La selección española femenina de balonmano no pudo lograr el punto que necesitaba y cayó eliminada del Europeo de Austria, Hungría y Suiza, tras perder este lunes por 26-23 ante Polonia, en un encuentro en el que las nuevas y renovadas ‘Guerreras’ fueron víctimas de sus propios errores
A las 17 pérdidas se sumó la falta de experiencia internacional del grupo, con ocho debutantes en una gran cita internacional. Obligadas a defender continuamente en inferioridad numérica, las jugadoras de Ambros Martín nunca fueron capaces de ajustar su entramado en Basilea.
Cuando salían a buscar a las lanzadoras, Polonia conectaba con las extremos Magda Balsam y Daria Michalak, autoras de tres tantos cada uno, mientras que cuando se refugiaron en los seis metros fueron castigadas por el brazo de Monika Kobylinska.
Sin opción de correr
Goles y más goles que privaron al equipo español de la posibilidad de correr, el hábitat donde mejor se mueve, lo que obligó a demasiados ataques en estático.
Las exclusiones permitieron a España llegar el descanso con un 14-12. Pero entonces los nervios hicieron mella. La precipitación se tradujo en pérdidas evotanñes de balón penalizadas con los latigazos de Aleksandra Rosiak (20-14, min. 42).
España se aplicó denuedo para cortocircuitar al rival, que encadenaría casi nueve minutos sin marcar, lo que permitió reducir la desventaja a la mitad (20-17).
Ni con triple superioridad
Sin embargo, cuando las opciones de remontada parecían más claras, las imprecisiones volvieron a resultar letales. Ni con una triple superioridad numérica, supo cuestionar el triunfo polaco.
En un alarde de carácter, España se asomó a la heroica (25-23, min. 58), aunque esa una última oportunidad que, como todas las anteriores, se diluyó, como no, por una nueva e inoportuna pérdida de balón.