Radio MARCA, la única cadena española dedicada íntegramente al deporte, ha celebrado esta tarde su tradicional gala anual bajo el lema Los Guardianes del Deporte, un evento que ha servido de homenaje a grandes leyendas nacionalesy que ha contado con la participación del presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, y la presencia del presidente del Comité Paralímpico Español (CPE), Alberto Durán.
En el acto han sido galardonados Fernando Torres, Carolina Marín, Alberto Contador, Jorge Garbajosa, Teresa Perales, Nani Roma, José Javier Hombrados, Jordan Díaz, Feliciano López y Virginia Ruano, referentes en sus respectivas disciplinas y auténticos guardianes del deporte español.
Por parte de Unidad Editorial han acudido al evento, celebrado en la sede del COE en Madrid, el director de MARCA, Juan Ignacio Gallardo; el director comercial de Unidad Editorial, Rafael Serrahima, y la directora de Negocio del diario, Gema Monjas.
En su intervención durante la gala -que ha contado con el apoyo de Endesa, CaixaBank y Moeve- Blanco ha definido la radio como “el campo de juego de las emociones”. Asimismo, el presidente del COE ha alabado la “labor” y la “pasión” de los periodistas y ha destacado la importancia de los medios de comunicación en el deporte.
Por su parte, Gallardo ha ensalzado “los valores, el talento, el esfuerzo, el compañerismo y la victoria” de los deportistas galardonados. “En lo que llevamos de siglo, hemos asistido a tanto brillo en el deporte español que podemos considerarnos los aficionados, quizás, más afortunados de la historia”, ha expresado el director de MARCA.
Durante la gala, Blanco ha hecho entrega de una distinción del COE a Radio MARCA, trofeo que ha recogido Gallardo, “por el ayer, el hoy y el mañana y porque no habrá deporte de éxito sin profesionales como vosotros”.
La final de la Eurocopa enfrentará mañana en Basilea a dos naciones que respiran fútbol, dos imperios que han evolucionado a diferente ritmo pero que, en los últimos tres grandes torneos, se han peleado por los títulos. Da igual hombres que mujeres: España e Inglaterra se han convertido en enemigos íntimos en la última década futbolística desplazando incluso a las potencias nórdicas.
Ambas selecciones se cruzaron por primera vez buscando un título en la final del Mundial de Australia y Nueva Zelanda en 2023, y el gol de Olga Carmona hizo campeona a la selección. España ganaba un título histórico para su fútbol femenino y dejaba a Inglaterra sin el doblete, porque solo hacía 12 meses que, tras dejar en el camino precisamente a las españolas en semifinales, las británicas se habían proclamado campeonas de Europa en Wembley.
Dos años después se reedita la final en la Eurocopa de Suiza, donde las inglesas, como sus compañeros, han llegado con un pelín de suerte -«momentos que han llegado por fe, determinación y confianza», prefiere decir Keira Walhs- , mientras que las españolas han hecho una exhibición en juego y goles, cerrando una trayectoria hasta la final repleta de victorias y certificada con el gol «de magia», reconoce la centrocampista inglesa, de Aitana Bonmatí. Han matado sus monstruos.
El crecimiento de la selección española ha sido meteórico. En los Mundiales, mientras las inglesas buscaron estar en la final desde 2015 en Canadá, solo lo lograron en 2023, y salieron derrotadas por una España que jugó su primer campeonato del Mundo precisamente en 2015, y no pasó la primera fase. Su techo estaba en los octavos de final de Francia 2019.
Ha sido en las Eurocopas donde el salto se ha evidenciado. En 2013, en Suecia, Inglaterra se fue a casa en la fase de grupos y España en cuartos. En Países Bajos, cuatro años después, las británicas perdieron el título ante la anfitriona, dirigida por Sarina Wiegman, y ganaron el título en casa. Mientras, España, con una generación de futbolistas que ya había incorporado a actuales referentes como Alexia Putellas, Irene Paredes, Mariona, Esther o Jenni Hermoso encontraba un muro en los cuartos de final que cada vez se hacía más visible que se podía saltar. No lo lograron ante Noruega ni ante Austria, por penaltis, y tampoco frente a Inglaterra hace tres años.
Experiencia, físico y buen fútbol
Ellas habían dado un paso al frente mucho antes que ahora España ha podido igualar a ritmo récord. Las razones las tienen claras. «Tenemos más experiencia y hemos jugado muchísimo a nivel internacional. Un partido que antes se escapaba, ahora no. Lo vivido te hace saber cómo reaccionar, cuándo arriesgar y cuándo no», reflexiona Alexia.
El paso al frente fue la apuesta de la FA de colocar en 2019 en el puesto de presidenta a una mujer, Debbie Hewitt, que se volcó en respaldar a la selección femenina para brillar el campeonato que organizarían tres años después. Y lo logró. La profesionalización de las inglesas, en igualdad de condiciones con la selección masculina, fue decisiva, y arrastró a su propio campeonato.
Eso se tradujo en medios para mejorar, algo que España ha empezado a disfrutar en esta Euro. «Siempre hemos tenido talento, pero físicamente no estábamos a la altura de las grandes y hoy podemos competir contra cualquiera 120 minutos si hace falta», destaca Aitana, consciente de que esta selección, «desde hace tres años, es la mejor en la que he jugado».
Las futbolistas españolas abrieron los ojos en aquella Eurocopa y después de comprobar cómo dar ese paso -que el Barça había interiorizado ya- las hacía brillar. Pero tuvo que ser un plante de 15 futbolistas y una agresión sexual la que provocara el cataclismo del 'Se acabó' que, de verdad, la impulsado a España. El Mundial lo ganaron solas, obviando condiciones inapropiadas para el máximo rendimiento; hoy tiene a toda la RFEF creando un entorno profesional que acompaña su crecimiento. La diferencia ya solo se marca en el césped. «Esta rivalidad que ha surgido significa que se está haciendo bien», advierte Patri.
Con las inglesas han vuelto a cruzarse tras la final de Sidney en dos ocasiones, esta misma temporada: una victoria para cada una. El duelo será duro pero Esther avisa: «Nadie nos quiere enfrente porque nos tienen muchísima admiración».
"Eres grande, Toro". El mensaje en el cartelón del muro, una semana más, llevó la firma de Pierluigi Della Bona. No se trataba de una despedida personal, porque el preparador físico ha decidido renunciar a Ferrari para acompañarle también en Williams. Sin embargo, a cada paso por Yas Marina, Carlos Sainz sí disfrutó y padeció con todas las emociones propias de una última carrera con la Scuderia. "Fue extraño bajarme del coche. Un poco emotivo. Aunque creo que aún resultó más raro subirme, porque ahí ya fui consciente de que se trataba del último día con un grupo de gente con la que he disfrutado durante cuatro años".
Esos íntimos, los que conforman el célebre Team 55, no perdieron la oportunidad de sacar su extintor para conmemorar el momento. Al frente, Carlos Oñoro, su representante, junto a Riccardo Adami, ingeniero de pista, Pedro Cebrián y Rita Simonini, responsables de comunicación y los también ingenieros Calum McDonald y Riccardo Corte. El segundo puesto en el GP de Abu Dhabi permitía a Carlos superar el registro de Gerhard Berger para convertirse en el noveno piloto con más podios en la historia de Ferrari (25).
"Dadas las circunstancias, creo que hemos completado un trabajo excelente", ratificó Sainz, "orgulloso" de dejar a Ferrari "en un lugar mucho mejor que el que estaba cuando llegué". A su juicio, el trabajo conjunto con Charles Leclerc resultó "crucial", por lo que ya ve a Ferrari "capaz de ganar el Mundial 2025".
"Valiosas aportaciones"
Eso sí, el champán junto a su compañero supo menos espumoso en Yas Marina, dado que Ferrari aún deberá apurar otro año para ese título de constructores que se resiste desde 2008. No obstante, la despedida de Abu Dhabi nada tuvo que ver con las escenas de tensión aireadas en Las Vegas. Leclerc destacó el "talento" de Carlos y elogió sus "valiosas aportaciones" para mejorar el coche. "Nuestras luchas en la pista nos ayudaron a ser mejores", zanjó.
El monegasco, penúltimo en la parrilla, remontó hasta la tercera plaza y fue reconocido con el galardón de mejor piloto del día, con el 29% del voto popular. Incluso podrá recordar una doble celebración en el podio. La película de Apple TV que se viene rodando cada fin de semana exigía, por imperativo del guion, que Leclerc acabase segundo, justo por detrás de Sonny Hayes, el piloto al que da vida Brad Pitt. Las risas junto a George Russell, tercer clasificado en el filme dirigido por Joseph Kosinski, supusieron un simpático colofón al Mundial 2024.
"Este último año, tras la noticia de mi marcha, no ha resultado fácil. No fue sencillo disputar una temporada completa sabiendo que me marcharía. Mantener la concentración tan alta resultó difícil, así que me siento orgulloso de lo conseguido", admitió Sainz. En estas circunstancias, Sainz ha acabado quinto el Mundial, a sólo dos puntos de Oscar Piastri, coronando la mejor temporada de su vida tanto en puntos (290) como en victorias (dos) y podios (nueve).
Sainz, con el SF-24, el domingo en Yas Marina.EFE
El último mensaje de radio con Adami, bajo los acordes del Smooth Operator de Sade, supuso la obertura de sus celebraciones en Yas Marina. Tras aparcar el coche en el parc fermé, una nutrida delegación de Ferrari -mucho más numerosa que hace dos semanas en Las Vegas- acudió para los abrazos y vítores. En el garaje había preparado un disfraz a la altura del momento. Chili, su apodo en el paddock, se despediría de rojo y con sabor picante. A su lado, con una amplia sonrisa, Guanyu Zhou tras su última carrera en la F1 al volante de un Sauber.
Los compromisos de Sainz todavía no han concluiido en Maranello, donde seguirá acudiendo los próximos días para echar el cierre a la temporda. Sin embargo, a nivel competitivo, sus esfuerzos competitivos se focalizan ya en los test de mañana con Williams. "A ver cómo puedo hacer que ese coche sea más rápido", valoró sobre la doble sesión con la escudería de Grove. "Sinceramente, no creo que la gente pueda imaginar lo mucho que espero lo que está por venir", subrayó.
De ese entusiasmo anda necesitado el equipo de James Vowles, penúltimo del Mundial tras puntuar en sólo cinco de 24 carreras. De sus 17 puntos, 10 llegaron en el GP de Azerbaiyán, pero no hubo nada que rascar durante las últimas cito pruebas del campeonato. "No tengo dudas de que volverá a lo más alto de la parrilla, sea con Williams o con otro equipo. Se lo merece. Creo que todo el mundo lo sabe y es sólo cuestión de tiempo antes de que vuelva", apuntó Leclerc.
Camaradería con McLaren
Según los mensajes de radio, Il Predestinato bien pudo abandonar por culpa de un problema de fiabilidad en Abu Dhabi. Hubiese supuesto un epílogo más que decepcionante para Fred Vasseur. "Mañana podré decir que ha sido una temporada muy positiva, con cinco victorias, cuatro más que en 2023, y unos 50 puntos más. Sin embargo, evidentemente también sentimos la frustración de haber terminado con más de 600 puntos, aunque 14 menos que McLaren", concedió el team principal de Ferrari.
Sainz baña con champán a Zak Brown, el domingo en Yas Marina.AFP
Después de la pertinente felicitación a Andrea Stella, su homólogo en McLaren, y su gran amigo Zak Brown, Vasseur iba a capitanear los consabidos actos de camaradería entre dos equipos que luchan sobre el asfalto y se respetan en la escena pública. Sainz, por su parte, ya había felicitado personalmente a su amigo Lando Norris y a su padre, Adam.
Tras 88 carreras de rojo, cuatro victorias, seis poles, 25 podios, tres vueltas rápidas, 900,5 puntos y 295 vueltas en cabeza. Los mismos triunfos en Maranello que Eddie Irvine, Clay Regazzoni y John Surtees. Pese a haber mantenido con mucha gallardía su pulso dentro del garaje, el balance global favorece claramente a Leclerc, gracias a sus seis triunfos, 31 podios, 19 poles, seis vueltas rápidas, 1.029 puntos y 830 vueltas en cabeza.