El ex del Dinamo de Kiev, quien consiguió marcar 94 tantos en 236 partidos oficiales y repartió 64 asistencias, podría estrenarse al fin con el conjunto gerundense en su choque contra los azulgrana de este sábado en Montilivi
Viktor Tsygankov, seguro, arde en deseos de estrenarse con la camiseta del Girona. El pasado fin de semana, entró en la convocatoria de Míchel para el duelo a domicilio con el Villarreal, pero, finalmente, no tuvo minutos. Ante el Barça, en cambio, el extremo ucraniano puede convertirse en el mejor estilete para los gerundenses frente a una defensa, la azulgrana, que se está mostrando prácticamente infranqueable en la Liga. No en vano, el equipo que entrena Xavi Hernández ha encajado únicamente seis tantos en los 17 partidos que ha disputado hasta ahora, a falta de jugar el choque con el Betis aplazado por la Supercopa de España.
En Ucrania, en las filas de todo un clásico como el Dinamo de Kiev, Tsygankov firmó unos números más que destacables para un extremo. En total, consiguió marcar 94 tantos en 236 partidos oficiales y repartió 64 asistencias. A pesar de todo, optó poner fin a su etapa en un equipo que está muy lejos ahora mismo de hacer justicia a su leyenda, por toda una suma de circunstancias en las que, sin duda, la guerra desatada tras la invasión rusa de finales de febrero del año pasado también habrá jugado un papel determinante en su decisión por buscar un nuevo destino, por mucho que el jugador se esforzara en desmentir tal extremo en su puesta de largo oficial con su nuevo equipo, hace ya unos días.
«Es un desastre para nuestro país y para nuestra gente, algo que nunca imaginé y que supone una situación muy difícil. Espero que acabe todo lo antes posible, pero mi fichaje no tiene nada que ver con la guerra», recalcó en su primera rueda de prensa como jugador del Girona. El club gerundense ha apostado fuerte por él. A pesar de que terminaba su contrato con el Dinamo de Kiev el verano que viene, prefirió pactar un traspaso por unos cinco millones de euros y ceder el 50% de los beneficios de una posible venta en el futuro para poder contar con él lo antes posible, aunque la situación del equipo, situado ahora mismo en el decimoprimero puesto de la tabla, podría definirse como aparentemente cómoda. En su llegada al club, según ha señalado el propio jugador, han tenido mucho que ver tanto una conversación con el propio técnico como la intervención de Pere Guardiola. De hecho, incluso confesó que el hermano del actual técnico del Manchester City y ex entrenador barcelonista fue quien le convenció de hecho para cerrar su fichaje.
La historia personal de Tsygankov, además, resulta curiosa. El extremo, que puede actuar también en la posición de interior derecho, cuenta con doble nacionalidad israelí y ucraniana, dado que nació el 15 de noviembre de 1997 en la ciudad de Nahariya. Su padre, Vitaly, también futbolista, jugaba entonces en la Liga de Israel, aunque regresó a Ucrania cuando Viktor era todavía muy joven. El ahora jugador del Girona, de hecho, empezó a despuntar de niño en el fútbol formativo del Nyva Vinnytsia antes de incorporarse al club en el que jugaría la mayor parte de su carrera, el Dinamo de Kiev. Su estreno con el primer equipo llegaría el 14 de agosto de 2016 y sus actuaciones le llevarían a ser reconocido como uno de los más recientes MVP de la competición. Allí, además, lograría un total de seis títulos: una Liga, dos Copas y tres Supercopas ucranianas.
Internacional por Ucrania, Tsygankov debutó con la selección absoluta en noviembre de ese mismo 2016, en un encuentro con Finlandia valedero para la clasificación para el Mundial de Rusia, después de haber sido convocado previamente para medirse a Turquía y Kosovo y quedarse finalmente sin minutos. Hasta el momento, ha jugado un total de 42 encuentros como internacional absoluto, ha anotado siete goles y formó parte de la lista de futbolistas que defendieron los colores de su país en la última edición de la Eurocopa, en la que el conjunto ucraniano llegó hasta los cuartos de final.
El Barça, mientras, ha confirmado ya oficialmente la renovación de Marcos Alonso hasta el 30 de junio de 2024, con la opción de prorrogar por un año más su contrato. La cláusula de rescisión del defensa, cuyo compromiso con el club finalizaba inicialmente el verano que viene, en este caso, será de 50 millones de euros. El ex del Chelsea cuenta con la plena confianza de un Xavi que recalcó la importancia de sumar los tres puntos en Montilivi. «Hay que vencer al Girona, porque aquí se ganan vales de tranquilidad de dos o tres día. Esto es el Barça, lo conozco muy bien, y siempre hay críticas. Y si no ganamos, será otra vez una hecatombe tremenda», sentenció.
