Philipsen, primer líder de un Tour con taquicardia y sustos

Philipsen, primer líder de un Tour con taquicardia y sustos

Un pequeño terremoto para empezar. A falta de 17 km para la meta, el viento provocó un corte. El Visma le echó una mano a Eolo y, en unos instantes, se formaron dos grupos (por detrás algunos más). En el segundo se quedaron Evenepoel, Roglic, Carlos Rodríguez, Van Aert y un par de lujosos sprinters: Merlier y Milan. Llegaron a 39 segundos de Pogacar y Vingegaard, que ya han comenzado a establecer diferencias en una etapa nada propicia para ellas.

De Lille a Lille, del kilómetro cero a 41 metros sobre el nivel del mar al kilómetro 185, a 27. En medio de ambos, tres "tachuelas", bueno, tres cabezas de alfiler de cuarta categoría. Una etapa llamada a ser resuelta al sprint. Así sucedió, aunque no precisamente de un modo inofensivo e indoloro. A Jasper Philipsen se lo puso a su estela Mathieu van der Poel y luego Kaden Groves. Y el relámpago belga logró su victoria número 54. Por si no fuera bastante su velocidad, contar con un par de lanzadores de ese calibre prácticamente aseguraba la victoria. Dejó a Girmay en segundo lugar y a Waerenskjold en tercero. Enric Mas anduvo listo y se metió en ese primer grupo.

Este Tour se ha planteado como un duelo entre Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard. Es lógico que así sea. Ambos se han repartido las últimas cinco ediciones, con tres triunfos para el esloveno y dos para el danés. Con la estadística en la mano, es creencia generalizada que si alguien puede ganar a Pogi en una gran ronda, es Jonas. Pero Tadej, en este Tour y en lo que le queda de vida deportiva, va más allá. Pelea contra Vingegaard, contra otros rivales y, a la vez, contra y a favor de sí mismo en persecución de Eddy Merckx.

demasiados retos por delante

No pocos pensamos que se trata de una empresa inútil. No la persecución, sino el resultado. En la persecución, Pogacar va a acumular muchos más triunfos. Pero no logrará alcanzar a Merckx porque éste es... inalcanzable. Afirmación siempre arriesgada, pero justificable. En ningún otro deporte es tan grande la diferencia entre su máximo representante histórico y el segundo de a bordo. Con toda probabilidad, Pogacar acabará su carrera como un indiscutido lugarteniente del belga, por delante de Bernard Hinault y Fausto Coppi. Pero, a los 26 radiantes años, el tiempo, paradójicamente, corre en su contra. Tiene demasiados retos por delante. Puede que no le dé para superarlos todos.

La etapa provocó dos bajas importantes, las de Filippo Ganna y Stefan Bissegger, dos corredores de peso y dos elementos muy destacados de cara a la contrarreloj del miércoles, aspirantes a vestirse entonces de amarillo (como el frustrado Evenepoel). Aportó algunas imágenes en las cotas. En la de Mont Cassel, pedregosa, se enfrascaron en el sprint, yendo al límite, buscando los puntos de la montaña, Benjamin Thomas y Mattéo Vercher, que marchaban ligeramente destacados. Una temeridad con un piso de piedra. La bici de Thomas resbaló y se llevó por delante la de Vercher. Los huesos de ambos, impactando contra el granito, lo lamentaron. La de Mont Noir la coronó, mostrándose juguetón, Vingegaard en la cabeza del grupo. No envió un aviso llamativo ni emitió un mensaje autoritario en tan leve escenario, pero se gustó y nos gustó. No es frecuente un gesto así, absolutamente superfluo, en alguien tan poco dado a frivolidades.

Etapa nada rutinaria la del domingo, y menos en estas circunstancias. En los últimos kilómetros se acumulan dos cotas de tercera categoría y una de cuarta, cortas pero duras. La última, rozando el 10% de porcentaje, a cinco kilómetros de la llegada. Seguramente los sprinters no podrán salvar la sucesión de obstáculos. ¿Habrácontraataque de las víctimas ilustres del sábado?

Verstappen silencia Silverstone y Alonso batalla con los mejores

Verstappen silencia Silverstone y Alonso batalla con los mejores

Más de 150.000 aficionados suspiraban en Silverstone por una pole de Lando Norris o Lewis Hamilton. El joven aspirante al título llegaba con la inercia ganadora del pasado domingo en Austria y el heptacampeón había encontrado al fin una dosis de velocidad y confianza al volante del Ferrari. Sin embargo, nadie pudo detener este sábado a Max Verstappen, autor de su tercera pole en el GP de Gran Bretaña (1:24.892), la cuarta del Mundial 2025, con 103 milésimas sobre Oscar Piastri, líder del campeonato, y 118 ante Norris. Con todos pendientes de McLaren y Ferrari, Mad Max dio la campanada al volante del Red Bull. Y nada más quitarse el casco, con una pícara sonrisilla, dijo que todo se debía al viento favorable. Para partirse de risa.

Tras el primer intento de la Q3, Piastri comandaba la tabla, con 13 centésimas sobre Hamilton y 17 sobre Norris. Cuando la pole debía diludidarse entre ellos surgió Verstappen, que venía de ceder 272 milésimas y casi medio segundo en la Q2. Sólo seis después de su abandono en el Red Bull Ring, que parecía descartarle para un quinto título, Verstappen deleitó a la F1 su otra muestra de su incomensurable talento. Nadie sabe extraer tanto del coche, ni optimiza mejor los recursos en el momento definitivo.

Cada semana, el año de Verstappen guarda más semejanzas con el Mundial 2012 de Fernando Alonso. No terminan ahí los parecidos, dado que el asturiano volvió a colocar a Aston Martin entre los mejores. Esta vez marcó el noveno tiempo (1:25.621), aunque saldrá séptimo en la parrilla por las sanciones a Andrea Kimi Antonelli y Oliver Bearman. Poco se pudo objetar a la qualy de Alonso, salvo esa vuelta postrera, donde aún podía haberse dado el gusto de superar a los dos rookies.

Dura sanción a Bearman

El objetivo de Alonso pasaba por alcanzar la Q3 con tres juegos de blandos. Su intento inicial (1:25.707) sólo palideció ante los cuatro favoritos. Con los McLaren y Verstappen en 85 milésimas y Russell a cuatro décimas de la cabeza, el ovetense sólo cedía siete centésimas frente a George Russell. Y no perdió la oportunidad de denunciar una obstaculización de Antonelli.

Ferrari, en problemas hasta entonces, sacó la cabeza durante el segundo intento de la Q2, colocando a Hamilton y Charles Leclerc en cabeza. Nunca se puede dar por muerto al heptacampeón en un circuito donde atesora siete poles. El monegasco, por su parte, parecía herido en el orgullo después de que le anotaran un incidente bajo banderas amarillas. A la meteórica mejora de los coches rojos hubo que añadir las sorpresas de Bearman y Pierre Gasly.

Nadie contaba con el novato de Haas, penalizado en la FP3 con 10 posiciones en la parrilla tras un choque en el pit lane bajo bandera roja. Tampoco entraba en los pronósticos esa vuelta postrera del líder de Alpine. De modo que Williams quedó de nuevo como el principal damnificado. El FW47 rendía muy bien en el primer sector, aunque ni Carlos Sainz ni Alex Albon lograron reconducir el rumbo. Al menos, el madrileño podrá partir décimo, beneficiado por la penalización a Bearman. La lucha por los puntos ante Yuki Tsunoda o Isack Hadjar se antoja atroz para los pilotos de James Vowles.

Otro revés para Colapinto

A seis minutos para el final de la Q1, Franco Colapinto protagonizó otro de esos errores que pueden precipitar su adiós prematuro en Alpine. Un trompo a la entrada de la recta de meta cuando rodaba penúltimo. Por entonces, Alonso marcaba un crono (1:26.108) únicamente inferior a Piastri y Verstappen. Las condiciones del asfalto, bajo una llovizna casi imperceptible, se antojaban ideales para el asturiano. No para Lance Stroll, eliminado por cuarta vez consecutiva en la primera criba.

Sainz salvó la papeleta, con récord incluido del primer sector, mientras Gasly dejaba fuera a Liam Lawson. Un paso atrás para el neozelandés, que desde el viernes venía mostrando una considerable velocidad con su Racing Bulls. Con 19 pilotos empaquetados en menos de siete décimas, nada pudo darse por seguro. La eliminación de ambos Sauber, el equipo que más venía mejorando desde Montmeló, bien pudo dar fe de ello.

Familiares, amigos e hinchas se despiden en el funeral de Diogo Jota y su hermano André en Gondomar: "Siempre tenía una sonrisa"

Familiares, amigos e hinchas se despiden en el funeral de Diogo Jota y su hermano André en Gondomar: “Siempre tenía una sonrisa”

Actualizado Sábado, 5 julio 2025 - 16:52

El mundo del fútbol portugués y el Liverpool Football Club han dado este sábado su último adiós a Diogo Jota, jugador del equipo británico, y a su hermano André, en un emotivo funeral celebrado en Gondomar, al norte de Portugal, su localidad natal. Ambos hermanos han fallecido trágicamente en la madrugada de este jueves, en un accidente de tráfico en la A52, a la altura de Cernadilla (Zamora). Diogo Jota tenía 28 años, mientras que su hermano André Felipe Silva, también futbolista en el Penafiel de la segunda división portuguesa, tenía 25 años.

Las exequias han tenido lugar en la Iglesia Matriz de Gondomar, contando con la presencia de destacadas figuras del balompié. Entre los asistentes se encontraban el seleccionador de Portugal, Roberto Martínez, el presidente de la Federación Portuguesa de Fútbol (FPF), Pedro Proença, y una nutrida representación de futbolistas de la selección nacional, como Bernardo Silva, João Moutinho, Rúben Dias, João Félix o Rui Patrício.

Dolor en Gondomar

La delegación del Liverpool, club al que Diogo Jota pertenecía desde 2020, ha llegado al funeral portando dos simbólicas camisetas de flores con los dorsales 20 (de Diogo Jota) y 30 (de André Silva). El defensa Virgil van Dijk llevaba la camiseta de Jota, mientras que el centrocampista Jordan Henderson portaba la de André. Al funeral asistieron también compañeros y excompañeros de Diogo Jota, incluyendo a Tiago Alcántara, Fabinho, Ricardo Carvalho y Nelson Semedo. Además, se ha hecho presente su representante, Jorge Mendes, y el presidente del Oporto, André-Vilas Boas, club en el que Diogo Jota también jugó.

Los padres de Diogo Jota, Joaquim e Isabel, en el funeral

Los padres de Diogo Jota, Joaquim e Isabel, en el funeralManu Fernandez | AP

Los dos féretros han sido sacados de la Capilla de la Resurrección y llevados al interior del templo, escoltados por jugadores, amigos y familiares "rotos de dolor". Los funerales han sido oficiados por el obispo de Oporto, Manuel Linda. Al finalizar la ceremonia, los dos hermanos serán enterrados en el cementerio ubicado dentro del recinto de la Iglesia, donde numerosos vecinos de Gondomar se han aproximado para ofrecer su apoyo a la familia, muy conocida en este pueblo a las afueras de Oporto.

Para saber más

"Lo recordaré como alguien muy simpático, muy cortés, que quería a todos y siempre tenía una sonrisa", declaró a la AFP uno de sus antiguos compañeros de clase, Pedro Neves, un obrero de 31 años, que se encuentra cerca del campo de fútbol del Gondomar Sport Clube, donde Diogo Jota fundó una academia que lleva su nombre.

¿Quién fue Diogo Jota?

Diogo Jota, delantero de gran trayectoria, se formó en los clubes portugueses Gondomar y Paços de Ferreira. En 2016 fichó por el Atlético de Madrid, y posteriormente jugó cedido en el FC Porto hasta 2018, año en que dio el salto a la liga inglesa. Desde 2020 era una pieza clave en el Liverpool.

El jugador Joao Felix en el funeral de Diogo Jota

El jugador Joao Felix en el funeral de Diogo JotaESTELA SILVA | Efe

El trágico suceso ocurre poco después de un importante acontecimiento en la vida personal del jugador. Diogo Jota se había casado el pasado 22 de junio con su pareja desde hacía 13 años, Rute Cardoso, con quien tenía tres hijos menores de edad, entre ellos una niña de tan sólo ocho meses

Las lágrimas de Cancelo y Rúben Neves por su “mejor amigo” Diogo Jota: “Le llamaron en mitad de la noche y no pudo dormir”

Actualizado Sábado, 5 julio 2025 - 08:32

No había otro nombre en el ambiente. Diogo Jota fue el protagonista del Fluminense - Al Hilal y del Palmeiras - Chelsea. No podía ser de otra manera. En el primer partido, sus excompañeros Joao Cancelo y Rúben Neves no pudieron contener las lágrimas, especialmente el segundo, su "mejor amigo" dentro del mundo del fútbol, en el minuto de silencio previo al primer encuentro. En el segundo, Pedro Neto sostuvo una camiseta en su honor. Todos tenían su nombre en la cebeza.

Entre medias, desde el Metlife Stadium, Jude Bellingham reflexionaba en la previa del Real Madrid - Dortmund sobre "una de las primeras cosas que he hecho al saber la noticia". "He escrito a mi hermano. Te pones bastante emotivo. Era un gran ser humano. Desde aquí le mandamos un mensaje de cariño a su familia y amigos", declaró el centrocampista inglés.

En la misma línea se mostraron Aurelien Tchouaméni y Arda Güler, los otros dos futbolistas del Madrid que participaron en la zona mixta previa a los cuartos de final del Mundial de clubes. "Antes de empezar a contestaros querría mostrar mi pésame a la familia y amigos de Diogo Jota y su hermano. Nunca los olvidaremos", dijo el joven turco. Por su parte, el francés aseguró que "nos afectó un poco más".

"Hay un chico como Trent que le conocía un poco más, hemos jugado contra él y es difícil para todos los que estamos en el mundo del fútbol. Sólo queremos enviar un mensaje a su familia, que el mundo del fútbol está con ellos y poco más puedo decir", aseguró Tchouaméni, emocionado con la situación.

"Es difícil para todos, al final en la vida todo puede pasar. Ahora tenemos la oportunidad de jugar un partido de fútbol y tenemos que disfrutar de esta oportunidad porque no sabemos lo que va a pasar el día después. Eso es la vida", añadió el centrocampista francés.

Los tres jugadores del Madrid no fueron los únicos de la expedición en reaccionar a la noticia del fallecimiento de Diogo Jota y su hermano. "Tanto en mi nombre como en el nombre del club quiero mandar nuestro más sentido pésame a la familia de Diogo Jota y André Silva y un fuerte abrazo", declaró Xabi Alonso nada más comenzar su rueda de prensa. "Empezamos el día con una sensación que te hace reflexionar, que hemos hablado y que desde aquí mandarle mucha fuerza", añadió el técnico vasco.

El nombre del delantero portugués se repitió en los estadios que albergaron los dos primeros cuartos de final del Mundial de clubes. El Fluminense dio la sorpresa contra el Al Hilal (2-1) y el Chelsea venció al Palmeiras (1-2), citándose ambos en las semifinales del torneo, pero el evento era lo de menos. En todos los clubes había futbolistas que de una u otra manera se habían visto afectados por la tragedia de Jota.

"No es fácil, Rúben Neves es íntimo amigo de Jota. La familia lo llamó en mitad de la noche de ayer y no pudo dormir, Cancelo también... Nos afectó a todos. Les felicito a los dos porque compitieron e hicieron su trabajo de la mejor manera", aseguró Bono, portero del Al Hilal y compañero de Neves y Cancelo.

En un vídeo de hace unos meses, Diogo Jota admitió que "mi mejor amigo en el mundo del fútbol es Rúben Neves". Ambos, compatriotas portugueses, compartían selección, concentraciones y viajes en cada parón internacional. Incluso formaron parte del mismo vestuario en su época en el Wolverhampton.

Descubierta en una playa, madrileña del Barça y amiga de Lamine: así es Vicky López, la nueva estrella de España

Actualizado Viernes, 4 julio 2025 - 22:25

Lleva el 19 a la espalda y se ha destapado en su debut en una Eurocopa con una personalidad arrolladora. Que España llegue a la final de la Eurocopa será su mejor regalo de cumpleaños. No piensen que es Lamine Yamal de quien hablamos, es de Vicky López (Madrid, 1996). Con su compañero del Barça y amigo comparte número, precocidad y querencia por hacer diabluras: da igual un regate ante una estrella que un petardo en el patio del colegio, para disgusto de su padre. «Con Lamine hay muy buena relación. Le digo que está loco», reconoce la jugadora a la que Alexia Putellas felicitó tras la goleada ante Portugal «por tomar siempre la mejor decisión, que es lo más difícil».

Hace apenas diez años que Vicky llegó a fútbol por un veraneo en Benidorm. Había probado el fútbol sala con seis años en el colegio de Torrebilano del Ensanche de Vallecas, primero en un equipo mixto y luego con chicas de 10 años. Después llegó el Sport Villa de Vallecas, donde apenas jugó a fútbol 7 media temporada «porque no íbamos bien en los estudios ni mi hermano ni yo y mi padre nos castigó sin fútbol», explicaba la futbolista hace un año, cuando la citó Montse Tomé por primera vez.

Aquel verano se marchó de vacaciones a la casa familiar de la Costa Blanca y allí pasaba ratos jugando con sus primos en la playa. Descarada, Vicky vio a unas chicas con la camiseta del Rayo Vallecano, que ya la rondaba para su equipo femenino. Eran Alba Mellado y Paola Ulloa, jugadoras y entrenadoras del Madrid CFF, uno de los pocos clubes independientes que quedan en la Liga F. A base de partidillos y juegos en el mar con hinchables se la ganaron. Cuando acabaron las vacaciones, Vicky le dijo a su padre que quería fichar en el Madrid CFF.

Jugó en un equipo mixto desde benjamín a infantil, con límite en los 14 años. En esa etapa, Vicky tuvo que enfrentarse con 11 años a la muerte de su madre, Joy Felix, a causa de un tumor cerebral a los 43 años. A ella siempre dedica sus goles, «porque me cuida desde el cielo», decía en Berna. Fueron muchas dedicatorias porque sus goles, a veces de conducción desde a frontal de su área, asombraban.

Precocidad y Golden Girl

En 2022, con 15 años, María Pry, hoy flamante coordinadora deportiva de selección en la RFEF, la hizo debutar en la Liga entonces Iberdrola. Alternó con el filial, con el que marcó 18 goles, y llegó el Barça, jugar con Balones de Oro y el debut en Champions recogiendo el testigo de Ansu Fati como la jugadora del Barça de menor edad que debutaba. Fue ante el Rosengard en el Camp Nou y tenía 16 años. «No estaba tan lejos del recreo», confesaba entonces. Después, el Golden Girl, el Balón de Oro de los Sub'21, un contrato hasta 2028 que le ha permitido comprarse un piso en Barcelona - «hace tres años pagaba por jugar», admitía en febrero a Broncano en La Revuelta-, y la Eurocopa.

Con España, ha sido campeona del Mundo Sub'17, y MVP del torneo, y ha visto cómo se le han escapado dos Eurocopas Sub'17. Porque siempre ha jugado por encima de su edad. Mientras su amiga del alma en el Madrid CFF Cristina Librán es la capitana de la Sub'19, ella ha marcado dos goles en sus dos primeros partidos como titular con Tomé.

Ante Portugal, la estadística dice que tuvo un 90% de precisión en el pase en los 81 minutos que disputó. Logró un gol que la convierte en la española más joven en marcar en una Eurocopa, pero es que los récords ya no caben en su perfil.

Eso sí, en el vestuario aún no le han dejado tomar las riendas del altavoz. Le encanta el trap y el dembow, una derivación dominicana del reguetón y el dancehall, dicen. «Si lo pongo, me taladran la cabeza. Pero ante Japón puse Tacata y marqué, y Patri me la volvió a poner para animarme ante Portugal»», admitía en el túnel de vestuarios. Batalla perdida, es solo cuestión de tiempo que tome la playlist.

La travesía de 269 días de Carvajal, el “vínculo” con sus dos hijos y un vestuario sin “faro”: “Cuando él habla, todos callan”

Actualizado Viernes, 4 julio 2025 - 22:24

«Cuando él habla, todos callan». Dani Carvajal regresó a una convocatoria del Real Madrid el pasado martes ante la Juventus en los octavos de final del Mundial, 269 días después de la triple rotura sufrida en su rodilla derecha: ligamento cruzado anterior, colateral externo y tendón poplíteo. Una combinación devastadora. Durante esos meses, el vestuario del conjunto blanco ha sufrido dentro y fuera del campo sin su principal «faro», como le definen, y el lateral ha encontrado en su familia y en su madurez una nueva forma de enfocar el deporte y la vida.

Hoy volverá al banquillo, todavía a la espera de unas semanas para recuperar el tono físico y el ritmo competitivo necesario para pelear con Alexander-Arnold, o con uno de los tres centrales, por un puesto en el once. Pero Xabi Alonso le quiere cerca del grupo, en el autobús, en el vestuario, en el hotel... Por eso, cuando más presión había sobre Carlo Ancelotti y sobre la plantilla en gran parte de este curso, el italiano y los futbolistas le pidieron a Carvajal, en pleno proceso de recuperación, un contundente «ven con nosotros». Y Dani fue. Estuvo en la concentración de Valdebebas antes de los encuentros de Champions contra el Atlético en el Metropolitano o el Arsenal en el Bernabéu, y también en La Cartuja para la final de Copa.

"Ha sido duro sobrevivir sin él"

En un grupo que ha ido perdiendo referentes durante las últimos años, como Sergio Ramos o Casemiro, y en el que los capitanes que han heredado el brazalete han sido más líderes sobre el césped que en el día a día, como Benzema o Modric, Carvajal, y en segundo plano Lucas Vázquez, se han hecho con el gobierno de la plantilla. Por eso Ancelotti quiso al madrileño de vuelta a los viajes lo antes posible, porque necesitaba una voz cuando la suya no alcanzara la cabeza de sus jugadores. «En el grupo no había referentes que tuvieran la energía de Dani, ha sido duro sobrevivir sin él en el día a día", explicaban en Valdebebas. La temporada no terminó bien, pero la presencia de Carvajal sentó las bases del futuro a medio plazo: sin Modric, el brazalete será suyo y el liderazgo será también material.

Por eso Xabi Alonso no ha dudado en hacerle parte del viaje a Estados Unidos, un pequeño campamento de verano para el Madrid en esta nueva etapa, aunque la idea del tolosarra es no forzarle en ningún partido. «Es el que da el primer grito y el último. Llevaba mucho tiempo siendo el primer capitán aunque no lo fuera», cuentan desde la concentración de los blancos en Palm Beach.

"Nunca he echado tanto de menos a alguien como a mis hijos aquí"

Carvajal entró en el túnel el 5 de octubre, en los minutos finales del Real Madrid - Villarreal y tras una acción fortuita con Yeremi Pino, y comenzó a ver la luz del final el 19 de marzo, cinco meses después, cuando se puso de nuevo unas botas de fútbol y pisó el césped de uno de los campos anexos de Valdebebas, el que está más cerca del que usa el primer equipo. Eso, el recuperar el día a día con sus compañeros, y el tener más tiempo para estar con su mujer y sus dos hijos, curiosa contradicción, han acelerado los pasos mentales y futbolísticos de su rehabilitación y le ha unido más al grupo.

«Si la lesión la hubiese sufrido más joven me hubiese comido mucho más la cabeza. He tenido una recuperación más estable marcándome objetivos a corto plazo y he podido disfrutar de mis hijos. Este año no he viajado y he podido hacer un vínculo con ellos espectacular, la verdad. Nunca he echado de menos tanto a alguien como a ellos en este viaje al Mundial de clubes», reflexionaba con los medios en Miami.

Pierna fina y sin masa muscular

El torneo de Estados Unidos ha sido su «desafío» desde que pasó por el quirófano en octubre. Ocho meses de distancia para una lesión tan grave de rodilla puede parecer poco, pero Carvajal quería ser uno más en Palm Beach. No quería ver el Mundial ni las primeras semanas de convivencia con Alonso desde la enfermería de Valdebebas.

La triple rotura le dejó la pierna muy fina y casi sin masa muscular, con las fibras bastante atrofiadas, y de hecho todavía en las sesiones del equipo blanco en el Mundial se observa cierta diferencia entre sus dos piernas. «Lo importante es que la rodilla no ha dado ninguna complicación, sabiendo que hasta el año no sueles estar a un nivel óptimo de condición y de chispa, pero me encuentro bien», añadió. El «faro» del Madrid está de vuelta.

El mito del héroe y el villano o por qué enamora más Pogacar que Vingegaard: "Tiene carisma. Es sonriente, dicharachero, feliz..."

El mito del héroe y el villano o por qué enamora más Pogacar que Vingegaard: “Tiene carisma. Es sonriente, dicharachero, feliz…”

«¡Buen rollo, siempre!», grita Tadej Pogacar en una de las primeras secuencias de la tercera edición del documental 'En el corazón del pelotón', de Netflix, mientras hace un caballito sobre su Colnago. Y ahí podría estar el secreto de todo, de por qué nos conquista un esloveno que arrasa, el tipo que no deja ni las migajas.

Para saber más

Nunca en la historia del Tour una rivalidad se consolidó de tal forma, jamás los dos mismos ciclistas se repartieron los primeros puestos del cajón cuatro años consecutivos. El quinto episodio del Pogacar-Vingegaard, con sus filias y fobias, arranca este sábado en Lille como un torrente de promesas, con las batallas pasadas, derrotas y victorias incrustadas ya para siempre en el ideario colectivo del ciclismo de época, marcadas a fuego para ambos y sin apenas elementos externos (Evenepoel, Roglic...) que amenacen su binomio. Es el danés ahora el aspirante, el que busca el resquicio por el que hacer dudar a un Pogacar tiránico. Ellos son la reencarnación de Coppi y Bartali, de Anquetil y Poulidor, de Merckx y Ocaña, de Hinault y Lemond. De Bird y Magic, de Nadal y Federer, de Ali y Frazier. Se necesitan. Se engrandecen. «Prefiero esta rivalidad a haber ganado cuatro Tours por 10 minutos», se sinceraba el líder del Visma, quien, a diferencia del 2024 con la terrible caída de la Itzulia, ha podido tener una preparación óptima.

Pogacar acude pletórico tras un comienzo de año en el que lo ganó todo menos París-Roubaix, San Remo y la Amstel. En las antípodas del carisma, tan distintos en su forma de ser y de correr, en sus orígenes y en sus ambiciones, con el único elemento en común de perseguir la misma gloria. ¿Por qué Pogacar cae mejor y acapara las preferencias del aficionado? «Por su forma de ser. Comunica más, es más abierto. Vingegaard es más tímido, no conecta con el gran público», explica Eduardo Chozas, quien, sin embargo, no se postula. «Están ambos tocados por una varita y son nobles. A mí me parecen dos grandes deportistas, no tengo preferencia clara. Vingegaard tiene buenos detalles. Recuerdo cómo esperó a Tadej hace dos años cuando se cayó», elogia el ex ciclista y ahora comentarista de Eurosport.

Para ese evidente favoritismo del siempre apasionado aficionado ciclista hay que buscar explicación en la psicología, recurrir incluso «al mito grabado en el inconsciente colectivo de los seres humanos, el del héroe y el villano», como expone Rubén Moreno, psicólogo deportivo y profesor de la Universidad Europea. «Pogacar irrumpe de una manera muy particular, destronando a Roglic, al todopoderoso Jumbo Visma, en aquella cronoescalada [La Plagne]. Quedó en la retina una imagen icónica. Era un chico jovial, alegre, feliz que casi sin darse cuenta había ganado el Tour», rememora los orígenes del fenómeno, razonando por qué el fan español en particular se decanta por el esloveno. «Ahora no tenemos con quien identificarnos. Podemos ser más landistas, alguno tiene fe todavía en Enric Mas... Luego vienen Romeo, Ayuso... Y aquí entra el contexto sociocultural. Para un español, ver a un tío sonriente, alegre, feliz, dicharachero... nos es más fácil identificarnos que con el introvertido que cuando llega a meta sólo quiere besar a su mujer e hija y casi no concede entrevistas. Ser introvertido en España no se premia. Siempre hay alguien que dirá: '¿A este qué le pasa?' 'Es un raro...'. Por eso la identificación es mayor con Pogacar".

Al carisma de uno y otro se aferra también Pascual Momparler, ex seleccionador español. "Lo que sucede con Pogacar es que gana y arrasa. Todo lo hace a lo grande. E influye que tiene muy buena relación con la prensa. Siempre ofrece muy buenas respuestas. Recuerdo este año, cuando ganó en Flandes, le dijeron que hacía mucho que nadie ganaba esa clásica con el maillot arco iris y el respondió que no, que eso pasó en la edición anterior en la categoría femenina. Gusta a la gente porque es muy natural, fresco. Se nota que no prepara las respuestas con su jefe de prensa. En cambio, Vingegaard es como nuestro Carlos Rodríguez, buena persona, más callado, menos dicharachero, cala menos entre el público", argumenta.

Vingegaard, en Lille, en los días previos al comienzo del Tour.

Vingegaard, en Lille, en los días previos al comienzo del Tour.Thibault CamusAP

Eso, la relación con los medios, que el danés ha ido tratando de mejorar en los últimos tiempos, también tiene mucho que ver en la percepción de ambos. "Pogacar tiene cara de niño, es simpático, corre de una manera alegre, incluso revolucionaria. Hace lo que quiere, entre comillas. Y se expresa bastante mejor que Vingegaard, al que no tacharía de antipático, pero es más frío, calculador, metódico, cuidadoso con sus declaraciones. Se moja entre poco y nada a la hora de regalarnos algún titular", cuenta Carlos de Torres, el periodista español más veterano en el Tour: lleva 27 ediciones cubriéndolo para la agencia EFE.

Esa imagen gélida Vingegaard la ha ido intentando transformar en los últimos tiempos. Especialmente empático se le comprobó en el último Tour, en la derrota. Fueron varias las ocasiones en las que la emoción le conquistó. "Es muy anticuado pensar que un hombre no tiene derecho a llorar. Mostrar tus emociones me parece incluso más fuerte que intentar ocultarlas", admitía en una entrevista reciente a L'Equipe desde Sierra Nevada, donde ha preparado el Tour.

Pero, cómo combatir con la sonrisa de Tadej, con sus bromas en redes sociales, con sus guiños sobre la bici incluso en agonía. "El carisma no tiene que ver con el sufrimiento. Es una cualidad que tiene una persona que hace que la gente se sienta atraída por él o por ella. Pogacar lo tiene. Sonriente, dicharachero, hace gestos continuamente, como en la pasada Dauphiné, cuando bajó a por un bidón para su compañero Sivakov", concluye Moreno.

Alcaraz, cada vez más serio: supera a Struff y alcanza los octavos de Wimbledon

Alcaraz, cada vez más serio: supera a Struff y alcanza los octavos de Wimbledon

Flota sobre Wimbledon la espera que ya marcó Roland Garros: la final del domingo 13 aguarda a Carlos Alcaraz y Jannik Sinner y cualquier otro visitante será una sorpresa. La hierba concede menos errores que la tierra y sería irrespetuoso negar opciones a Novak Djokovic, pero los dos primeros del mundo vuelven a estar por encima del resto. Este viernes, Alcaraz ascendió otro escalón con su victoria en tercera ronda ante el alemán Jan-Lennard Struff por 6-1, 3-6, 6-3 y 6-4 en dos horas y 25 minutos.

Como ocurrió en París o en años anteriores, la magia de momento aparece a ratos, muchos trucos siguen guardados, pero su tenis sigue siendo prominente. El español se ha acostumbrado a transitar por estas rondas iniciales a un ritmo constante, a vencer con el mínimo desgaste. Por el camino de la madurez ha adoptado una versión más seria de sí mismo, con menos celebraciones, incluso menos sonrisas, pero al mismo tiempo una versión más fiable. Para que pierda así, concentrado, firme, debe ocurrir algo extraño.

Ante Struff, un rival que ya le había incordiado en los cuatro encuentros anteriores, sufrió ciertos problemas y los resolvió sin mover ni una ceja. El alemán, el número 125 del mundo, irregular como pocos, supone el paradigma del tenista que más inquieta a Alcaraz. Un saque vertiginoso, un juego plano y movimientos indescifrables. En ocasiones Struff se invertía para pegar con su revés, una decisión táctica curiosa. Para resumir el partido sirve un dato: se disputaron más de 200 puntos y únicamente cinco -¡cinco!- se resolvieron en un intercambio de más de nueve golpes.

HENRY NICHOLLSAFP

Ante un adversario así, para Alcaraz necesitaba mucha confianza en su saque y ésa sigue siendo su asignatura pendiente en este Grand Slam. Nuevamente hubo instantes en los que jugó con demasiados segundos servicios y en consecuencia Struff disfrutó de sus opciones de break. Pero frente a ese abismo el número dos del mundo siempre encontraba el recurso necesario, el toque perfecto.

El extraño inicio

Los dos primeros sets no tuvieron relato. En el primero, Struff apareció nervioso sobre la pista y falló casi todo lo que intentó. Parecía entregado a una derrota irremediable, fallón, hasta tristón. Pero en el segundo set se reconcilió con su saque, empezó a conectar su derecha y Alcaraz le sorprendió el cambio. Con la igualdad en el marcador, los dos últimos sets fueron más interesantes.

Cada vez que el español conseguía poner la bola en juego ofrecía un recurso distinto para enredar a su rival, para moverlo y finalmente confundirlo. Tan explosivo como siempre, tan inspirado cerca de la red, también jugó siempre que pudo con las alturas y los ángulos; en definitiva, jugó al tenis, a su tenis, que es el mejor tenis. Un ejemplo claro fue el último break que consiguió, en el cuarto set, en el que llegó a conectar un tiro pasante por encima de un jugador de 1,93 metros. En octavos de final, el domingo, le espera Andrei Rublev, el 14 del mundo, pero para que Alcaraz pierda así, concentrado, firme, debe ocurrir algo realmente extraño.

Silencio, lágrimas y dolor infinito en Gondomar, cuna y tumba de Diogo Jota y su hermano: "No merecían este final, nadie lo merece"

Silencio, lágrimas y dolor infinito en Gondomar, cuna y tumba de Diogo Jota y su hermano: “No merecían este final, nadie lo merece”

Un ventilador enorme rompe el silencio en la capilla de la Resurrección. El representante Jorge Mendes y el ex futbolista Joao Moutinho se sientan en las primeras filas del edificio junto a la familia Silva. Enfrente, dos féretros de color marrón, cerrados, con los restos mortales de Diogo José Teixeira Da Silva, Diogo Jota, y André Silva, su hermano menor, presiden un velatorio por el que pasará todo Gondomar a lo largo de este viernes. Al interior se llega tras atravesar un enorme pasillo de coronas de flores que mandan compañeros del futbolista, agencias de representación, clubes... pero también vecinos de la localidad que se quieren acordar de estos dos hermanos cuyo fallecimiento ha trascendido las murallas de esta pequeña localidad vecina a Oporto.

Si uno recorre los pasos que dieron los hermanos Silva, Diogo y André, ese camino está ligado a una pelota, lo primero, y a una portería, si había, después. Ana Oliveira, vecina de la familia cuando aún vivía en una casita humilde de Sao Cosme, en lo alto de Gondomar, tenía ambas cosas. Su hijo jugaba al fútbol con los hermanos en la calle sin asfaltar en la que se situaba su grupo de viviendas. Luego coincidiría con André en el Gondomar. "Tengo una tristeza muy grande", explica a EL MUNDO desde el balcón de su casa, contigua a la de los Silva, y rompe a llorar sin consuelo.

La muerte de los dos jóvenes ha golpeado duramente este humilde barrio de una localidad limítrofe a Oporto y desde la que se puede oler el mar, aunque no sea completamente costera. Apenas hay movimiento por unas calles mitad de asfalto, mitad de arena. En una de ellas para su pequeño camión repleto de material de obra Angelo Oliveira, otro amigo de la familia. "Eran muy buenos chicos, muy queridos, estaban todo el día jugando al fútbol", cuenta el albañil, y se despide: "La vida, por desgracia, pasa".

Cientos de personas hacen cola para dar su último adiós a Diogo Jota y su hermano André, este viernes en Gondomar.

Cientos de personas hacen cola para dar su último adiós a Diogo Jota y su hermano André, este viernes en Gondomar.AFP

A apenas 100 metros de su casa, por la parte de atrás, está la escuela básica Aguiar, donde estudiaron hasta secundaria tanto Diogo como André. Un nuevo campo de fútbol, con las redes de las porterías ajadas, recuerda a estos dos niños que "siempre estaban alegres" y que "eran muy sociables" apuntan desde la institución.

Los Silva dejaron esas humildes casas bajas cuando Jota comenzó a triunfar en el fútbol, pero la abuela materna permanece en ese rincón de Gondomar al que ya no pueden volver dos de sus hijos predilectos. Una enorme cruz preside otro campo de fútbol que da entrada a la rua Minhoteira, la antigua calle de los Silva, como si fuera un homenaje improvisado a lo que ocurriría un 3 de julio de 2025 en el kilómetro 63,300 de la autovía A-52 que une Pontevedra y Benavente.

Aunque, si hay un lugar en el que brille con luz propia el recuerdo de los futbolistas es en las instalaciones del Gondomar Sporting Clube, el equipo del pueblo y en el que varias imágenes gigantes de Diogo Jota presiden tanto el estadio de Sao Miguel, donde dieron las primeras patadas al balón ambos chicos, como en las oficinas, donde se ha instalado un altar improvisado en el que hay numerosas velas, mensajes, flores y muchas camisetas de la institución.

Fernando Ferreira, ex entrenador de Diogo Jota, en el altar del Gondomar SC

Fernando Ferreira, ex entrenador de Diogo Jota, en el altar del Gondomar SCLNV

Fernando Ferreira, ex dirigente y ex director de las Escuelas del Gondomar SC, ha querido venir a presentar sus respetos a los jóvenes fallecidos. El hombre, de unos 70 años, se queda inmóvil ante el altar mientras contiene el llanto. "No tengo palabras porque por mucho que quiera, no me salen", explica a este periódico, y recuerda cómo el abuelo de los chicos, el señor Alberto, no se perdía ningún partido de los hermanos.

Dicen que André era el que tenía potencial para llegar más alto, pero Jota siempre aseguró que lo conseguiría. Lo cumplió, como muestra el respeto y el cariño de una afición y un club como el Liverpool, que ha planteado retirar el dorsal del portugués, el número 20, en su primer equipo. "Los rivales siempre tenían mucho respeto por Jota porque era muy humilde" destaca. "No merecían este final... nadie lo merece", concluye con la voz entrecortada.

Son momentos difíciles en esta población de casi 170.000 habitantes. Este viernes, Luís Filipe Araújo, presidente de la Câmara Municipal de Gondomar, había decretado día de luto y suspensión de las actividades. Las banderas de los edificios municipales ondeaban a media asta. "Estamos muy dolidos, hablamos de dos chicos muy jóvenes que siempre, especialmente Diogo por su popularidad, estaban disponibles para cualquier acción solidaria que se les requiriera", comentaba a EL MUNDO.

El primer edil aún no se puede creer que la última charla que tuvo con Jota fue para ofrecerle una condecoración de la ciudad por haber ganado la segunda Nations League con Portugal. No quiere pensar en futuros honores para los fallecidos que está seguro llegarán, pero insiste en que el dolor que viven en estos momentos no les permite pensar en esas coas.

El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa (derecha) visitando la capilla ardiente.

El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa (derecha) visitando la capilla ardiente.MIGUEL RIOPAAFP

Araújo y parte del consistorio fueron los responsables de recibir al presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa, en el velatorio de los futbolistas en la capilla de la Resurreción poco antes de las tres de la tarde. Por allí también pasaron el primer ministro, Luís Montenegro y el entrenador y hoy mandatario del Oporto, André Villas-Boas, entre otros. A las cuatro de la tarde se abrió al público para que quien quisiera pudiera rendir un último adiós a los futbolistas.

La UEFA impone al Barça una multa de 60 millones por incumplir las normas financieras

La UEFA impone al Barça una multa de 60 millones por incumplir las normas financieras

Actualizado Viernes, 4 julio 2025 - 19:21

La UEFA confirmó este viernes que ha impuesto una multa al Barcelona de 60 millones de euros, de los que tendrá que abonar 15 y el pago de los otros 45 estará condicionado al cumplimiento de unos requisitos del reglamento financiero durante un periodo de dos años.

El club aceptó las medidas disciplinarias establecidas por la Cámara del Órgano de Control Financiero de Clubes (CFCB), por incumplir los requisitos de estabilidad del reglamento sobre licencias y sostenibilidad financiera de los clubes de 2024.

Según la UEFA, el Barcelona incumplió la norma de Ingresos de Fútbol por tener un déficit agregado de estos por encima de la desviación aceptable en la temporada 2024/25 (para los periodos de información que finalizan en 2023 y 2024) y aceptó un acuerdo de liquidación por un periodo de dos años el pasado día 3.

Multa de 31 millones al Chelsea

El Barcelona no ha sido el único club multado por incumplir el llamado 'fair play' financiero. La sanción más alta ha sido impuesta al Chelsea londinense, que tendrá que pagar algo más de 31 millones de euros. Se arriesga además a una multa suplementaria de otros 60 si persiste en el incumplimiento.

Además, el organismo rector del fútbol europeo también ha castigado al Lyon francés a pagar 12,5 millones; y al Aston Villa inglés, a pagar cinco millones.