Los goles de Vinicius y Tchouaméni dieron al Madrid la sexta remontada en Liga, la décima de la temporada si se cuentan también los tres partidos ante el Unión Berlín y el Nápoles en Champions y el de las semifinales de la Supercopa contra el Atlético. Nueve ocasiones en las que la afición madridista disfrutó con algo que ya forma parte de la idiosincrasia blanca: darle la vuelta al marcador. Ante Las Palmas, en una de las salidas más difíciles que le quedaban en todo el curso, los de Ancelotti fueron capaces de sobreponerse al 0-1 de Javi Muñoz.
“Tenemos un banquillo motivado, que aporta mucho. Nos gustaría adelantarnos, pero no siempre puede suceder. Me quedo con que miro al banquillo y tengo muchas alternativas para cambiar los partidos”, elogió Ancelotti sobre sus futbolistas. En Gran Canaria, Tchouaméni saltó desde la banda para cabecear el 1-2. “Cuando nos pusimos por detrás, dimos un paso al frente y encontramos soluciones. Planteamos controlar en la primera parte y atacar en la segunda porque nuestro rival sólo había encajado dos goles en las primeras partes. Es una victoria muy importante”, valoró el italiano.
Los blancos le dieron la vuelta al 1-0 de Almería, al 0-1 contra el Getafe, al 0-1 contra la Real, al 1-0 y al 2-1 en Nápoles, al 1-0 del Barça, al 0-1 y el 1-2 del Nápoles en el Bernabéu, al 1-0 en Berlín, al 0-1 y el 2-3 del Atlético en Arabia, al 1-2 del Almería en Chamartín y ayer, en un feudo difícil, al 1-0 de Javi Muñoz.
Suplente decisivo
Diez remontadas que ayudan a mantener la racha de 15 jornadas consecutivas sin caer en Liga, una estadística que alza al Madrid hacia el liderato a expensas de lo que haga el Girona en Vigo. En Canarias, además, con la aparición de Tchouaméni después de las dudas que había dejado el francés en las últimas fechas, especialmente contra el Atlético en el Metropolitano: “Ha hecho el partido que suele hacer. De cabeza ha demostrado que somos muy peligrosos a balón parado”, declaró Carletto, y no le falta razón.
El Madrid es el equipo de la Liga que más goles marca en jugada ensayada: nueve, ocho de ellos desde el córner. Un mérito de los futbolistas pero también del staff técnico y de los ayudantes que se dedican al trabajo a balón parado, con Davide Ancelotti al mando.
“Un bizcocho en el hotel”
Tchouaméni estaba exultante después de un gol clave: “Así se ganan las Ligas. Trabajamos los balones parados antes de cada partido y eso nos hace buenos”, explicó, celebrando que también era su cumpleaños. “Lo celebramos con un bizcocho en el hotel y luego a Madrid a disfrutarlo”, bromeó.
El partido volvió a dejar una actuación notable de Vinicius, que marcó el gol del empate y fue el futbolista más incisivo de los blancos sobre el campo. Fue el que más regateó y el que más lanzamientos realizó sobre la portería de Valles, transformándose por momentos más en delantero centro que en extremo. De sus siete disparos, uno terminó siendo el del 1-1 y aunque se equivocó en varias definiciones intentando alguna vaselina imposible, de sus botas salió el córner que acabaría en el tanto de Tchouaméni. “Le he quitado en el minuto 90 porque quería un equipo más sólido en defensa”, finalizó Ancelotti.