Morata sobre su depresión: “Ocho de cada diez jóvenes lo sufren y mi objetivo es darle naturalidad, no dar pena”

Actualizado

Álvaro Morata no se recrea, pero tampoco huye. En su regreso con España después de la Eurocopa la salud mental ha vuelto a hacerse presente al confesar que la pasada temporada sufrió una depresión. Su enfermedad, que llegó a poner en riesgo su participación en el torneo, está superada y él la mira de cara. “No me gustaría hablar más del tema porque he hecho un documental donde se verá todo. Ocho de cada diez jóvenes sufre estas cosas y mucha gente tiene miedo a decirlo. Mi objetivo no es dar pena, ni llorar ni quejarme, acepto criticas sobre mi trabajo. Lo único que quiero es dar naturalidad a un tema importante“, reiteró en las entrañas del estadio Enrique Roca donde España se mide este sábado a Dinamarca.

Morata está “bien, completamente recuperado y feliz”, pero sin la ayuda de Iniesta y Bojan no hubiera estado en Alemania. “Se lo agradeceré toda la vida”, explicó, porque hubo momentos que no supo manejar, como los pitos que escuchó en el Bernabéu en el España-Brasil de marzo. “Nadie está preparado para que le piten en casa. Yo no lo estaba para manejar aquello“.

La razón que le llevó a superar aquello y a seguir luciendo el brazalete de capitán está en la petición de sus compañeros y Luis De la Fuente. “En mi cabeza era mi último torneo y lo que me pedía el cuerpo era disfrutar de otras cosas. Pero mis compañeros y el míster me pidieron que siguiera, que era importante para ellos. Y cuando a uno le hacen sentir importante es feliz. Por eso ahora estoy con fuerzas y ganas de disfrutar lo que me quede”.

El delantero del Milan aún se emociona cuando ve a los utilleros estampar los dos parches de campeones de Europa y de la Nations League, dos títulos que han hecho a estos jugadores sentirse mejores. “Los que llegamos después de los extraterrestres necesitábamos algo así”, aseguró. Aunque el mayor logro para él consiste “en que hay jugadores que van entrando y ni se nota”, confesó, como que la lesión de Carvajal, que vio en directo, le dejó “el cuerpo congelado”.

Clave en esta “familia” es Luis de la Fuente, para quien reivindicó una mejora de contrato que no llega. “No saca pecho, pero es la reivindicación justa de un entrenador que ha ganado dos competiciones en el periodo más difícil de la Federación. Se ha ganado el derecho a hablar porque es campeón de la Nations League y la Eurocopa. Ha hecho historia y hay que reconocérselo“, sentenció.

Dosificar en los clubes, no en la selección

De la pregunta sobre su contrato se quiso escapar De la Fuente. “¿Me veis nervioso? No lo estoy. No voy hablar nada de eso, sólo del partido importantísimo”, zanjó el riojano, que se mostró satisfecho por estar entre los seis candidatos a mejor entrenador en la gala del Balón de Oro. “Ya es un premio estar ahí. Si alguien me ha colocado ahí, será por algo. En el fútbol nadie regala a nada”, advirtió.

El técnico se mostró convencido de que la plaga de lesiones no afectará al equipo -“todos son muy buenos”- se reivindicó el papel de Zubimendi y su capacidad para liderar sin presión, -“no se pone nervioso ni caminando por el alambre sin cuerda”- y tampoco cree que los jugadores tengan miedo a lesiones. “Lesiones ha habido toda la vida y un deportista tiene que convivir con eso. Muchas veces te sitúan en tu lugar y te ayudan a pisar el suelo. Esta vida no es un camino de rosas. No recuerdo haber jugado un partido sin un dolor. Eso es una parte de superación”, reflexionó.

Y volvió a su discurso de que no debe ser una selección la que dosifique los minutos de los jugadores, ni siquiera de Lamine Yamal. “Estamos haciendo lo que debemos: confeccionar un equipo competitivo que representa a España.”Es más fácil dosificar en 50 o 60 partidos que si tengo uno al mes. La responsabilidad de dosificar no puede recaer en la selección”. sentenció.

kpd