El máximo accionista del Valencia, Peter Lim, ha tomado la decisión de dejar en manos de su hijo Kiat Lim la presidencia del club, que niega haya puesto en venta. Miembro del consejo de administración desde diciembre de 2022, ejercerá a partir del próximo 5 de marzo como nuevo presidente en sustitución de Layhoon Chan, que regresará a Singapur para seguir al frente de otras empresas del holding. Así lo ha comunicado de manera oficial del club, que deja la puerta abierta a que el nuevo presidente pueda estar en el palco de Mestalla el próximo sábado en el duelo ante el Valladolid.
“Kiat Lim asume esta nueva responsabilidad en un momento clave para la organización. Su nombramiento demuestra un firme compromiso a largo plazo con el Club y refuerza la apuesta del club con la estabilidad y la construcción de un proyecto sólido para el futuro”, explica el comunicado, en el que la todavía presidenta le da la bienvenida.
“Me complace pasar el testigo al Sr. Kiat Lim, hijo de nuestro máximo accionista. Este nombramiento es una clara afirmación del compromiso continuo con el club y su futuro. También quisiera expresar mi más sincero agradecimiento a nuestros aficionados y a todas las personas cercanas al club por su apoyo durante mi tiempo en este cargo”, asegura.
Desde que compró la mayoría accionarial del Valencia en 2014, el empresario ha confiado las riendas a tres presidentes: Amadeo Salvo, Layhoon Chan, en dos etapas, y Anil Murthy. Ahora será un miembro de la familia Lim en primera persona quien lidere al Valencia, auxiliado por Javier Solís, actual director corporativo y figura que se fortalece con el cambio en la presidencia.
Lim provoca este relevo en un momento delicado, con el equipo luchando por salir de los puestos de descenso y en plena negociación para conseguir, de la mano de Goldman Sachs, un préstamo de hasta 320 millones de euros para acabar las obras del nuevo estadio. Por el momento, esta financiación no se ha cerrado.
El cambio llega, además, en medio de rumores sobre el interés de Lim en vender el Valencia por una cantidad cercana a los 400 millones, algo que hoy mismo Meriton ha negado en un comunicado recogido por el diario The Business Time. “Meriton quiere dejar claro que tales informaciones son falsas. El Valencia CF no está en venta y sigue comprometido con el Valencia CF“. Muestra de ese compromiso entienden que es poner al frente a Kiat Lim y reforzar ante los mercados su compromiso de continuidad para liderar un proyecto para el que están buscando financiación externa.
Contrasta esta postura con la manifestada por la presidenta Layhoon Chan tras la pasada junta de accionistas en el mes de diciembre, cuando dejó por primera vez la puerta abierta a una salida: “No he oído hablar de ninguna oferta. Si es muy atractiva, seguramente la estudiará. No tiene ninguna prisa en vender“, expresó. Encajaba esa respuesta con los acuerdos para refinanciar la deuda y la rebaja de los costes operativos, empezando por la plantilla deportiva.
Para entonces, el deseo de quien ha sido la ejecutiva mano derecha de Lim era volver a Singapur una vez cumplida la tarea encomendada por Peter Lim, que no era otra que desbloquear las relaciones con el Ayuntamiento de Valencia para reanudar las obras del nuevo estadio. Una vez conseguido el acuerdo y con el desgaste generado por la mala campaña del equipo, su intención era volver a dejar Valencia.
Por su parte, Kiat Lim se había convertido en el interlocutor de los ejecutivos locales. Como miembro del consejo de administración -conformado al completo por personas del entorno directo empresarial de Lim-, estaba al tanto de todos los movimientos, pero también era el enlace con el que se consultaban los movimientos deportivos y de inversiones en el último año.
La única vez que estuvo en Valencia, en diciembre de 2022, el hijo de Lim concedió una entrevista a los medios del club en la que fijó cuáles eran sus intenciones. “Queremos exactamente lo mismo que todos. Queremos jugar en Europa, queremos ganar partidos, queremos ganar títulos. Eso es lo que claramente queremos. Creo que con respecto a todo lo que ha sucedido, tengo ganas de formar parte del Consejo y estar aquí a título oficial”, aseguró. Entonces entrenaba al equipo Gattuso, que dimitió un mes después y el equipo acabó luchando por evitar el descenso con Baraja en el banquillo y alejándose mucho de Europa y los títulos.