo todo”. Desde la pole, la octava del año, el holandés apura hoy sus opciones de tumbar a Lando Norris y Oscar Piastri, en busca de su quinto título. Entre todas sus probabilidades, ninguna mejor que una victoria combinada con el cuarto puesto de Norris.

“Voy a intentar ganar la carrera, pero necesitamos un poco de ayuda o un poco de suerte para conquistar el campeonato”, admitió Mad Max, sabedor de la dificultad del desafío. Porque no se trata simplemente de convertir la pole en triunfo, como viene sucediendo en Abu Dhabi desde 2015, sino de introducir elementos de distorsión que distraigan a Norris de su objetivo. En el paddock todos saben que Verstappen va a intentarlo. La duda es saber hasta dónde forzará la máquina.

George Russell, uno de sus más enconados adversarios en la parrilla, confirmó ayer que le había pedido un rebufo durante la qualy, aunque el holandés no quiso prestarse a ello. Sin embargo, el líder de Mercedes tiene muy claro que tras la primera vuelta de hoy, Verstappen “no se va a separar” del pelotón. Es decir, que va a recurrir a la misma táctica empleada en 2016 por Lewis Hamilton ante Nico Rosberg en ese mismo circuito. “Sí, será algo así. Espero que lo haga y entonces tendremos opciones de podio”, adelantó Russell.

El cuerpo a cuerpo

Durante aquella carrera, en la que también se decidió el campeón, Hamilton mantuvo a menos de un segundo de distancia a su gran rival por el título. Justo lejos del alcance de su DRS, pero ralentizándole lo suficiente como para dejarlo a merced de sus enemigos. De hecho, el alemán tuvo que efectuar una arriesgadísima maniobra frente a un joven Verstappen, debutante aquel año en Red Bull.

Y es que aquella estratagema no bastó a Hamilton, vencedor en Abu Dhabi, aunque frustrado al ver cómo Sebastian Vettel o Daniel Ricciardo no podían interferir en el camino de Rosberg, proclamado campeón por sólo cinco puntos. Por tanto, Verstappen podría preferir otra alternativa, de más imprevisibles consecuencias. “Todo puede cambiar si Lando hace una buena salida y toma el liderato”, avanzó Russell, con su acento sibilino.

Hoy, Verstappen podría simplemente preferir un cuerpo a cuerpo con Norris, una de sus víctimas predilectas a lo largo de las dos últimas temporadas. En ese duelo directo, Max ha evidenciado una notoria superioridad. Así que si debe comprometer sus opciones de victoria para forzar un posible error del británico, uno de sus mejores amigos fuera de la pista, tampoco va a titubear.

Norris, al volante del MCL-39, durante la última sesión libre.AFP

Este plan trae también a la memoria la formidable actuación de Sergio Pérez ante Hamilton en Yas Marina. En aquella carrera de 2021 se introdujeron un par de cambios en la cuerda del trazado, eliminando las dos chicanes más lentas. Desde entonces, las cifras de adelantamientos han mejorado. En 2017, por ejemplo, se registraron unicamente cinco, mientras en las tres últimas ediciones se mejoró ostensiblemente (53 en 2022, 60 en 2023 y 31 en 2024).

“preparados para cualquier escenario”

En caso de que todos estos factores aún no bastasen, Verstappen aún puede aferrarse al clima de pánico desatado en McLaren. Desde la doble descalificación de Las Vegas, por una infracción en el suelo del MCL-39, hasta la desastrosa estrategia del pasado domingo en Qatar, la escudería de Woking parece un barco a la deriva. “Espero que hayan logrado una vuelta mágica y mañana paguen las consecuencias de esos reglajes, aunque no estoy seguro de que sea así”, avanzó Zak Brown, CEO de McLaren, a modo de aperitivo.

En el hospitality papaya andan considerando todas las posibilidades. “Las analizaremos a fondo”, añadió el estadounidense, dejando constancia que el team principal, Andrea Stella, y sus ingenieros estarán “preparados para cualquier escenario”. Por supuesto, nadie osa mencionar 2007, cuando el equipo capitaneado por Ron Dennis lo echó todo a perder frente a Kimi Raikkonen.

Tampoco manejan, al menos públicamente, una temeridad por parte de los aliados de Verstappen. Isack Hadjar parte desde la novena plaza a bordo de un Racing Bulls, el equipo filial de Red Bull. Justo por delante de Yuki Tsunoda, a quien relevará la próxima temporada en ese asiento. Por la mañana, durante la última sesión libre, Norris se había dado un susto de muerte frente al japonés, que se interpuso en su camino. Esa maniobra fue castigada por los comisarios con un warning y una multa de 10.000 euros.

kpd