El francés supera a Luis Aragonés como máximo goleador del Atlético en un partido en el que seis de los ocho goles fueron de defensas.
La Supercopa de España que se juega en Arabia Saudí comenzó su primera semifinal con un Real Madrid encerrado y un Atlético de Madrid trenzando una jugada de más de 20 pases. Kepa pegaba pelotazos y Oblak jugaba al pie de Hermoso. Y unpartido que se presumía cerrado, terminó con ocho goles y con alguna posibilidad más. “No he disfrutado, partido muy abierto”, valoraba Carlo Ancelotti en el postpartido.
Jugaban un equipo con fama de ofensivo y otro con gran tradición defensiva. De hecho, con 40 goles terminó el Real Madrid la primera vuelta de la competición doméstica, una proyección lejana a aquellas ligas de 100 puntos y 100 goles.
Lleva el Atlético de Madrid 23 goles encajados. Si repitiera los guarismos en la segunda vuelta, sería la peor cifra de tantos en contra en la era Simeone. “El entrenador no está trabajando de la mejor manera para que el equipo defienda mejor”, explicó el técnico argentino en la televisión.
Con esos mimbres, y teniendo en cuenta que el Real Madrid sigue sin tener un delantero goleador podría esperarse un partido de pocos goles. Nada más lejos de la realidad. El encuentro fue un ida y vuelta desde los primeros minutos. Lo curioso es que no fueron los delanteros los que perforaron las porterías rivales. “Hemos merecido la victoria”, declaraba Joselu tras el encuentro.
Hermoso, central, fue el encargado de abrir el marcador de córner. Rudiger le dio la réplica desde otro cuarto de círculo y Mendy puso por delante a los blancos con un gol de 9 puro. Repetiría el central aleman, pero en la portería propia en el minuto 80 de la segunda parte, 2-3 para el Atlético.
Menos mal que Carvajal, nombrado MVP, apareció para equilibrar antes del final de los 90 minutos. Savic, que no tuvo l a mejor de las noches, marcó en propia el gol que condenaba a su equipo en el ocaso de la prórroga. No es tan raro, el montenegrino lleva más goles en propia puerta, cinco, que a favor, tres, desde que es colchonero. El mundo al revés.
Máximo goleador rojiblanco
Entonces y como quien agita la esfera para que las cosas volvieran a la normalidad apareció Antoine Griezmann. El francés apenas había tocado el balón en la primera mitad hasta que en el minuto 36 enganchó el esférico recortó a Modric con un tacón que lo mandó contra Rudiger y metió un derechazo, su pierna mala, para convertirse en el máximo goleador de la historia rojiblanca desempatando con el mítico Luis Aragonés. Son 174 tantos para el menudo delantero francés.
Antes de que recomenzara el encuentro, corrió el delantero galo para hacerse con el balón con el que había marcado un nuevo escalón en la historia rojiblanca. Podría haber guardado Koke la lágrima con la que abandonaba el túnel de vestuarios para el gran momento de su compañero. El suyo también llegará, pero no esta temporada. Son 38 los derbis que ha jugado el capitán rojiblanco. Está a cinco de Sergio Ramos (43) para convertirse en el futbolista que ha jugado más derbis de la historia.
Abucheos
No ha jugado pocos Tony Kroos. Diez temporadas ya en el club blanco, el equipo más aplaudido en el estadio Al Awwal, casa de Cristiano Ronaldo y su Al Nasser. La excepción, de hecho, fue el alemán, al que el público pitó desde que salió en la segunda parte por decir que “la falta de derechos humanos” es lo que le impediría jugar en Arabia Saudí.
120 minutos disfrutaron los saudíes de un fútbol intenso y también de unos pocos de Güler, jugador que se llevó la mayor ovación de la noche con permiso de Brahim que cerró el marcador con una carrera con Oblak por detrás como si fueran el correcaminos y el coyote. “Lo hemos tenido con el 3-2, pero el jueves que viene tenemos la revancha”, valoró Koke mientras que su entrenador no quería hablar de revancha en el partido de Copa que les enfrentará el próximo jueves.