La trituradora de Verstappen: Liam Lawson, otro más hacia el cadalso en Red Bull
Quien aún dude de las dificultades que entraña un Fórmula 1 puede revisar los mensajes de Liam Lawson del pasado domingo en Shanghai. "No puedo girar el coche en absoluto", lamentó el piloto de Red Bull en la vuelta 54, a sólo dos para la meta. Nada más cruzar la bandera a cuadros, Richard Wood, su ingeniero de pista, sólo pudo ofrecerle unas palabras de consuelo: "Sí, hoy tuviste que sudar tinta. Lo siento, tío, sinceramente hice todo lo que pude para ayudarte". En ese momento, la comunicación ya se había colmado de balbuceos y silencios de Lawson, muy afectado por su paupérrimo nivel al volante. Por segunda semana consecutiva, ni siquiera se había acercado a la zona de puntos.
El futuro de Lawson, pendiente de un hilo, se resolverá esta semana durante una reunión en Milton Keynes. Una cumbre donde el equipo, protagonista de un flojo arranque, abordará también su plan estratégico. "Estamos preocupados, pero no vamos a tirar la toalla", adelantó Helmut Marko tras el cuarto puesto de Max Verstappen en Shanghai. La opinión del veterano asesor, en estas difíciles circunstancias, tendrá tanto peso como la del team principal, Christian Horner. No se trata de un asunto baladí. Tras perder algunos de los ingenieros que cimentaron el último ciclo triunfal, con los cuatro títulos de Mad Max, Red Bull ha de decidir si da este Mundial por perdido y emplea todos sus esfuerzos en el coche de 2026, primer año de la revolución reglamentaria. Y en el corto plazo, ha de tomar una decisión con Lawson.
"No soy tonto y sé que estoy aquí para rendir. Si no lo consigo, no voy a continuar", admitió el neozelandés en China, donde ocupó la última plaza en las dos sesiones clasificatorias. A estos resultados hay que sumar su decimoctavo puesto en la parrilla de Melbourne. La peor racha de un piloto de Red Bull desde su llegada al Gran Circo, allá por 2005. Su sufrimiento al volante quedó aún más en evidencia en Shanghai, donde quiso partir desde el pit lane para realizar cambios en la puesta a punto. Sin embargo, con esa nueva configuración, mucho más agresiva, sólo pudo adelantar a tres rivales, siendo el último piloto en no ser doblado.
Sólo con el simulador
Las dificultades del RB21, un monoplaza diseñado al gusto de Verstappen, han superado a Lawson en dos circuitos que sólo conocía a través del simulador. Y esta falta de experiencia podría hacerse aún más acuciante a partir de ahora. De las 14 próximas citas del Mundial, Liam sólo conoce Suzuka, tras su paso, hace un par de años, por la Super Fórmula japonesa. Sin embargo, estas dos semanas previas al GP de Japón pueden hacerse demasiado largas. Red Bull maneja la opción de Yuki Tsunoda, el líder de Racing Bulls, su equipo filial. Incluso la de su compañero Isack Hadjar, un rookie que también ha dejado detalles interesantes.
Toda esta incertidumbre trae a la memoria el GP de Bélgica 2024, cuando Red Bull hubo de salir al paso de los rumores para confirmar a Sergio Pérez, a quien había renovado sólo dos meses antes. El mexicano tampoco daba la talla ante Verstappen y a final de año acabó saliendo del equipo. Sin embargo, su cartera de patrocinadores personales siempre representó un obstáculo para cualquier intercambio a mitad de curso. Obviamente, no es el caso de Lawson, un chico de orígenes humildes para los estándares de la actual F1. De hecho, sus padres tuvieron que vender la casa familiar para financiar sus inicios en los karts. Y según él mismo ha confesado, aún no han comprado otra.
Lawson, al volante del RB21, el domingo en Shanghai.
Al igual que sucedía con Checo, las comparaciones con Verstappen dejan en muy mal lugar a Lawson. No sólo por esas 88 centésimas que ha cedido, de promedio, en las sesiones clasificatorias, sino por sus recurrentes problemas a la hora de mantener el coche en la trazada. A bordo de un RB21 muy nervioso, sus mínimas opciones en Australia se toparon contra el muro de la curva 2. Tras la qualy del sábado en Shanghai, Marko ofreció un diagnóstico desolador: "Esto demuestra que nuestro coche es extremadamente difícil. Si le das a Liam el Racing Bulls, va más rápido. No puede seguir así".
Sólo las manos de Verstappen, autor de un segundo y un cuarto puesto, han sido capaces de extraer algo positivo del coche. Aunque no alcance para seguir la estela de McLaren, el tetracampeón mundial puede alardear de una estadística asombrosa. A lo largo de las 20 últimas carreras, ha sumado 337 puntos, por sólo 49 de sus compañeros. Si otros mejor preparados, como Carlos Sainz (2015-2016), Daniel Ricciardo (2016-2018), Pierre Gasly (2019), Alex Albon (2019-2020) o Pérez (2021-2024) ya claudicaron ante él, nada alentador puede esperarse ahora de Lawson.