Iker Bravo, el faro de España sub’20: “En el Madrid toqué fondo por muchísimas cosas de mi vida personal y profesional”

Iker Bravo, el faro de España sub'20: "En el Madrid toqué fondo por muchísimas cosas de mi vida personal y profesional"

Tiene solo 20 años, pero Iker Bravo (San Cugat del Vallés, 2005) ya ha vivido varias carreras en una. Creció en La Masia, con 16 años fichó por el Bayer Leverkusen, unas semanas después debutó como profesional y al verano siguiente firmó por el Real Madrid Castilla, donde no terminó de cuajar. Ahora brilla en el Udinese italiano y capitanea a la selección sub’20 que esta noche se juega los cuartos de final del Mundial ante Colombia (22:00, Teledeporte). Antes, charla con EL MUNDO.

Fue el MVP del Europeo sub’19 y ahora lleva el brazalete. ¿Se siente el líder de esta selección?
Intento ayudar a todos, pero los 21 somos igual de importantes. Son muy buenos jugadores y saben lo que pueden hacer dentro del campo. A estas alturas, después de todo lo que hemos pasado en la fase de grupos, relajarnos no es una opción. Sólo queda hacer otro esfuerzo más y estamos todos muy contentos. Yo lo que quiero es ser campeón del mundo y si le dan el MVP a un compañero, encantado.
La última vez que España ganó el Mundial sub’20 fue en 1999 con Xavi y Casillas, entre otros. Usted ni había nacido. ¿Genera presión?
Un Mundial es un Mundial y la presión se siente, pero no hay que compararse con otras generaciones porque cada una tiene lo suyo. Escuchas la lista de convocados de ese año y muchos son leyendas. Nosotros estamos empezando nuestro camino y lo único que queremos es demostrar el talento que hay.
Tiene 20 años, pero parece que ha vivido varias vidas.
Estoy ahora en un momento en el que me siento en plena forma física. He trabajado mucho para llegar a este punto físico y me siento muy bien, tanto emocional como futbolísticamente. Con muchas ganas de seguir dando pasos, de crecer como futbolista y también como persona.
¿Ha sido un verano importante para dar ese paso a nivel físico?
Sí. Como la Serie A es una liga tan física me he enfocado mucho en convertir mi cuerpo en un cuerpo de atleta, y creo que poco a poco me voy acercando. También me han ayudado mucho. Me cambié de agencia hace poco y me han ofrecido muy buenos profesionales, tanto a nivel de alimentación como en el tema de la preparación física.
¿Diría que está en el mejor momento de su vida?
Creo que siempre se puede estar mejor. Cuando sea mi mejor momento, a lo mejor estaré en donde yo quiero estar.
¿Y dónde quiere estar?
En los grandes clubes, en clubes que aspiren a ganar trofeos. Es el sueño que tengo desde pequeño, porque es el deporte que amo y estoy trabajando para ello.
¿Hay algo en eso de querer demostrar lo que en el pasado no pudo?
De cada etapa se aprende y siempre digo que de esa etapa aprendí muchísimo. Es lo que me llevo. No me centro en demostrar, sino en disfrutar. Nunca he jugado al fútbol para demostrar nada.
¿Genera presión salir del Madrid?
Da impresión y miedo. Como salir del Barça. Son las dos grandes canteras del mundo y fuera te encuentras cosas diferentes. Pero a mí salir de mi zona de confort siempre me ha hecho bien, nunca he tenido problema en hacerlo.
¿Qué significa su madre?
Siempre ha sido el pilar de mi vida y lo sigue siendo. Todo lo que hago lo hago también por ella. Me ha ayudado muchísimo y sólo quiero que se sienta orgullosa de mí. En los buenos momentos hay mucha gente, pero en los malos nunca me ha faltado su mensaje.
¿Cuál ha sido su peor momento?
En el Madrid fue cuando más toqué fondo por muchísimas cosas de mi vida personal y profesional, y mi madre era la primera en estar ahí, en venir a Madrid si me veía triste. Son cosas que no hace nadie.
Dijo que se había equivocado durante su etapa en el Madrid y que Arbeloa fue muy importante.
Es uno de los entrenadores más especiales que he tenido y que creo que voy a tener en mi carrera, porque ha sido el primero que se ha sentado conmigo y me ha hecho ver las cosas que de verdad valen la pena, y qué hacer para llegar a ser un futbolista profesional. Le estoy muy agradecido y seguro que será un gran entrenador. Y luego pues cuando reconoces los errores es cuando más aprendes. Sé que me equivoqué en muchas cosas, como cualquier niño de 17 o 18 años. Al final lo importante es rectificar los errores. No tengo problemas en decir que me equivoqué, pero me gusta más decir que aprendí.
Usted es muy religioso.
Es con lo que he crecido desde pequeño y lo que me ha inculcado mi familia, especialmente mi abuela. La fe que tengo en Dios lo es todo para mí porque cuando más jodido he estado es cuando más me he apoyado en él. Siempre me ha escuchado y me ha ayudado.
Ahora juega en Italia, la tierra de su ídolo Francesco Totti. Incluso lleva un peinado parecido.
Llevo la cintita (risas). Es una leyenda del fútbol y yo por mi estilo de juego me siento identificado con él, salvando muchísimo las distancias porque es una leyenda. Me gusta mucho.

kpd