El ‘niño’ chino al que su padre compró el Inter contra el abuelo de los dragones

El 'niño' chino al que su padre compró el Inter contra el abuelo de los dragones

Oporto – Inter de Milán

Actualizado

Más de medio siglo de edad separan al histórico presidente del Oporto, Pinto da Costa, quien lleva en el cargo desde el Mundial de España 82, del multimillonario de 31 años que ha ‘resucitado’ al Inter de Milán

El presidente del Inter, Steve Zhang, con la Supercopa de Europa 2022.Inter de Milán

Cuando Steven Zhang vino al mundo en la ciudad china de Nanjing un buen día de 1991, a más de 10.000 kilómetros de distancia, Pinto da Costa presidía el Oporto de Víctor Bahía y Fernando Couto, y ya sabía lo que era ganar una Copa de Europa. El palco del Estadio do Dragao presentará esta noche la curiosa estampa de ver al abuelo de los dragones, de 85 años, sentado junto al niño chino del fútbol europeo en la vuelta de unos octavos de la Champions. Un Oporto-Inter es ahora mismo una lucha entre el presidente más longevo del fútbol europeo frente al más joven. Entre un empresario nacido antes de la Segunda Guerra Mundial frente a un empresario millennial, casi una década más joven que el capitán del equipo rival, el ex madridista Pepe.

El Oporto-Inter es una eliminatoria equilibrada entre dos equipos de fútbol que habitan dos modelos desequilibrados. El que intenta sobrevivir, frente al que parece marcar el ritmo de los tiempos. Una Sociedad Anónima Deportiva en la que los socios tienen el 74,59% de las acciones, frente a otro club que ha sucumbido al capital de los magnates asiáticos, los jeques y los fondos de inversión, dejando que el multimillonario chino Zhang Jindong comprara por 300 millones de dólares el 70% de las acciones del club italiano para regalárselo su hijo.

El presidente del Oporto, Pinto da Costa, posando con la Copa de Europa en 1987.FC Oporto

Pinto da Costa lleva 41 años al frente del Oporto y ha ganado 67 títulos, entre ellos dos Champions, dos copas de la UEFA y dos Intercontinentales. Cada vez que hay elecciones dice que quiere dejarlo pero nadie se presenta. Su equipo casi siempre ha ganado la liga y ha jugado la Champions, por lo que sabe lo que es enfrentarse a los italianos, y sentarse durante décadas al lado de los Berlusconi, Agnelli o Moratti, a los que ha sobrevivido como hombre, como presidente y como modelo de club, para sentarse ahora al lado de un joven chino cuyo padre montó en los 90 una tienda de aire acondicionado al otro lado del mundo, y acabó amasando una fortuna valorada por Forbes en 7.400 millones de dólares.

Netflix acaba de anunciar que le va a hacer una serie a Pinto da Costa. Un hombre al que su abuela le hizo socio del Oporto a los 16 años, que trabajó en un banco y que vendía pinturas. Antes del Mundial de España 82 se convirtió en presidente. Le gusta fichar al entrenador, ver jugar y hablar con los futbolistas antes de contratarlos; así como desayunar y almorzar con la plantilla, como hará hoy, antes de un partido importante. Un día fichó en contra del criterio de la directiva a un entrenador llamado Artur Jorge, cuyo currículum era un descenso a Segunda, y le ganó la Copa de Europa. Y luego al traductor de Bobby Robson, un tal José Mourinho, y le dio otra. Pinto da Costa fichó a Casillas, hizo entrenador a Lopetegui, traspasó al Madrid a Pepe y a Militao, al Barça a Deco, al Atleti a Falcao y a Futre, quien decía de su presidente tenía redes por todo el país que le permitían averiguar casi en tiempo real “si te estabas tomando una copa a 50 kilómetros de Oporto”.

El belga Lukaku posando con su presidente Steven Zhang, 16 meses más mayor que él.@stevenzhang91

Casi todo lo que hay que saber de Steven Zhang está en su cuenta de Instagram, donde pueden contemplarse una sala de trofeos de selfies, que lo mismo incluye una Supercopa de Italia que un Lukaku, su fichaje más caro, por 75 millones de euros, y sólo 16 meses más joven que su presidente. Se sabe que es el heredero de una de las mayores fortunas del mundo, aunque no le llegó para cumplir su sueño de fichar a Messi. Que estudió en Oxford y en Pensilvania comercio electrónico y finanzas. Que su padre, o más bien su holding Suning Group, le compró el club en 2016 y le hizo presidente a los 26 años. Lo primero que hizo fue cambiar el escudo, lo que provocó un berrinche de los aficionaos. Su referente empresarial es el superhéroe Iron Man, al que habría que ver si conseguía como él que el Inter volviera ganar el Scudetto (2020/21), la Copa de Italia (2021-22) y las Supercopas de 2021 y 2022 después de una década de sequía.

También ha logrado acabar con diez años sin aparecer por los cuartos de final de una Champions, cosa que no hace desde la 2009/2010 cuando le echó de la competición el Schalke 04 liderado por un tal Raúl González Blanco. Y aunque se rumoreó con que quería vender el club tras la pandemia, sacó un comunicado diciendo que no piensa irse, y que durante su gestión el club aumentó los ingresos en 75 millones de euros. Su plantilla ya es la duodécima más valiosa del mundo, y en Italia sólo tiene por delante al Milán.

Pinto da Costa en un acto reciente del FC Oporto.F. C. Oporto

El balance de enfrentamientos directos entre ambos en Champions es de dos victorias para los italianos, un empate y una derrota. Una ventaja estadística que se une a la real, que es que los de Zhang ganaron 1-0 en la ida, con gol de Lukaku. El referente ofensivo del Inter lleva casi toda la temporada lesionado, pero en la Champions ha metido dos goles tras aparecer en un partido siete minutos, y en otro, el del Oporto, 32.

Sin embargo el balance del Inter fuera de casa esta temporada es dramático, lo que le han impedido meterle mano en la Serie A al Nápoles, que va lanzado a por el título. Un poco lo que le está pasando al Oporto este año con el Benfica. Aunque no ha tenido problemas en pasar como primero de grupo, dejando fuera, entre otros, al Atlético

kpd