LaLiga Santander
El balear promedia un gol/asistencia por partido esta temporada. Nacho marcó su primer gol del año ante la mirada de De la Fuente. “Karim quería jugar, está bien”, dijo Ancelotti sobre los 90 minutos de Benzema.
Entre Cádiz y Londres hay 1.734 kilómetros. Para el Real Madrid, apenas 72 horas, que son las que pasarán desde las nueve de la noche de ayer hasta las nueve de la noche del martes, momento en el que los de Carlo Ancelotti saltarán a Stamford Bridge a defender el 2-0 logrado en el Santiago Bernabéu. Entre la Liga y la Champions no hay solo tiempo para los blancos, también sensaciones. En el campeonato doméstico el título está perdido, pero en Europa la orejona todavía aparece en el horizonte. Es la apatía nacional frente a la ilusión continental. Futbolísticamente, son rotaciones frente a un once de gala.
Ancelotti dejó en casa a Vinicius y Kroos, capitales en la ida de los cuartos de final contra el Chelsea. “Molestias”, aseguraban en Valdebebas. Y ya en el Carranza, el italiano envió al banquillo a Carvajal, Alaba, Camavinga y Modric. De la columna vertebral, sólo saltaron de inicio los que ahora mismo ofrecen un físico superior, como Militao y Fede Valverde, los que están en estado de gracia, como Rodrygo, o los que necesitan acumular sensaciones positivas después de una temporada extraña, como Benzema.
El francés se presentó en Cádiz a tres goles del pichichi Lewandowski, inmerso en una de las pocas batallas que le quedan por pelear al Madrid en Liga. El Zamora está descartado para Courtois, a a 25 goles de Ter Stegen, pero ayudar al francés a repetir el galardón de máximo goleador será una de las motivaciones de las últimas semanas ligueras para el Madrid.
Más allá de eso, “sensaciones”, insisten en el club, y, de paso, aguantar la segunda plaza ante el empuje del Atlético. Eso intentó en el Nuevo Mirandilla, donde Ancelotti le ahorró a Vinicius una batalla innecesaria contra Fali o Alejo, jugadores con los que había tenido polémicas en los últimos duelos. “Era un partido que podía ser trampa”, aseguró Carletto tras el duelo. En su lugar, el italiano apostó en la izquierda por Rodrygo, que cuajó uno de sus mejores partidos del curso. Mezclando gambetas con pura verticalidad y entendiéndose a la perfección con Benzema, el brasileño acumuló ocasiones ante un imperial David Gil, que evitó una goleada. “Encara, encara”, le repetía Benzema, haciéndole señales con el brazo. Y ahí seguía el brasileño.
“Karim quería jugar”
Benzema tuvo varias opciones para acercarse a Lewandowski, pero aunque jugó los 90 minutos, no acertó. “Karim ha jugado los 90 minutos, también el miércoles, pero es que ha recuperado muy bien, quería jugar, le he visto bien y está listo para el martes. Físicamente estamos a buen nivel”, resumió el técnico, que elogió a sus delanteros: “Él y Rodrygo han hecho un trabajo que merecía el gol. Han mostrado frescura”.
25 disparos después, 7 de ellos sobre los tres palos, Nacho puso sobre el marcador lo que el Madrid merecía por juego. Fue su primer gol este curso, convirtiéndose en el 17º goleador madridista esta temporada. Más cerca que nunca de la renovación, su gol abrió la lata. El 0-2 de Asensio, su séptimo tanto en Liga, confirmó el buen 2023 del mallorquín, que promedia un gol/asistencia cada 88 minutos entre todas las competiciones en este curso. Los dos españoles, ante la atenta mirada del seleccionador Luis de la Fuente desde el palco, volvieron a sumar puntos para firmar un nuevo contrato con el Madrid y para entrar en la próxima lista del combinado nacional. “Son un valor añadido para el equipo. Asensio ha marcado la diferencia y ha hecho un buen trabajo”, destacó Ancelotti, mientras Courtois ya observaba el duelo de Londres dejando una indirecta: “Otros equipos sólo juegan de sábado a sábado. Espero que los goles que no hemos metido los hayamos guardado para el martes”.
