Pau Gasol quiso ofrecer su apoyo a Jenni Hermoso y al fútbol femenino después de los hechos vividos por la jugadora durante la celebración por el Mundial de fútbol femenino. El ex jugador de baloncesto, que acudió este viernes a Manila, donde se celebra la fase final del Mundial de Baloncesto, confió en que “los organismos tomen las decisiones que tengan que tomar”.
“Es una cuestión de valores humanos, de sociedad y de país. La imagen en ese momento, que tenía que haber sido de orgullo, al final fue una imagen de vergüenza y de decepción. Me supo bastante mal”, afirmó .
Gasol intervino en la presentación del próximo campeonato del mundo en Alemania en 2026 y lamentó que la victoria de la selección femenina de fútbol en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda, el pasado 20 de agosto sobre Inglaterra, haya quedado en segundo plano por el comportamiento de Luis Rubiales en el palco y el beso a Jenni Hermoso en el podio.
“Sentí rabia en ese momento. Me afectó de manera negativa. Un momento tan bonito y tan histórico como que la selección femenina de España se proclame campeona del mundo y que los titulares se dirijan a las acciones del presidente de la Federación Española de Fútbol…”, añadió.
Gasol aseguró que esperaba una disculpa que no llegó. “Estaba expectante, a ver cómo ser resolvía… Esperaba que se pudieran tomar ciertas medidas y aceptar responsabilidades. Aceptar que “me he equivocado y lo lamento”. Es una cuestión de representación de un país y liderazgo”.
Además, el mítico jugador de baloncesto no dudó en mostrar su “apoyo a las jugadoras, a Jenni Hermoso, al fútbol femenino, al deporte femenino y a la figura de la mujer”. Y confió en que “los organismos tomen las decisiones que tengan que tomar”.
Luis De la Fuente y Dani Carvajal vieron cómo el discurso sobre el racismo en España se colaba en la previa del duelo de España ante Serbia por la petición de Vinicius para que a España le privaran del Mundial 2030 si volvían a sufrir episodios racistas. "España no es racista, es un ejemplo de convivencia, respeto e integración. Un espejo donde mirarse. Que siempre hay unos pocos indeseables, puede ser. Pero España no es racista", aseguró el seleccionador. Apostilló el capitán del Real Madrid: "Sé lo que sufre Vini y le apoyamos, pero más allá de ese pequeño grupo de personas, no considero que España no merezca celerar el Mundial. Presumo de que España no es un país racista".
Ahora bien, en lo que sí aceptó la petición de su compañero es en la idea de abandonar el campo si el brasileño vuelve a ser insultado. "Desde la Liga hay un protocolo y, aunque no sé lo que hay que hacer, no me parece una medida descabellada dejar el campo hasta que se identifique y se expulse a esas personas del campo".
La mente de ambos está en la selección y el duelo ante Serbia, pero por un resquicio se coló el Balón de Oro, al que Carvajal está nominado y contaría con el voto de De la Fuente, si pudiera. "Dos de los tres votos ya podéis imaginar para quién irían: Rodri y Carvajal lo merecen", admitió De la Fuente, que también podría recibir el premio al mejor entrenador.
Carvajal sabe que lo tendrá complicado. "Siento defensa es muy complicado, pero estar nominado ya me hace sentir orgulloso. España está volviendo al lugar que merece, con nuestros campeonados, la medalla olímpica, la selección femenina y las inferiores. Creo que Europa nos mirará con envidia", aseguró.
Serbia lo hará. Lo advirtió su seleccionador, Dragan Stojkovic. "No estamos capacitados para competir con España". Por si acaso, De la Fuente es prudente: "Enfrentarse a España es otra motivación pero la nuestra es ganar. Tenemos un inagotable deseo de mejora.
Se oyó un grito de pura felicidad a través de la radio. "¡Adoro conducir, adoro conducir en este circuito!", exclamó ayer Fernando Alonso, entre carcajadas, tras concluir séptimo en la sesión clasificatoria del GP de Mónaco. Por segunda semana consecutiva, el bicampeón se colaba en el top-10, territorio vedado durante las seis primeras carreras del Mundial. "Un día especial en la temporada. Definitivamente un buen paso", concluyó.
Ese salto cualitativo del que hablaba el asturiano obedece a las mejoras implementadas por Aston Martin. En sus manos, el AMR25 ya puede codearse con Williams o Racing Bulls para liderar la zona media. Y resulta más que pertinente adjudicarle esa cuota de mérito porque Lance Stroll partirá hoy penúltimo. El canadiense cayó de mala manera en la Q1 y además fue penalizado con tres posiciones. Sólo la sanción de 10 puestos a Oliver Bearman le evitará el indecoroso farolillo rojo.
En lo estrictamente cuantitativo, la progresión de Aston Martin puede contabilizarse en 63 centésimas: del 1:11.563 con el que Stroll marcó la referencia el año pasado en Q2 a este 1:10.924 de Alonso. Sólo Haas, con 91 centésimas respecto a la pasada edición supera a la escudería de Silverstone.
"Extremadamente contento"
En la parrilla de hoy se espera con expectación a Adrian Newey, el ingeniero más laureado de la historia, que estrena en el Principado su uniforme verde. En una vieja libreta, el británico volverá a anotar cada detalle de los rivales. "Algunas de nuestras herramientas son débiles, particularmente el simulador", ha advertido el gurú del diseño este fin de semana. A pesar del aviso y de los dos años en los que ha cifrado la viabilidad del proyecto, se percibe otro ambiente en el garaje.
Ahora ese optimismo hay que trasladarlo a la pista durante 78 vueltas. Sin titubeos estratégicos, porque hoy, por primera vez, habrá que cumplir dos paradas obligatorias en el Principado. "Podemos tener suerte y acabar cuartos o quintos, o tenerla mala y terminar de nuevo fuera de los puntos", vaticinó el doble vencedor en Le Mans. En caso de cumplir otra carrera fuera del top-10 superaria sus funestos registros de 2015 y 2017 con McLaren.
En cualquier caso, Alonso admitía ayer sentirse "extremadamente contento" por su rendimiento en la qualy. Sin una sola queja por esa milésima que le separaba de Isack Hadjar, un novato que sigue encandilando con su Racing Bulls. "Ha sido genial verle. Ha disfrutado mucho con esas vueltas, siendo el único que ha pasado a la Q2 con los neumáticos medios", recalcó Andy Cowell, CEO y máximo responsable de las operaciones en pista de Aston Martin.
Alonso, con el AMR25, el sábado en Mónaco.ASTON MARTIN
Ahora, el AMR25 presume de prestaciones incluso en un entorno tan hostil como Mónaco, plagado de curvas lentas, la debilidad por antonomasia de Aston Martin. Según las previsiones de Newey, a comienzos de julio llegará otro paquete de actualizaciones aerodinámicas en el GP de Gran Bretaña. Asimismo, el próximo viernes, la FIA aplicará una nueva directiva técnica en Montmeló relativa a los alerones delanteros. Si Aston Martin sabe adaptarse a estos criterios de flexión, aún puede acercarse más a los puestos de cabeza.
En lo más alto del Mundial continúa McLaren, que ayer festejó a lo grande el éxito de Lando Norris. Fue la primera pole en Mónaco para la escudería de Woking tras 18 años. Un bonito homenaje para Alonso, que se la había apuntado en 2007, cuando compartía box con Lewis Hamilton. Por contra, el heptacampeón cerró ayer la jornada con una sanción de tres puestos, por interferir a Max Verstappen en las inmediaciones de Beau Rivage.
¿Labor de equipo de Hadjar?
Mad Max se vio incapaz de seguir el rastro de Charles Leclerc y Oscar Piastri, segundo y tercero, aunque en carrera podría contar el apoyo de Hadjar, que parte justo detrás. Si el francés de Racing Bulls, escudería hermana de Red Bull, ejerce de muro de contención frente a Alonso, Hamilton y Esteban Ocon podría generarse un hueco idóneo para la primera parada de Verstappen.
A esa ruleta de las estrategias lanzará también sus dados Aston Martin. Queda por saber la magnitud de la apuesta. ¿Asumirá todos los riesgos o se conformará con un plan más conservador? Desde luego, poco o nada tiene que perder el equipo, séptimo en el Mundial a 37 puntos de la quinta plaza de Williams. Bastante más delicada se antoja la decisión de los candidatos a la victoria. Pese a la superioridad de efectivos de McLaren, nadie debería descartar a Leclerc. Entre otros motivos porque Norris únicamente convirtió en victoria cuatro de sus 10 poles previas.