La gira de los líos del Barça: promotores que no pagan, jugadores esperando una llamada y hasta un viejo conocido de Piqué

La gira de los líos del Barça: promotores que no pagan, jugadores esperando una llamada y hasta un viejo conocido de Piqué

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Después de la decepción de no poder jugar el Trofeo Joan Gamper en el nuevo Spotify Camp Nou, algo que el presidente Joan Laporta había dado por garantizado, el Barça protagoniza otro nuevo lío, ahora a propósito de la gira asiática planificada como parte de la pretemporada, con un partido en Japón y dos en Corea. La plantilla no se subió al chárter que esperaba en el aeropuerto de El Prat el jueves, según el club, por problemas del promotor en las garantías de pago del primer amistoso. La intervención de Rakuten, ex patrocinador del Barcelona, podría ser la solución, mientras los jugadores, incrédulos, aguardan una llamada.

La prioridad es, pues, solucionarlo lo antes posible para salvar el primer amistoso, en Japón, frente al Vissel Kobe, ex equipo de Andrés Iniesta, planificado para el domingo. En función de la solución y de los tiempos, podrá o no disputarse.

Inicialmente, el Barcelona comunicó que no viajaba porque no había recibido el pago de cinco millones de euros, correspondiente al primer amistoso. No ocurría lo mismo con los que debe jugar en Corea, ante el Seoul y el Daegu, por los que debe cobrar 10 millones. Esa parte y ese dinero, sin embargo, están también, ahora, en entredicho.

Aparece Rakuten

Fue entonces cuando Rakuten, firma implicada en la organización del primer amistoso, ya que a través de su plataforma se han puesto a la venta las entradas, se ofreció para garantizar la cantidad pendiente y que el amistoso siguiera en pie. La suspensión no sólo puede suponer un perjuicio económico para la marca, sino también reputacional, al margen de las posibles consecuencias legales. Sin embargo, la desconfianza mutua impidió que la solución llegara con la celeridad deseada por ambas partes.

El CEO de Rakuten, Hiroshi Mikitani, es un viejo conocido del Barcelona y de Gerard Piqué, vinculado a la empresa Kosmos y a la operación de la Copa Davis que puso en marcha el ex jugador azulgrana. De hecho, fue Piqué quien lo acercó al Barcelona para firmar un patrocinio clave en su momento, aunque se trataba del Barcelona de Josep Maria Bartomeu, no de Laporta. La sintonía, hoy, no es la misma.

La situación ha obligado a cambiar los planes a Hansi Flick y su ‘staff’, que volvió a dirigir el entrenamiento de sus jugadores en la Ciutat Esportiva azulgrana, mientras los futbolistas y los aficionados asisten, incrédulos, a una situación que escapa a su control y a la más imaginativa de las predicciones, aunque en el Barça de Laporta la realidad mejora a la ficción.

kpd