La Junta Directiva del conjunto blanco, reunida de urgencia este domingo, da el paso tras “las graves acusaciones formuladas por la Fiscalía” contra el Barcelona y sus dirigentes.
Ya es oficial. El Real Madrid ha cambiado el paso en su visión y actuación en el ‘Caso Negreira‘. El conjunto blanco, que ha guardado silencio durante todas estas semanas de polémica tras la exclusiva de EL MUNDO, ha decidido personarse como acusación particular en el procedimiento que abrirá la Fiscalía contra el Barça por los pagos al ex vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros José María Enríquez Negreira. Lo hará “en defensa de sus legítimos intereses” y tras “las graves acusaciones formuladas por la Fiscalía contra el Barça”.
Escándalo Negreira
La Junta Directiva del cuadro madridista, presidida por Florentino Pérez, ha tomado esta decisión tras una reunión de urgencia celebrada esta mañana en las oficinas de la Ciudad Deportiva de Valdebebas, en la que “ha tomado conocimiento” de la situación y ha analizado “la base de potenciales delitos, entre otros, de corrupción en el ámbito deportivo, en el marco de las relaciones entabladas por dicho club con quien fuera vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros“, como reza el comunicado del Madrid.
En el texto, la organización madridista manifiesta “su profunda preocupación sobre la gravedad de los hechos y reitera su plena confianza en la acción de la justicia”, y termina confirmando lo que durante el día de ayer ya era un secreto a voces: “el club, en defensa de sus legítimos intereses, se personará en el procedimiento en cuanto el juez lo abra a las partes perjudicadas“.
Se personará de manera individual, no de la mano de LaLiga ni de la Federación, ajeno a los 40 clubes del fútbol profesional que lo harán bajo el amparo de Javier Tebas. Eso lo tenía muy claro el Madrid, que al ser acusación particular podrá tener acceso a toda la información del caso, algo clave para los del Bernabéu, deseosos de confirmar con documentos todas las sospechas que han tenido durante años.
La acusación de la Fiscalía
El pasado viernes, la denuncia de la Fiscalía llegó al Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona. El Ministerio Público acusó a Negreira, a los ex presidentes del Barça, Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, a sus directivos Óscar Grau y Albert Soler, y al propio FC Barcelona, como persona jurídica, por un delito continuado de corrupción en los negocios, en su modalidad de fraude deportivo, otro de administración desleal y otro de falsedad en documento mercantil.
La Fiscalía señaló que “a través de los presidentes Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, el Barça alcanzó y mantuvo un acuerdo verbal estrictamente confidencial” con el denunciado Enríquez Negreira.
Ese acuerdo se basaría en que, en su calidad de vicepresidente del CTA, Enríquez Negreira, “a cambio de dinero, realizase actuaciones tendentes a favorecer al Barcelona en la toma de decisiones de los árbitros en los partidos que disputase el club y así en los resultados de las competiciones”.
Como ha ido desarrollando EL MUNDO durante las últimas semanas, Negreira cobró más de 7 millones de euros por asesorías ficticias de vídeos arbitrales y cuando fue cesado como jefe de los árbitros, trató de chantajear y amenazar al Barça, demostrando la profunda relación que había entre los dos protagonistas del caso. El ex árbitro, en varios burofax publicados por este periódico, aseguró estar dispuesto a aflorar “las irregularidades” que afirmaba haber “vivido de primera mano”, tras “años de favores prestados y confidencias” e incluso se llegó a ofrecer cuando se introdujo el VAR en el fútbol, confesando que podía “ayudar” a los azulgrana.
Sobre todo esto, la Fiscalía señala que las sociedades de Negreira “se nutrían prácticamente en su totalidad de los ingresos procedentes” del club catalán y que el efectivo era retirado con cheques al portador cobrados por empleados del ex árbitro y le entregaban el dinero en efectivo “desconociéndose el destino definitivo de las detracciones realizadas”.
En dicha acusación de la Fiscalía no aparece Joan Laporta, actual presidente del Barça y ‘socio’ de Florentino Pérez en el proyecto de la Superliga. La directiva de Laporta sí realizó pagos a Negreira durante su primera etapa, pero han prescrito, por lo que no está imputado en el caso, aunque sí prestará declaración. Esta situación también ha sido clave para el Madrid, consciente que de tiene en el presidente culé a un compañero importante en la trinchera contra Tebas y la UEFA.