La grada coreó su nombre antes del partido en señal de apoyo. “Con el partido que ha hecho… Creo que está bien”, bromeó Vinicius. “Gracias de corazón”, escribió el uruguayo en redes.
Fede Valverde se encontró ayer de nuevo con el Santiago Bernabéu. El mismo lugar que hace cuatro días le hizo protagonista de uno de los momentos más polémicos del año: su puñetazo a Álex Baena tras el Real Madrid – Villarreal. El uruguayo, denunciado a la Policía por el futbolista del Villarreal, regresó a Chamartín para disputar la ida de los cuartos de final de la Champions League y fue ovacionado por la grada, que le mostró todo su apoyo después de conocer las versiones de ambos jugadores sobre lo ocurrido.
Durante los días posteriores a la agresión, el centrocampista del Madrid siguió insistiendo en el argumento esgrimido horas después del incidente: Baena le dijo “llora ahora que tu hijo no va a nacer”, en el encuentro disputado entre ambos equipos en el mes de enero, y le repitió “algo similar” el pasado sábado, según han asegurado a este periódico fuentes cercanas al uruguayo.
Sin embargo, el futbolista del submarino amarillo lo negó y denunció que “se aprovechó una desgracia para justificar la agresión y hay mentiras que duelen más que los golpes”, admitiendo que ha recibido “amenazas, insultos o incluso mensajes privados deseando la muerte“.
Valverde, que podría ser sancionado tanto penal como deportivamente si termina entrando en el caso el Comité de Competición o Antiviolencia, no ha querido hacer declaraciones durante estos días, pero su mujer, Mina Bonino, sí contestó a Baena en redes sociales: “Hay un Dios que todo lo ve, que sabe la realidad y estamos tranquilos. Hay límites que no deben cruzarse, no todo vale en el fútbol. No todo vale en la vida”.
El uruguayo, eso sí, pisó el césped del Bernabéu sin haber abierto la boca sobre el tema. No lo hizo antes, no lo hizo durante y no lo hizo después, ausentándose de la zona mixta del Bernabéu. Sobre la hierba, contestó con aplausos y llevándose la mano al pecho a la ovación que le brindó el estadio antes de empezar. Al terminar, repitió el gesto juntando las manos, supuestamente en señal de perdón. Sí publicó un mensaje a través de sus redes sociales: “Gracias, gracias de corazón. Ustedes hacen que las noches sean más mágicas aún”, escribió, junto a una imagen mirando a la afición.
“Con el partido que ha hecho… Creo que está bien“, bromeó Vinicius sobre su compañero. El brasileño se llevó el MVP del 2-0 contra el Chelsea, pero el uruguayo “fue el mejor” también para Carlo Ancelotti. “Ha sido el mejor en el campo. Puso mucha energía y estuvo muy atento”.
Valverde dio 77 pases y tuvo un acierto del 92%, rozando el gol en dos ocasiones. La más clara, una arrancada que agitó al Bernabéu y que terminó con un disparo demasiado centrado sobre la portería de Kepa Arrizabalaga. Además, recuperó 4 balones ‘barriendo’ todo lo que se movía alrededor de Toni Kroos y Luka Modric, sus compañeros de viaje en el centro del campo, dejando el extremo derecho a Rodrygo.
Recuperar su mejor versión
Después de varias semanas jugando en la derecha, Ancelotti ha recuperado al uruguayo para el centro del campo tanto en la vuelta de Copa en el Camp Nou como en el partido de Liga ante el Villarreal y el duelo de anoche contra el Chelsea. Algo que agradece el ex de Peñarol, cuya posición favorita es jugar de interior.
En este tramo final de temporada, el Madrid necesitará la mejor versión de Valverde, que no marca desde el 18 de febrero ante Osasuna, su único gol en Liga, Champions o Copa en todo 2023. Marcó tres en la semana del Mundial de Clubes, justo cuando se confirmó que el bebé que espera su mujer estaba bien de salud. Durante todo el mes de enero, y especialmente en la semana posterior a la Supercopa de España en Riad, se habían hecho públicos los problemas que su pareja estaba atrevesando en el embarazo.