Pedro Rocha seguirá como presidente de la Federación hasta elecciones en el primer cuatrimestre de 2024

Pedro Rocha seguirá como presidente de la Federación hasta elecciones en el primer cuatrimestre de 2024

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El apoyo mayoritario, pero no unánime, de las territoriales le lleva seguir al frente de la gestora y pedir al CSD que adelante los comicios

Pedro Rocha, presidente interino de la RFEF.EFE

No se atisban cambios en la presidencia de la RFEF. Pedro Rocha, el hombre designado por Luis Rubiales para dirigir la transición será quien se mantenga en la presidencia hasta 2024. Así lo han propuesto la mayoría de los presidentes territoriales a la junta directa, el máximo órgano ejecutivo tras la dimisión del presidente suspendido.

La postura se acordó tras una larga reunión en la que se manifestaron diferentes posturas y que, ante la falta de unanimidad, acabó con una votación en la que Rocha fue respaldo de 14 presidentes territoriales, cuatro votaron en contra y hubo una abstención. La determinación fue proponer a la junta directiva -de la que no todos forman parte- que el extremeño lleve las riendas de la gestora y solicite al Consejo Superior de Deportes el permiso para poder adelantar unas elecciones de mandato al primer cuatrimestre de 2024, en las que se renueva la Asamblea, y a la que se puede presentar con un 15% de avales cualquier candidato a dirigir el fútbol español hasta 2028. Eso supondría esperar al menos hasta enero o febrero.

Sin embargo, los presidentes de la Comunidad Valenciana, Madrid, Las Palmas y Castilla-La Mancha ven lagunas jurídicas en la decisión acordada. Según los informes que recabaron, la junta directiva, constituida en gestora desde el pasado domingo, no tiene más opción que convocar elecciones inmediatas con la actual asamblea y elegir un presidente que pudiera actuar con plenos poderes, que en la gestora están limitados, según expusieron, a la convocatoria de elecciones y la gestión ordinaria, sin poder, por ejemplo “incurrir en gastos extraordinarios” como puede ser despidos y contrataciones. No podría, por ejemplo, cumplir con las exigencias de las campeonas del Mundo.

Es más, han advertido de que existe riesgo de impugnación de unas elecciones abiertas si las convoca una gestora con las manos tan atadas. Su propuesta pasaba por elegir nuevo presidente, algo que se haría en un periodo máximo de 30 días, ejecutar los cambios precisos -como los despidos del secretario general, Andreu Camps, y del asesor jurídico externo- y convocar nuevas elecciones, ya designando una nueva gestora, formada por seis miembros de la Comisión Delegada y seis de la directiva. Estas 12 personas pilotarían el proceso preelectoral de renovación de toda la Asamblea, que se alarga durante más de tres meses.

¿Cuándo serían las elecciones abiertas? Según la legislación, estos comicios abiertos deben celebrarse en el último trimestre del año olímpico y el CSD no suele hacer excepciones. No lo ha hecho con el baloncesto pese a la dimisión de Jorge Garbajosa para dar el salto a la FIBA. Ahora bien, el escándalo que rodea a la Federación, y en el que se implicó el Gobierno de España tratando de inhabilitar a Rubiales por beso a Jenni Hermoso, puede provocar que esta vez sí permitan anticipar las elecciones a los Juegos de París.

Confianza en Rocha

De forma mayoritaria, los presidente se han puesto al lado de Pedro Rocha, pero no han ocultado que hay discrepancias. “Todo lo que ha sucedido en la reunión es interpretable. Hay quien dice que hay que esperar a hacer elecciones en enero, otros que ahora y enero…”, aseguró el presidente de la Federación de Las Palmas, José Juan Arencibia, que no es miembro de la junta directiva y abandonó Las Rozas tras el cónclave de presidentes.

Él fue uno de los que se puso al lado de Rocha. “Es un buen hombre y su trabajo es muy difícil. La figura de Pedro no se discute de ninguna manera para nosotros, pero él no puede controlarlo todo. El problema es quién te controla sin que tú lo sepas”, advirtió.

“Hay que dar pasos y es normal que cuando llegua un presidente quiera tener a su gente cerca. No me fiaría de nadie”, añadió en referencia a los despidos de las personas cercanas a Rubiales.

El único que verbalizó fue el de Medina Cantalejo, el presidente del Comité Técnico de Árbitros. “¿Quién lo trajo? Ha pasado algo muy grave y no se ha pronunciado, no ha defendido a su árbitras y estoy dolido por eso. Las decisiones hay que tomarlas ya”, sentenció el canario.

kpd