El último sueño de Marcelo y el hito del Fluminense en la Libertadores: “Es un cuento de hadas”

El último sueño de Marcelo y el hito del Fluminense en la Libertadores: "Es un cuento de hadas"

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El brasileño juega esta noche con el club de su niñez una histórica final contra Boca Juniors. Sería el 14º en ganar Champions y Libertadores. Fluminense busca su primera corona.

Marcelo, durante un entrenamiento.DANIEL RAMALHOAFP

A principios del siglo XX, la aristocracia brasileña se situó en el barrio de las Laranjeiras, en Río de Janeiro, a los pies del Cristo Redentor. Era el origen de la economía de la ciudad y, más tarde, el germen del fútbol en el país que más veces ha levantado la Copa del Mundo. Más de 100 años después, ese barrio observa con nerviosismo la histórica cita de esta noche de sábado, momento cumbre para el equipo que el 21 de julio de 1902 comenzó a escribir su historia en sus calles. El Fluminense, el cuarto equipo de Río por detrás del Flamengo, el Vasco da Gama y el Botafogo, disputa hoy por segunda vez la final de la Copa Libertadores. Cayó en 2008 en penaltis ante el Liga de Quito y busca ahora revancha contra el todopoderoso Boca Juniors. Lo hará, eso sí, con la ayuda de la leyenda de Marcelo Vieira, campeón de 5 Ligas de Campeones con el Real Madrid.

El 24 de febrero de este año, el brasileño anunció que regresaba al club de su niñez. Ese al que llegó con 13 años y abandonó con apenas 18 para convertirse en el futbolista con más títulos en la historia de Chamartín. Por eso sonaba lógico que ahora, con 35 primaveras y en los últimos alientos de su carrera, intentara devolver a su afición la apuesta que un día hizo por él. “Llegó la hora de volver“, aseguró el defensa en ese momento.

Después de su salida del Madrid, Marcelo fichó por el Olympiakos griego en septiembre de 2022, pero el 18 de febrero de 2023, seis días antes de su firma con Fluminense, anunció la rescisión de contrato con el cuadro de Atenas. Tuvo una oferta del Al Nassr, que intentó que formara dupla con su amigo Cristiano Ronaldo, pero el brasileño tenía una espina clavada, una pequeña deuda pendiente con la afición de Maracaná.

Ilusión y miedo

En 2006, antes de cruzar el charco para llegar a Valdebebas, Marcelo acumuló 28 encuentros en el Brasileirao y 3 en la Copa Sudamericana con el Fluminense. No llegó a disputar la Libertadores, máxima gloria en Sudamérica. Por eso volver tenía sentido. “Fueron 17 años fuera de casa y volver es un gran sentimiento. Saldrá todo bien”, anunció en su presentación, en marzo.

Siete meses después, Fluminense se cita con Boca y con la historia. Ha ganado cuatro Ligas y una Copa, pero ningún trofeo internacional. Ni la Libertadores ni la Sudamericana. “Es un cuento de hadas“, asegura Tati Mantovani, periodista brasileña del canal TNT Sports, que cree que es “un guion de película, porque la final que perdió Fluminense también fue en Maracaná”. “Hay una mezcla de ilusión y de un miedo tremendo”, admite Fernando Kallás, de Reuters.

Durante los días previos Marcelo y Fluminense se mantienen en un búnker. No hay atención a medios más allá de las televisiones con derechos y la concentración es absoluta. El entrenador, Fernando Diniz, que es a la vez el seleccionador de Brasil mientras la Federación espera a Carlo Ancelotti, reflexiona sobre la posición que debe ocupar Marcelo en el campo. Sus virtudes en ataque ayudan al equipo, pero en defensa está sufriendo. “Ha recibido algunas críticas”, dice Kallás. A su lado, nombres como Felipe Melo o Ganso, que sonarán al aficionado europeo.

“No es un icono en Brasil”

“Se trata de terminar de escribir un capítulo“, asegura Mantovani, que cree que el regreso de Marcelo a Fluminense es “mucho más” que la etapa de Ronaldinho con el Atlético Mineiro. El ex del Barça también ganó la Libertadores, “pero Marcelo ha vuelto a casa. Ese impacto es increíble, histórico”.

Si Fluminense gana, Marcelo se convertirá en el 14º futbolista en levantar la Champions y la Libertadores.Juan Pablo Sorín (River y Juventus), Cafú (São Paulo y Milan), Carlos Tévez (Boca y Manchester United), Walter Samuel (Boca e Inter), Willy Caballero (Boca y Chelsea) Danilo (Santos y Real Madrid), Dida (Cruzeiro y Milan), Neymar (Santos y Barcelona), Rafinha (Bayern Munich y Flamengo), Ronaldinho (Barcelona y Atlético Mineiro), Roque Júnior (Palmeiras y Milan), Ramires (Chelsea y Palmeiras) y David Luiz (Chelsea y Flamengo).

Marcelo entraría en este selecto grupo, pero para Kallás “no es una leyenda“. “No es un icono en Brasil. Cambiaría su legado hacia la afición de Fluminense, pero nunca será Roberto Carlos, por ejemplo”, añade. “Para él hacer algo en su equipo de niño, en el que jugaba tras hacerse muchos kilómetros con su abuelo para entrenar… Se va a parar la ciudad”, reconoce Mantovani.

kpd