Isco Alarcón no disputará la Eurocopa. El centrocampista andaluz, que en las últimas semanas había ganado enteros para formar parte de la lista de convocados de Luis de la Fuente, se retiró lesionado del encuentro entre el Betis y Las Palmas y las pruebas médicas a las que ha sido sometido hoy han confirmado la gravedad de la lesión. El malagueño sufre una fractura diafisaria en el peroné izquierdo, tal y como ha anunciado el conjunto bético en un comunicado.
“Tras las pruebas realizadas a Isco Alarcón en el día de hoy se confirma que el jugador malagueño sufre una fractura diafisaria en el peroné izquierdo. Los servicios médicos del Club valorarán en las próximas horas la necesidad de intervención quirúrgica para resolver la lesión”, ha explicado el club.
Este viernes, Isco salió en muletas del centro médico al que acudió a pasar las pruebas y respondió que “ojalá” pudiera estar en la Euro, pero los resultados no han sido favorables y se perderá el torneo.
Se trata de un mazazo para el futbolista, que en el Villamarín ha recuperado su mejor nivel después de varias temporadas alejado de los focos. Acumulaba 9 goles y 7 asistencias entre la Liga y la Europa League y 19 premios a Mejor Jugador del Partido en la competición doméstica. “Le conocemos todos y sabemos el talento que tiene, me declaro públicamente admirador de Isco“, había dicho De la Fuente esta semana.
Tras esas declaraciones, el ex del Valencia, Málaga, Madrid y Sevilla era considerado ya un fijo en la lista de 26 para el torneo, recuperando su sitio en el equipo nacional tras estar ausente desde junio de 2019.
Isco debutó con España en 2013 y fue uno de los líderes de la selección en el Mundial de Rusia de 2018, su única presencia en un gran torneo, en el que disputó al completo los cuatro partidos del equipo. Jugó parte de la Liga de Naciones de 2018-2019 y dos partidos de la clasificación para la Eurocopa 2021 en 2019, pero a partir de ahí dejó de contar para los seleccionadores.
Según la plataforma de análisis estadístico WhoScored, es el tercer mejor jugador de la temporada en LaLiga, sólo superado por Jude Bellingham y Vinicius Júnior. Tiene una nota media de 7,40, algo inferior a la del inglés y el brasileño. Ha sido el tercer mejor regateador del curso (2,6 por partido) tras Vini (2,8) y Savio y el futbolista que ha logrado más pases clave, igualado con Gündogan, en el campeonato: 2,8 por jornada.
A pesar de las dudas sobre su presencia en la lista de convocados, una vez confirmadas las intenciones de De la Fuente se trata de una baja colosal para España. Iba a ser su primera Eurocopa.
A España no sólo la ha encaminado hacia la cuarta Eurocopa de su historia el desparpajo de chavales en el campo, también fueron ellos los que dirigieron los festejos. En el césped hubo lágrimas, abrazos, manteos a De la Fuente y fotos, muchas fotos, pero pareció una celebración contenida hasta que estalló en el vestuario. Música y baile bajo la batuta de, cómo no, de Nico y sobre todo Lamine Yamal. Fue el DJ, contagió a Álvaro Morata en calzoncillos e hizo bailar no sólo a su hermano Williams, MVP de la final, sino a los lesionados Rodri, Pedri, Ferran y hasta Gavi y Navas, que movió su dolorida cadera. No se quedaba atrás tampoco Fermín, otro del clan salvaje.
A sus 17 años, Lamine tuvo un momento de tranquilidad sobre el césped, jugando con su hermano pequeño, pero luego dio rienda suelta al festejo, primero con un sombrero y después con gafas de sol camino del autobús. "Es increíble poder estar aquí. ¿A Cibeles? No, a Madrid". Antes, una foto con la copa y dos checks: "La ESO. Campeón de Europa". La fiesta acababa de comenzar.
Ya había sonado Raphael, la Potra Salvaje y toda la playlist que ha acompañado las previas de los siete partidos y había quien empezaba a desesperarse. "¡Creo que ya me están llamando!". Cucurella no dejaba de apretar el claxon del autobús, rápidamente personalizado con la pegatina de campeones de Europa, mientras Rodri se emocionaba recordando su lesión, su MVP y su primera Eurocopa. "Cuando ha marcado Mikel, me he puesto a correr como un loco y se me ha olvidado la lesión hasta que el médico me ha dicho '¡eh, ojo!'. Estaba muy triste, pero chapeau por estos chavales".
A su lado, Nico Williams casi soltaba una lágrima recordando a su familia. "He hablado con mi hermano a través del móvil de mi madre porque yo no he podido ver el mío todavía. Me ha dicho que me quería y que está muy orgulloso, que el nombre de los Williams está en el cima del fútbol mundial", y casi se rompe al hablar de su madre: "Mis padres lo han pasado muy mal, especialmente mi madre. Esto es para ellos".
La fiesta en la zona mixta la puso Álvaro Morata, capitán y convertido en DJ de la selección por un ratito. Con un altavoz gigante en la mano con la bandera de España, el grupo caminó con por el pasillo de medios con una cerveza en la mano y al ritmo de una versión tecno del Viva España de Manolo Escobar. "Esto es tremendo", admitía Le Normand. "Algo único", reconocía Navas. "Dentro de nueve meses va a haber un boom de natalidad", vacilaba Cucurella. El lateral, uno de los hombres de esta Eurocopa que aún ayer escuchó pitos, tendrá que pensar si se tiñe la melena de rojo, como prometió. Antes pagó otro peaje: en la cena de los campeones, ya en el hotel con las familias, Morata le hizo subirse a la mesa, agarrar el micrófono y cantar la canción que le dedican en Inglaterra. "Cucurella se come una paella, se bebe una Estrella. Tiembla Haaland, que viene Cucurella", interpretó entre el júbilo de sus compañeros.
También tuvo tiempo el lateral del Chelsea para enviarle un recadito a Gary Neville en sus redes sociales. El comentarista de Sky Sport había dudado de él. "Pienso que Cucurella es una de las razones por las que España no puede llegar a la final", dijo. "Llegamos a la final. Gracias por tu apoyo", le contestó el catalán son sorna.
Era el momento de las risas, aunque a Oyarzabal, autor de un gol para la historia, le costó desatarse. "Lo primero que pensé al marcar fue en si había sido fuera de juego, porque era muy justo. Luego ya sólo escuchaba gritos", bromeaba. Alguno eran de Álex Remiro, el único jugador que no ha disputado un minuto en esta Eurocopa, pero que predijo el gol de su compañero en la Real. "En la merienda me dijo que hoy marcaba", confesó el vasco. No fue el único. "Le dije 'cómo te huele el pie a gol, niño', y he acertado. Igual me tengo que dedicar a eso", bromeaba Morata.
No salió el capitán con un balón bajo el brazo, pero sí Ferran, Pedri y Fabián. "Nos los vamos a llevar todos", decía el andaluz entre los gritos de Viva España del canario, enfundado en su bandera. A todos les costó anoche hacerse fotos en el césped con sus amigos y familiares. La seguridad del estadio impedía que bajaran al césped y Laporte o Dani Olmo tuvieron que acercarse a negociar.
Lo consiguieron Zubimendi, cuyos familiares llevaban la camiseta de la Real Sociedad, los de Ferran y los hijos de Morata, que lloraron de emoción tanto como su padre antes de comenzar a jugar con un balón en el césped ajenos al jolgorio en el que Lamine se había puesto un sombrero con los colores de la bandera y Luis de la Fuente volaba por los aires manteado.
Guardó el seleccionador un discreto segundo plano. Eso sí, se hizo una foto con sus sobrinos y la bandera de La Rioja con el nombre de Haro e hizo una piña con sus seres queridos, como si el partido fuera a comenzar. Quien fue corriendo a abrazarle fue el padre de Lamine, consciente de lo que la apuesta del seleccionador ha supuesto para su hijo. Lo llevaba en la mano: el trofeo de mejor joven. Apareció poco más De la Fuente, por los compromisos federativos y por su perfil. Salió del vestuario casi por la puerta de atrás y con la camiseta de Reyes de Europa en la mano.
La Copa fue del vestuario al autobús en un arcón, pero era imposible que permaneciera guardada. La sacó Morata, que le cantó el 'No puedo vivir sin ti' de Coque Malla y la manosearon todos. Hasta el Rey Felipe la alzó sobre el césped como si fuera un jugador más.
A la celebración sólo le faltó una traca, esa que el delegado Fernando Giner, valenciano, se quedó con ganas de tirar a las puertas del Olímpico.
Ale Galán y Juan Lebrón se separan. La pareja número 1 del ranking FIP (Federación Internacional de Pádel), ganadora del primer torneo de la temporada de Premier Padel en Arabia Saudí, rompen definitivamente. Una situación que parecía que iba a suceder en diciembre, justo en el final de la pasada temporada, y que finalmente se consiguió enderezar por las pocas opciones que tenían en el circuito y lo buenos, muy buenos, que son cuando están al 100%. Pero ahora, en marzo, y después de la polémica de esta semana en Qatar, Galán ha tomado la decisión de separarse de Lebrón y jugará a partir de ahora con Chingotto.
La noticia, adelantada por Marca y confirmada por este periódico de fuentes cercanas a la pareja, será oficial este viernes a las 10 horas. Así de claro lo tiene Galán, molesto por la eliminación en Qatar tras la bronca de Lebrón con Mike Yanguas, rival en el partido que perdieron.
Curiosamente, la situación ha dado un giro con respecto a diciembre. En ese momento, fue Lebrón el que dio el primer paso y anunció a su círculo cercano que iba a romper con Galán. Ambos tuvieron conversaciones con varios jugadores (Galán estuvo muy cerca de Chingotto) pero al no ver opciones realmente viables y competitivas, decidieron seguir. Pero su relación, después de años en la cima de su deporte, parecía ya vista para sentencia.
Por eso se entiende que ahora, después de sólo un torneo y medio y a pesar de la victoria en Riad, la crisis sea totalmente definitiva. Galán, según pudo confirmar este periódico, jugará ahora sí con Chingotto a partir del próximo evento. El argentino de 26 años, antigua pareja de Paquito Navarro, era hasta esta semana pareja de Momo González.