Con Gerard todo es más fácil en el Villarreal

El Villarreal derrota al Almería con un gol del atacante a los cinco minutos de entrar en el campo y otro de Morales

Para el Villarreal hay una vida con Gerard y otra sin él. Cuando no está, ya se sabe. Cuesta marcar y las porterías rivales parecen menguar. Con él sobre el campo, todo es más fácil. Su calidad es capaz de derribar muros como el que ha plantado el Almería y que se ha encargado de echar abajo con un excelente disparo a la escuadra a falta de un cuarto de hora para el final. Después, Morales se encargó de sentenciar cuando el duelo ya moría.

Setién le dio confianza a Terrats en la medular y a Morales en la punta del ataque. El Almería, que hace una semana tumbó al líder Barcelona, avisó pronto con un centro con rosca de Embarba que Baptistao cruzó en exceso ante un Reina que no habría podido hacer nada para evitar el gol. La respuesta del Villarreal fue inmediata. Yeremy encontró la aparición de Terrats pero el disparo del medio catalán lo atrapó abajo Fernando cuando parecía el 0-1.

Aunque con un ritmo pausado, el Villarreal controlaba el duelo pese a que le costaba acercarse a la puerta de Fernando. El equipo de Setién estuvo cerca de su objetivo a los veinte minutos con un centro medido de Pau que Foyth cazó pese a que su cabezazo se marchó fuera ajustado al palo de la puerta local.

El Villarreal necesitaba que sus jugadores más desequilibrantes aparecieran porque el Almería comenzaba a repetir el ejercicio defensivo que tan buenos resultados le dio ante el Barcelona. Chukwueze rozó el tanto superada la media hora tras recibir un balón abierto en su banda pero el nigeriano no cerró el disparo que se marchó muy desviado.

El paso de los minutos acrecentó el dominio del Villarreal una vez que Yeremy se activó también por la banda izquierda para intentar buscarle las cosquillas a la zaga almeriense por ese flanco del ataque. Pero los intentos del Villarreal no encontraron el premio deseado y la primera parte se esfumó dejando todo por decidir en los segundos 45 minutos.

Setién no cambió el plan para esta segunda parte ante un rival que sí movió el banquillo por la lesión de su meta Fernando y para realizar dos ajustes en las bandas. Mariño, el ex amarillo que lo sustituyó bajo los palos, fue determinante para desviar un disparo de Yeremy tras un pase milimétrico de Álex Baena, natural de Roquetas de Mar, que llevaba escuchando los silbidos de la afición local desde el primer minuto.

Los amarillos no se podían desconectar porque la rapidez de El Bilal seguía siendo una amenaza. Mientras, los intentos seguían siendo infructuosos. Morales dispuso de otra pero su disparo cruzado volvió a encontrar respuesta en Mariño.

Con veinte minutos por jugar, Setién echó mano de Gerard Moreno y Capoue para intentar decantar la balanza. Pero el paso de los minutos también dio vida a un Almería que comenzó a desperezarse para intentar comprometer a un Reina que había tenido un plácido partido hasta ese momento. Samu Costa lo probó con un chut que se perdió desviado. Poco después, Rubi puso sobre el césped al veloz Ramazani para hacer dupla con El Bilal en busca de cazar algún contragolpe.

Y Gerard apenas necesitó cinco minutos para hacer lo que mejor saber hacer. El punta encontró a Chukwueze y el nigeriano le devolvió el pase en el interior del área para que el barcelonés, con un gesto técnico exquisito, mandara el balón a la escuadra sin que Mariño pudiera hacer nada.

El tanto noqueó al Almería y dio la confianza necesaria al Villarreal para encarar la recta final. De hecho, Chukwueze todavía tuvo tiempo de completar su notable partido con una segunda asistencia a Morales que el madrileño transformó en un golazo al enganchar el balón sin dejarlo caer para ponerle el lazo a la victoria amarilla.