El nuevo Caníbal es amable y generoso. Tadej Pogacar, tras firmar dos triunfos consecutivos en los Dolomitas, permitió a sus rivales participar en en el reparto de su suculenta presa en este Giro de los récords. El esloveno, en la doble subida al Passo Broncon, prefirió reservar energías y no desgastar a su equipo. El líder, saciado con cinco victorias en esta ronda que enfila su último tramo, permitió que el alemán George Steinhauser ganara la etapa y estrenara su palmarés profesional.
El chaval del EF Education (22 años) se metió en la escapada buena de la jornada y supo aprovechar ese impulso para otorgar a su equipo el primer triunfo en la Corsa Rosa. Inmejorable debut para el joven corredor.
Steinhauser ganó porque Pogacar se permitió un descanso en una jornada corta de montaña (159 kilómetros), pero sin apenas zonas de recuperación. El pelotón, comandando por el DSM de Romain Bardet, otorgó permiso a la escapada de rigor, integrada por Nairo Quintana, Alaphilippe, Caruso, Pellizzari (primero en el Passo Sella, la nueva Cima Coppi), Valter, Conci, Ghebreigzabhier, Ballerini, Frigo y el propio Steinhauser.
Después de pasar por el Passo Sella y descender por el Val di Fassa y el Val di Fiemme hasta Predazzo, la carrera transcurrió por una sucesión ininterrumpida de duras subidas y bajadas, hasta llegar a la primera ascensión al Passo Brocon por el lado norte, para luego afrontar la última escalada, en la que Steinhauser se marchó ante la parsimonia del pelotón. Con Pogacar ajeno a la pelea por la etapa, el alemán fue ganado distancia, superando los tres minutos.
La cita, que parecía aburrida, se animó en las rampas de los últimos dos kilómetros, con pendientes superiores al 10%. Ahí, Pogacar tomó la cabeza del grupo de favoritos y, sin atacar, dejó clavados a todos. La historia repetida de este Giro en el que el líder apenas es inquietado por sus enemigos.
Al final, el alemán venció con un margen de 1.22 minutos sobre Pogacar. El portador de la maglia rosa aumentó a renta sobre Daniel Martínez en 18 segundos. Pogacar se divierte y los aficionados disfrutan.
Este jueves, cambio de tercio, con una etapa llana de 178 kilómetros entre Fiera di Primiero y Padova. Una pugna para los cazaetapas y velocistas.