Mundial de natación
Este jueves buscará una medallas en los 200 metros estilos después de brillar en las semifinales
Aquel desastre quedará en los libros de historia: el año pasado, en el último Mundial, España no estuvo en ninguna final, donde sí estuvieron nadadores de Trinidad y Tobago, Singapur, Chile, Bosnia, Egipto o Israel. No pasaba desde 1998. Esta vez no ocurrirá. Este jueves Hugo González disputará la final de los 200 metros estilos del Mundial de Fukuoka (14.03 horas, Teledeporte) y lo hará, además, con opciones de colgarse una medalla. Vuelve la esperanza.
La selección continúa desaparecida, sin más representantes en finales, pero como mínimo su única estrella está de regreso. González, el joven que reclamó el vacío de Mireia Belmonte con tres medallas en el Europeo de 2021, estuvo gris en los Juegos Olímpicos de Tokio y falló en el pasado Mundial, pero no en esta ocasión. Este miércoles, en las semifinales, ganó su tanda y se situó entre los aspirantes con el cuarto mejor tiempo. Uno de sus rivales, el francés Leon Marchand, parece intocable, más después de batir el récord del mundo de los 400 metros estilos de Michael Phelps, pero el resto están cerca.
Tan cerca que este mismo año ya ha vencido a algunos en la NCAA. En marzo, después de las Finales de la liga universitaria estadounidense, ya se vaticinaba una actuación espléndida de González en el Mundial, pero como tantas otra vez hubo suspense sobre su presencia. Ya licenciado en Ingeniería Informática por la Universidad de Berkeley, reclamaba ayuda para poder seguir entrenando allí -junto al propio Marchand, por ejemplo- y las negociaciones con la Federación Española (RFEN) no eran fáciles, como siempre. Sobre la mesa, nuevamente, la posibilidad de su retirada temprana, a los 24 años. Pero finalmente no hubo drama.
“Las medallas van a estar luchadas”
Con la ayuda del programa Team España Élite y un patrocinio de relumbrón -Iberia-, González siguió con su preparación en Estados Unidos y la RFEN aceptó convocarle para el presente Mundial pese a no cumplir con sus criterios. “Excepcionalmente” fue seleccionado y el nadador respondió este miércoles con su pase a la final de los 200 metros estilos
“El trabajo ha salido, este es un deporte que se marca con el tiempo y a veces no se ve todo el trabajo que hay detrás, ni el mío ni el de mis compañeros”, comentó el español después de las semifinales, cuando se atrevió también con un vaticinio: “¿El podio? La plata y el bronce van a estar luchadas. Será una carrera muy rápida”. Como es habitual, la estrategia de González pasará por mantenerse entre los primeros en la mariposa, colocarse en cabeza en la espalda, su especialidad, y aguantar después en la braza y el crol. Además de Marchand, en esos últimos parciales los adversarios a seguir serán los británicos Tom Deam y Duncan Scott, vigentes campeón y subcampeón olímpico de los 200 metros libre, y un especialista en los estilos como el japonés Daiya Sato, que compite en casa.
El objetivo de González era la presencia en la final -que además le clasifica directamente para los Juegos de París 2024- y ya está cumplido, pero ahora quiere más. Una medalla suya sería la primera española en un Mundial desde 2017, cuando Mireia Belmonte se colgó tres de una tacada. Vuelve la esperanza.
