Smith perdió a su pareja en un accidente de tráfico en 2019 poco después de que naciera su primer hijo.
Chris Smith, en su etapa en los Cleveland Browns.Ron SchwaneAP
El ex jugador de la NFL Chris Smith ha fallecido a los 31 años, según confirmó este martes su agente, Drew Rosenhaus, que no desveló la causa de la muerte. Smith estaba jugando esta temporada con los Seattle Sea Dragons de la XFL.
Su carrera en la NFL arrancó cuando los Jacksonville Jaguars le reclutaron en 2014 procedente de Arkansas. Jugó en 72 partidos de la NFL (dos como titular) y registró 11 sacks y 80 tacleadas con los Jaguars (2014-16), Cincinnati Bengals (2017), Cleveland Browns (2018-19), Las Vegas Raiders (2020) y Houston Texans (2021).
Los Cleveland Browns lamentaron en sus redes sociales la muerte de Smith. “Estamos profundamente tristes por el fallecimiento del ex DC de los Browns Chris Smith”, publicó el equipo en Twitter. “Chris fue una de las personas más amables que hemos tenido en nuestra organización. Nuestros pensamientos y oraciones están con su familia en este difícil momento.”
Smith jugó un partido de la XFL el 9 de abril, registrando dos placajes en la derrota de Seattle por 34-33 ante los D.C. Defenders.
La vida de Smith estuvo marcada por la tragedia que le vivió en 2019. Su novia, Petara Cordero falleció en un accidente vial poco después de dar a luz al primer hijo de la pareja. Una rueda del coche de Smith se reventó y se estrellaron contra la media. Después, Petara Cordero se bajó del vehículo y fue atropellada por otro coche.
La edición de 2025 del Dakar va a ser un reto a la altura de la leyenda del raid más duro del mundo. David Castera, director de la carrera, lo ha diseñado para que la resistencia sea el factor clave a la hora de definir el vencedor. Por eso, la prueba ha ganado kilómetros con respecto al año pasado y la navegación tendrá también un papel absolutamente determinante. Serán un total de 7.759 para coches y 7.706 para motos, en muchos casos con recorridos diferentes. De esta manera, se priorizará realmente la capacidad de navegación de los participantes, sobre todo en el caso de los coches, dado que no podrán aprovechar las rodadas de las motos como guía.
Para saber más
Ser rápido será importante, desde luego, pero también lo serán tanto la precisión como el aguante de los pilotos a la hora de afrontar etapas que, en la gran mayoría de los casos, van a superar los 400 kilómetros. De las 12 etapas del rally, si no tenemos en cuenta el prólogo que se disputa hoy para definir el orden de salida, únicamente las cuatro últimas contarán con una distancia inferior a ese número. Tras una primera etapa de 412 kilómetros que se recorrerá mañana, los participantes se enfrentarán a una nueva etapa maratón, como la que se introdujo el año pasado, pero que se disputará en Bisha en lugar de en el empty quarter. Así, tendrán que hacer la máxima distancia posible hasta las 17.00 horas del 5 de enero, cuando deberán dirigirse a uno de los seis vivacs habilitados para descanso, pero sin ningún tipo de asistencia, y completar los kilómetros que les resten (hasta 958 para motos y 971 para coches) a partir del amanecer del día siguiente.
El 11 de enero, mientras, llegará la etapa más larga a jornada única: 606 kilómetros de especial con un recorrido en el que los pilotos se encontrarán tanto con piedras como con dunas, de camino hacia un empty quarter que, en esta ocasión, será absolutamente determinante para decidir el vencedor de la prueba. Eso es algo de lo que David Castera está absolutamente convencido. «Preferí hacer allí el final del rally, porque es más fácil de organizar logísticamente. Empecé el recorrido con la idea de acabar ahí y, desde ese punto, dibujé el Dakar al revés», desveló el director de la carrera el día de la presentación oficial del recorrido.
La ceremonia final, de hecho, tendrá lugar en Shubaytah, en el corazón del vivac y lejos de todo atisbo de civilización. En el fondo, una manera más de reiterar la dureza y la épica que siempre han envuelto a una prueba con estatus de auténtica leyenda entre los grandes amantes del motor.
En cuanto a los principales favoritos para proclamarse vencedores en la categoría de coches, la lista la encabeza de nuevo un Carlos Sainz más que dispuesto a volver a hacer historia, en este caso al volante de un Ford, para lograr su quinto triunfo en la prueba. Le siguen muy de cerca otro gran clásico de los rallies, el francés Sébastien Loeb, y, también, el piloto qatarí Nasser Al-Attiyah, cinco veces campeón del Dakar, quienes tratarán de derrotar a Sainz y hacerse con la victoria al volante de un Dacia.
En motos, mientras, los pronósticos sitúan al estadounidense Ricky Brabec, vigente campeón de la prueba, al botsuano Ross Branch, subcampeón el año pasado, y al argentino Kevin Benavides como las apuestas más claras para lograr el triunfo final del Dakar.
El Barça aprovechó su oportunidad. El conjunto azulgrana, en un partido en el que hizo gala de potencial ofensivo y solidaridad defensiva, se las arregló para imponerse a un Sevilla que vendió cara la derrota. Lewandowski, Fermín, quien fue expulsado con roja directa a instancias del VAR por una imprudente entrada sobre Sow, Raphinha y Eric García se encargaron de marcar los tantos para los visitantes mientras que Vargas envió al fondo de la red el que a la postre fue solo el momentáneo tanto del empate para los sevillistas. [1-4: Narración y estadísticas]
Hansi Flick, con vistas al duelo frente al Rayo del lunes que viene, no podrá contar ni con el onubense ni, tal vez, con un Araujo que se vio obligado a dejar el partido antes de tiempo tras una dura entrada de Saúl que acabaría por provocarle una dolorosísima lesión en su tobillo derecho.
El duelo tuvo unos primeros compases absolutamente trepidantes. El primer aviso serio lo dio un Lamine Yamal cuyo disparo tras una medidísima asistencia de Pedri acabó por encontrarse con una mano salvadora de Nyland. La acción, no obstante, sería solo la antesala del primer tanto del encuentro, obra de un Lewandowski que se las arregló para impactar un balón enviado hacia su posición por Íñigo Martínez para mantenerse fiel a su cita con el gol. La alegría azulgrana fue tremendamente efímera. Apenas un minuto después, el suizo Vargas, quien ha llegado al club de Nervión en el pasado mercado de invierno y tras aprovechar una acción en la que Saúl rompió casi por los pelos el fuera de juego, se encargó de hacer que el 1-1 subiera al marcador. Poco después, sería Szczesny quien le rebañaría in extremis el balón a Isaac en una jugada que acabaría con dura entrada del futbolista cedido por el Atlético sobre Araujo que, a la postre, obligaría al uruguayo a marcharse el banquillo por lesión.
Entrada que le costó la roja a Fermín.Jose BretonAP
El Barça trató de volver a romper el partido apretándole las tuercas a un Sevilla muy ordenado y solidario en tareas defensivas, que esperaba agazapado su opción para lanzarle otro golpe a la mandíbula a su rival a la contra. Lamine Yamal, muy marcado, fue muchas veces su mejor opción, si bien pecó también en alguna ocasión de exceso de individualismo. Por parte de los locales, mientras, fue Lukebakio, al límite del final del tiempo reglamentario de la primera parte y con un remate acrobático, quien obligó a Szczesny a lucirse para propiciar que el empate se mantuviera intacto al llegar al descanso. Un resultado que, desde luego, no les servía en absoluto a los de Flick para aprovechar el hecho de que tanto el Real Madrid como el Atlético se dejaran dos puntos en el derbi disputado este pasado sábado en el Bernabéu.
El que golpeó casi nada más de que se reiniciara el partido, en este caso, fue Fermín. El onubense, que entró en el campo como relevo de un Gavi que se llevó alguna tarascada y una amarilla de su participación en el primer tiempo, picó el balón de cabeza tras otro buen desplazamiento de Pedri y puso el 1-2 en el marcador. Por su capacidad de llegar desde la segunda línea y su excelente manera de manejarse en el juego aéreo, a pesar de que por su estatura muchos no lo dirían, podría recordar en parte a un Jose Mari Bakero que ya brilló con estas credenciales en el Barça hace más de tres décadas. Vargas, casi acto seguido, volvió a enviar el balón al fondo de la red, si bien la jugada sería finalmente invalidada por fuera de juego. Después, protestó, y mucho, la grada del Pizjuán una acción de Koundé sobre Sow que ni Hernández Hernández ni el VAR consideraron como penalti, poco antes de que Raphinha, con un latigazo con su pierna derecha desde fuera del área, pusiera el 1-3 en el luminoso para afirmar un poco más el paso de los de Flick hacia la victoria.
El camino aparentemente diáfano, con todo, acabaría por complicarse, y mucho, para los barcelonistas después de que el colegiado, a instancias del VAR, expulsara precisamente a Fermín por una dura acción sobre Sow con algo menos de media hora de juego aún por delante para llegar al final del encuentro. Flick tuvo que mover sus fichas y sacar a Lewandowski y De Jong para dar paso a Dani Olmo y Eric Garcia, en busca de armarse más en tareas destructivas y contar con más opciones para esconder el esférico. Dos argumentos con los que los barcelonistas lograron apaciguar el final de un partido en el que Szczesny tuvo que estar también muy atento y en el que Eric García acabó por materializar el definitivo 1-4 casi al límite del tiempo reglamentario.