Zarco vence bajo la lluvia y Marc Márquez sale más líder de Le Mans

Zarco vence bajo la lluvia y Marc Márquez sale más líder de Le Mans

Actualizado Domingo, 11 mayo 2025 - 15:43

El circuito de Le Mans al fin pudo ver a un ganador francés en la era MotoGP. No fue Fabio Quartararo, por mucho que partiera desde la pole, si no Johann Zarco, a quien la presencia de su madre por primera vez en el mítico circuito galo le dio suerte. El más veterano del paddock, en una carrera con muchísimos movimientos por culpa de la lluvia, apostó por mantener en todo momento los neumáticos de mojado y eso le permitió imponerse con una ventaja abismal sobre un Marc Márquez que, con su segunda plaza, se afianza aún más en el liderato.

Ni su hermano Álex, que se fue dos veces al suelo y tuvo que abandonar, ni Pecco Bagnaia, quien sufrió una caída en el convulso arranque de la prueba, lograron sumar punto alguno a su casillero. La desgracia de ambos contrastó con la alegría de un Fermín Aldeguer que completó el podio conseguido en la sprint race volviendo a hacerse con la tercera plaza esta vez en un domingo de carrera tras arrebatarle el puesto a Pedro Acosta en el tramo final de la prueba.

"Al ver la previsión, pensé que sería complicado, pero al final pude tener un gran ritmo y me siento muy feliz de haber logrado este primer podio en Gran Premio", resumió el murciano. "Ha sido una carrera de locos. Con estas normas, a todo el mundo le queda más claro lo que tiene que hacer. Cuando vi que Alex entraba, hice lo mismo, creía que era la estrategia correcta, pero Johann ha sido más rápido. Es una pena que Álex se haya caído, pero estoy contento por haber podido mantener la posición, porque en este tipo de domingos puedes perder muchos puntos", sentenció por su parte Marc Márquez.

A quien le costó más encontrar las palabras, en este caso, fue a un Johann Zarco visiblemente emocionado. "Cuesta creer, sigo sin entender qué ocurrió, las últimas vueltas se me hicieron bastante largas. Necesito tiempo para procesarlo, pero ha sido mágico", señaló el francés, quien firmó una mala salida y tuvo que marcharse a la grava en el incidente en el que cayeron tanto Bagnaia como Joan Mir para evitar irse también al suelo. Le ocurriría a más tarde tanto a su compatriota Quartararo como a Brad Binder, Jack Miller o Miguel Ángel Oliveira.

En cuanto al resto de españoles, Pedro Acosta fue cuarto, Maverick Viñales, quinto, Raúl Fernández, séptimo, y Álex Rins, finalmente, duodécimo.

Marc Márquez vuelve a arrasar al sprint y recupera el liderato de MotoGP

Marc Márquez vuelve a arrasar al sprint y recupera el liderato de MotoGP

Actualizado Sábado, 10 mayo 2025 - 16:07

Llevamos seis fines de semana de Gran Premio en MotoGP y las cosas ya han quedado meridianamente claras: sólo Marc Márquez es capaz de privar del triunfo a Marc Márquez. Si el de Cervera no comete errores, parece poco menos que una quimera que alguien pueda apartarle de sumar un nuevo campeonato del mundo. Por mucho que Fabio Quartararo le arrebatara de nuevo la pole en la carrera al sprint Gran Premio de Francia y firmara una mejor salida, en cuanto vio su oportunidad, la agarró y no la soltó.

Sobre la pista, el único capaz de seguirlo relativamente de cerca es su hermano Álex, quien cedió de nuevo el liderato retomado en Jerez tras subirse al segundo escalón de un podio en el que se estrenó su compañero en el equipo Gresini, el rookieFermín Aldeguer, para completar así el pleno español.

«Es una sensación increíble, para mí es un sueño estar aquí con los pilotos punteros. Quiero darle las gracias al equipo Gresini, me están ayudando muchísimo. Tenemos el espíritu, pero necesitamos más experiencia para poder tener más constancia», resumió tras la carrera un Aldeguer que firmó un espectacular toma y daca con Fabio Quartararo para hacerse finalmente con la tercera posición.

«Ya dije antes de la carrera que necesitábamos dar un paso adelante y he sido capaz de pilotar aún mejor. Cuando me di cuenta de que Fabio empezaba a tener problemas con el neumático trasero, vi claro que era el momento de atacar. Después, la brecha con Marc se hizo imposible y vi que podía controlar bien a Fermín. Aunque hemos perdido el liderato, creo que podemos estar contentos con este segundo puesto», señaló por su parte Álex Márquez.

«Fabio estuvo muy rápido en la salida, apretó mucho al principio y vi que no podía seguirle el ritmo en las primeras vueltas, pero, después, empezó a perderlo, conseguí pasarlo y pude ir mejor. Igual me relajé un poco en la última vuelta, pero me he sentido bien y a ver si podemos hacerlo aún mejor en la carrera del domingo», sentenció finalmente un Marc Márquez que, por ahora, le saca dos puntos de ventaja a su hermano Álex en la clasificación y 31 a un Pecco Bagnaia que se fue al suelo prácticamente nada más empezar la segunda vuelta de la carrera.

Pedro Acosta, quien pasó hace unos días por el quirófano para solventar un síndrome compartimental en su antebrazo derecho, por su parte, protagonizó una gran carrera, con mano a mano incluido con su compañero Maverick Viñales, que tuvo un final amargo. Una caída justo en la última curva, a punto de encarar la recta final, le privó finalmente de hacerse con el quinto puesto, que fue a parar finalmente a manos del de Figueres, y le obligó a caer hasta la decimonovena plaza. En cuanto al resto de pilotos españoles, Álex Rins fue octavo, Joan Mir cerró la zona de los puntos con su noveno puesto y Raúl Fernández acabó décimo.

Álex Márquez celebra su primera victoria en MotoGP y recupera el liderato en Jerez

Álex Márquez celebra su primera victoria en MotoGP y recupera el liderato en Jerez

Actualizado Domingo, 27 abril 2025 - 16:20

Álex Márquez nunca olvidará su primera victoria en MotoGP. Por el cómo, pero también por el dónde. Jerez, que seguirá albergando Grandes Premios de motociclismo por lo menos hasta 2031, tiene un sabor especial. Su triunfo, además, le permitió encaramarse de nuevo al liderato este curso, aunque fuera solo por un punto más que su hermano Marc, cuya caída en la tercera vuelta le obligó a apretar los dientes para minimizar algo los daños con un decimosegundo puesto. La pelea entre ambos Márquez, si el ocho veces campeón del mundo no se hubiera ido al suelo, tal vez nos habría dejado una de esas carreras que se recuerdan durante años.

A Marc lo condenó una mala salida. Se vio tercero, por detrás de Pecco Bagnaia, a la postre tercero, y de Fabio Quartararo, quien acabaría por subirse al segundo escalón del podio y tuvo un par de toques. El primero, con Álex. El segundo, con Pecco. En la pelea con su compañero por la segunda plaza nunca se le vio cómodo y, tal vez por eso, llegó otro error. Álex, atento a todo lo que ocurría, marcaba un ritmo muy fuerte que acabaría finalmente por catapultarlo hasta el primer puesto. Lo alcanzó por primera vez en la vuelta 11 y ya no lo soltaría hasta el final de una carrera en la que llegó a llevarle casi tres segundos de ventaja a su más directo perseguidor, un Quartararo que, a lomos de una Yamaha, firmó también una gran carrera.

Su celebración en una zona tan cargada de mítica como la Nieto-Peluqui, cómo no, estuvo cargada de emoción. Mientras recorría el circuito con una rojigualda al hombro y lágrimas en los ojos, algunas bengalas tan rojas como el color que teñía gran parte de las gradas en honor de su hermano Marc le jalearon hasta que llegó. Una vez allí, encendió la traca, dio algunos pases con una muleta, corrió a pie hacia la grada, se arrodilló en la grava y lanzó sus botas y sus guantes a una grada entregada, dispuesta incluso a dejarse dirigir como una orquesta. Acabada esa particular liturgia, se dirigiría acto seguido a una zona de boxes en la que el abrazo de su hermano Marc acabó por provocar que las emociones lo derrumbaran. No en vano, el apellido Márquez pasará a la historia como el de los primeros hermanos que lograron sumar triunfos en MotoGP.

El 'atasco' de Bagnaia

«Este es el mejor regalo de cumpleaños, es increíble correr aquí y ganar. El público en Nieto-Peluqui ha estado fantástico, entregado, aclamándome. No puedo pedir más. Creo que he hecho una carrera inteligente, esperando y, luego, tirando con mi ritmo, tratando de no dar oportunidad a mis rivales. Estoy encantado y muy contento», señaló tras la carrera un Álex Márquez que cumplió 29 años el pasado 23 de abril. «Estar en el podio es muy especial, sobre todo viendo la diferencia que ha habido con Álex. Volver y ser segundo ha sido difícil, han sido años muy duros y estoy encantado de estar en el podio de Jerez», terció por su parte Quartararo.

«Honestamente, este público es increíble. No me gustan este tipo de carreras, estaba atascado en el tercer puesto y he visto que iba perdiendo y perdiendo ritmo. Quiero darle la enhorabuena a Álex por su victoria y también a Fabio, que con una moto que ahora mismo es más lenta ha hecho un trabajo extraordinario», destacó por su parte Bagnaia. En cuanto al resto de pilotos españoles, Maverick Viñales logró un también meritorio cuarto puesto, Pedro Acosta fue séptimo, Álex Rins, decimotercero, Aleix Espargaró, con una wild card, decimocuarto, Raúl Fernández, decimosexto, y Augusto Fernández decimoséptimo. Fermín Aldeguer y Joan Mir, al igual que Franco Morbidelli, Jack Miller y Somkiat Chantra, no pudieron acabar la prueba. Hubo, además, pleno de victorias españolas. En Moto2 el vencedor fue Manuel González y en Moto3 se impuso José Antonio Rueda, con Ángel Piqueras en el segundo escalón del podio.

Marc Márquez no da tregua en Jerez y se impone en la 'sprint race'

Marc Márquez no da tregua en Jerez y se impone en la ‘sprint race’

Actualizado Sábado, 26 abril 2025 - 16:12

Marc Márquez no da tregua en su marcha triunfal hacia su séptimo campeonato del mundo de MotoGP. Si no comete errores, ahora mismo no parece que haya nadie capaz de apartarlo de ese camino. Quizás, tal vez, sólo otro Márquez. Álex, quien se encaramó brevemente al liderato del Mundial tras la caída de su hermano en Austin, fue otra vez segundo y Pecco Bagnaia, de nuevo, tercero, en una sprint race que le valió también al líder para igualar el récord de victorias de Jorge Martín en las carreras de los sábados. Ya suma cinco y no parece que su racha vaya a romperse precisamente pronto.

En un circuito de Jerez con mucho rojo en las gradas, banderas con su número, el 93, y una afluencia propia de domingo de Gran Premio, el líder del Mundial tiró de casta y agresividad para adelantar a un Fabio Quartararo que le había arrebatado la pole en la Q2 y que, justo en la maniobra en la que Marc se ponía por delante, acabó por dar con sus huesos en el suelo. Desde allí, el mayor de los Márquez, a quien solo Álex pudo seguir algo de cerca, dominó la prueba con pulso firme, mientras su hermano se las arreglaba también para mantener perfectamente a raya a Pecco Bagnaia con una montura sobre el papel inferior.

"No fue fácil, por estas temperatura tan altas, pero ya me lo esperaba. Al final costó un poquito, pero pude ir controlando. Es increíble, y siempre digo lo mismo los sábados: estoy muy contento, pero quiero controlar las emociones de cara al domingo. Aunque, con esta afición, siempre tienes ese poderío adicional", señaló Marc al término de la carrera. Mientras esperaba para tomar parte en la ceremonia de entrega de premios de la sprint race, el público empezó a corear el apellido Márquez. Algo a lo que correspondió tomando de la mano a su hermano para que ambos pudieran celebrar con una grada entregada su más que notable desempeño.

"Miras alrededor y es increíble"

"No ha sido fácil, el viernes tuve dos caídas, una de ellas grave, pero la afición me ha alentado mucho. Con una gran salida, pude pasar a Pecco, aunque luego no me sentí del todo bien, porque creo que nos falta algo de trabajo y empezamos la carrera un poco a ciegas, pero traté de mantenerme concentrado en todo momento. Espero que demos un paso adelante con vistas al domingo y que podamos presentar más pelea", señaló por su parte Álex Márquez.

"Miras alrededor y es increíble, solo puedes ver toda esta grandísima afición aquí en Jerez. Estoy contentísimo de estar en el podio, pero necesito trabajar más. Los dos hermanos lo están haciendo mejor que los demás y hay que ir paso a paso para tratar de acercarme a ellos", terció por su parte Bagnaia.

En cuanto al resto de españoles, Fermín Aldeguer fue quinto, Maverick Viñales, séptimo, Joan Mir, noveno, Pedro Acosta, décimo, Álex Rins, decimoquinto, Raúl Fernández, decimosexto, Augusto Fernández, decimoseptimo, y Aleix Espargaró, quien corrió por Honda con una wild card, decimoctavo.

El tirón de los hermanos Márquez vuelve a llevar a los aficionados en masa a Jerez

El tirón de los hermanos Márquez vuelve a llevar a los aficionados en masa a Jerez

Actualizado Jueves, 24 abril 2025 - 20:22

El circuito Ángel Nieto de Jerez es un enclave cargado de mística para los aficionados españoles al Mundial. Tanto que, a veces, en un afán de magnificar el evento, se producen errores de cálculo como el que ocurrió sin ir más lejos el año pasado. Entonces, los responsables de comunicación de MotoGP señalaron en primera instancia que a lo largo de los tres días de competición llegaron a pasar por el recinto un total de 296.741 espectadores, cuando la realidad, una vez reformulados sus cálculos, fue que se habían pasado de largo. Y con mucho. La realidad era que habían contado 115.542 espectadores de más. Pero, incluso así, el número total de 181.289 aficionados que se dieron cita para seguir el evento, según se recalcó desde MotoGP, suponía la mayor cifra en una década.

Lo que parece claro es que este año, si no se bate el récord, por lo menos, se van a seguir subiendo peldaños. Y muy seriamente. Por lo pronto, la venta de entradas, a pocos días del arranque del evento, era un 30% superior a la registrada en 2024. Las entradas de tribuna se agotaron a inicios de este 2025 y las localidades que aún estarían en venta corresponderían a la zona de la pelouse.

Este año, el circuito celebra su 40º aniversario y, desde luego, aspira a hacerlo a lo grande. El curso pasado, la carrera se plantó en Jerez con Jorge Martín al frente de la tabla, con 80 puntos, y Enea Bastianini como segundo clasificado, a 21 de distancia. En la presente temporada, mientras, lo hace con los hermanos Márquez en las dos primeras plazas, con un Marc intratable en cabeza y 123 puntos en el bolsillo, y su hermano Álex en la segunda posición, con 106. En lo que llevamos de curso, el ocho veces campeón del mundo ha demostrado que sólo los errores propios podrán apartarle de un nuevo entorchado.

Último triunfo en 2019

A los seguidores españoles, seguro, les encantaría que estuviera también en liza y en plena forma un Jorge Martín al que su tan esperado campeonato del mundo no le está atrayendo la mejor de las suertes. Justo cuando la temporada estaba a punto de arrancar, sufrió un par de caídas que no le permitieron volver a competir hasta hace un par de semanas, en Qatar. Y allí sufrió un nuevo percance tras el que acabó con 11 costillas rotas y un neumotórax, y que le obligó a permanecer hospitalizado en Doha. El año pasado, no pudo acabar la carrera tras dar también con sus huesos en el asfalto. Marc Márquez, mientras, logró subirse al segundo escalón del podio tras pelear a brazo partido con Pecco Bagnaia.

Ganar en Jerez, algo que visto lo visto hasta el momento parece mucho más que probable, significaría para el mayor de los Márquez reencontrarse con un triunfo que logró por última vez en 2019, una temporada en la que, precisamente, logró hacerse con su sexto título de campeón en la máxima categoría. El circuito presentará varias diferencias y no solo con respecto a aquel entonces. También, con respecto al aspecto que tuvo el año pasado. El trazado cuenta en la actualidad con nuevas escapatorias en cuatro de sus curvas (2, 6, 10, 13), diseñadas a su vez para dar más seguridad a los pilotos en caso de caída.

Nico Abad: "Lo que realmente echo de menos de la televisión es el dinero"

Nico Abad: “Lo que realmente echo de menos de la televisión es el dinero”

Nico Abad (Madrid, 1970) ha pasado por todas las fases del periodista televisivo. Meritorio en el primer Canal+ como autor, junto a su amigo Antoni Daimiel, de muchos de los vídeos más célebres de ‘El Día Después’. Estrella incipiente del entretenimiento en los tiempos de ‘Lo más Plus’ y Cuatro. Narrador (controvertido) del Mundial de motos y presentador de informativos. Y ahora youtuber con el canal que lleva su nombre, referencial en el mundo de MotoGP, mientras ve el mar desde su casa en Castelldefels.

Has logrado el sueño de montártelo tú mismo, que funcione e irte a vivir a la playa.
Yo no he logrado ese sueño sino que me han obligado a soñar con esto. No ha sido una decisión propia sino forzada. Estaba fenomenal en la televisión, me despidieron de Mediaset y a partir de ahí ninguna tele me quiso. Entonces tuve que recordar una cosa que siempre le explicaba a los estudiantes de periodismo a los que doy clase: ahora la herramienta para hacer periodismo la tenemos a menos de 20 centímetros de nuestra mano y es el móvil. Me apliqué el cuento, monté mi canal y estoy en la quinta temporada ya. La jugada está saliendo, pero no elegí yo.
Fue por necesidad.
Exacto. Me quedé sin un trabajo que estaba muy bien pagado en la tele y, como todavía tengo muchas facturas, tuve que encontrar la manera de sacar dinero por otro lado. Gracias a Dios, estamos en una época en la que estas plataformas te dan una oportunidad de ganarte la vida, con sus pros y sus contras.

Para saber más

¿Qué pros y qué contras?
La contra principal es que aquí no tienes equipo. Las plataformas están diseñadas para que hagas contenido en solitario porque la remuneración sólo llega para que cobre uno. Sin embargo, yo estoy haciendo el camino para intentar que cobremos muchos y crear equipo. Voy un poco a contracorriente y el canal ya lo monté con una agencia. Comencé en Twitch y luego hice un trasvase de todo el contenido a YouTube porque entendí que la audiencia a la que yo me dirigía estaba más allí. En Twitch me sentía vendiendo sombrillas en la montaña, que de repente hay un día de calor, pasa uno y te la compra, pero las sombrillas hay que venderlas en la playa. Y mi playa era YouTube, ahí he encontrado el sitio.
¿Echas de menos la tele?
De la tele echo de menos el dinero, eso por encima de todo. Luego, lo que te comentaba de trabajar con un equipo, una redacción que te corrija, te aprieta, te ayude… Por ejemplo, estoy haciendo ahora un vídeo de todas las lesiones de Jorge Martín, he encontrado 37 y me encantaría contar con algún compañero que pudiera contrastarlo, porque posiblemente sean 36 o 38 y en las plataformas me van a matar. "Nico, otra vez has vuelto a fallar, no tienes ni idea, son 36". Yo tengo que convivir con esto, porque si no te mueres, pero echo de menos tener el apoyo del equipo. A cambio, soy un tío muy casero y trabajar en casa ha sido un descubrimiento que no cambio por nada. Mi ritmo, mis horarios, compaginar con la familia… Lo único que realmente echo de menos es el dinero. Después, ya lejos, la certeza de que lo estoy haciendo bien que te da un equipo. En ese orden.
Al final te has quedado hablando de motos pese a que el recibimiento fue muy hostil cuando narraste el Mundial en Telecinco, ¿por qué?
Al final me he quedado porque es lo que me funciona. Lo que no quería hacer bajo ningún concepto era fútbol. Esto sí que lo tenía claro. Empecé haciendo polideportivo, pero la gente de la agencia me decía: "Nico, si tú pones tu nombre en Google salen motos. Es por lo que más se te reconoce". Y eso es clave para que la plataforma te identifique y te favorezca, los datos en Twitch lo demostraban y cuando pasé a YouTube decidí hacer sólo motor, Fórmula 1 y MotoGP, pero los números de las motos eran mucho mejores. Esto es como si tuviera una pescadería: si en este barrio se vende pescadilla, no traigas cangrejos de río porque no es lo que la gente quiere consumir.
¿Qué papel jugó Ángel Nieto en tu vida?
Tuvo un efecto en mí brutal porque entré en un mundo muy hostil hacia mí y él, desde el minuto uno, me abrió la puerta. Dicen que hay gente que construye paredes y otros que construyen puertas, pues Ángel la construyó y me la sostuvo abierta mientras otros intentaban cerrarla. No es que me explicara las motos, es que me invitó a su casa y me dijo que me quedase a dormir. Fue tremendo, mi gran apoyo en las motos. Era un tío supergeneroso y me trató como mi padre. Esa es la verdad, fue una figura paterna en un momento en que la necesitaba. Desde que falleció, sueño muchísimas veces con él y lo he comentado con su hijo Pablo, que me dijo: "Pues imagínate yo". Ángel no era un tío sólo de motos, era un tío de vida con las cuatro letras en mayúsculas. Estar a su lado era un privilegio y un aprendizaje continuo. Aún me descubro preguntándome un montón de veces. "¿Cómo haría esto Ángel?". Echo en falta poder llamarle.
Narraste MotoGP de 2013 a 2016, ¿por qué fue tan hostil la afición contigo?
El tema es que lo que sucedía en redes, todos esos ataques e insultos, era diametralmente opuesto a lo que me sucedía en la calle. He estado en un restaurante y cuando he ido a pagar me han dicho que un señor había pagado y me había dejado esta nota dándome las gracias por narrar así las motos. En la calle todo era " Nico, tío, cómo mola" y en las redes me deseaban que tuviera cáncer de garganta. Y esto no es una exageración, es literal. Mi interpretación fue que la televisión tiene mucho de hábito y se llevaba mucho tiempo con una narración muy determinada en TVE, mucho más sosegada, y yo entré allí como un elefante en una cacharrería. Narraba pegando gritos porque es lo que me sale cuando veo una frenada fuerte o unas curvas enlazadas. Es que no se entiende la barbaridad que son las motos hasta que las estás viendo en directo. ¡Cómo no vas a gritar cuando ves dónde frenan!
Parece razonable, sí.
Entonces yo todo eso lo llevaba a la cabina y Ángel Nieto me decía: "Tío, a mí es que me pones pila narrando así, tenía que haberse hecho siempre así". Eso es lo que me sostenía porque si miraba las redes… Llegó un momento en que dejé de entrar y no me enteraba. Un lunes por la mañana, a la vuelta de Jerez, me llaman de la Cadena SER y lo primer que pensé fue: "Joder, ¿qué liada habré habré montado esta vez?". Y fue que el rey emérito, por lo visto, me apartó el micrófono porque yo lo metí cuando estaba con Nieto y ni me había dado cuenta de aquello, pero en Twitter se había montado un escándalo. Era una locura aquello. Los fines de semana que no había motos yo también era trending topic porque narraba Lobato la Fórmula 1 y me caía a mí también.
¿Decían que ojalá fueras como Antonio?
Al revés, le decían a Lobato que ya se le había pegado lo malo y estaba gritando como el idiota de Nico Abad [risas].
¿Te afectaba?
Sí, claro que te afecta porque te planteas si realmente lo estás haciendo así de mal. Me preocupaba y lo contrastaba con la redacción y con el resto del equipo de comentaristas, les contaba que estaba siendo una pasada de insultos y que si de verdad la estaba cagando. Ellos siempre me apoyaron y es a lo que me agarré. A ellos y a lo que luego vivía en los circuitos y en la calle donde todo eran elogios y fotos. Al final decidí que no podía hacer caso ni a unos ni a otros y quedarme con un punto medio, pero llegué a tener que mandar amenazas al departamento jurídico de Telecinco muchas veces.
¿Hasta ese punto llegó?
Sí, sí. Llegaron a mandarme un dibujo muy detallado de mi cabeza en una guillotina mientras me daban con un falo gigante. Un puto delirio.
A raíz de los estilos, tuviste una buena bronca hace poco con Ernest Riveras, que fue el siguiente narrador del Mundial de motos.
Él se cabreó porque coincidíamos dando clase en un máster online y la narración que él hacía, para mí, no es la que se debe hacer, no es mi estilo ni lo que yo busco en la tele que me mola. Entonces, un día hice una broma a los estudiantes porque les había dado clase justo antes él y les dije pues yo les iba a decir todo lo contrario. Eso le llegó a él, le sentó a cuerno quemado y montó un lío en redes tremendo con un vídeo al que ni contesté ni voy a contestar porque cualquier cosa que diga se la va a tomar a mal y no merece la pena.
Estuviste en Canal+ desde su fundación en 1990. Daimiel y tú os encargabais de ir por los campos buscando imágenes para el mítico ‘Lo que el ojo no ve’ de ‘El Día Después’.
Otra cosa por la que también se me critica mucho es porque pienso y digo que el periodismo no hay que estudiarlo, hay que aprenderlo haciéndolo. Y es lo que hicimos todos nosotros en aquella redacción de Deportes, donde quitando cuatro realizadores gallegos, todos los demás no teníamos ni idea de televisión. Alfredo Relaño, Carlos Martínez y todos los que tenían experiencia venían de la Cadena SER y ‘El País’ y con ellos estábamos unos cuantos becarios, como Antoni y yo, y Maldini, que llegó con sus cintas de vídeo. Íbamos a los estadios, le decíamos al operador de cámara lo que nos gustaría grabar y la mitad de las veces nos decía que si estábamos locos, que era imposible, que el objetivo no llegaba ahí. Íbamos aprendiendo con ellos. Además teníamos una libertad total para hacer cualquier cosa. Nacho Lewin nos dijo el primer día: "Grabad donde no esté el balón". Y eso lo cogió luego Michael Robinson y lo llevó a una altura narrativa tremenda porque él flipaba con todas esas historias. Crecíamos haciendo un periodismo que no se había hecho nunca en televisión. Lo inventamos nosotros por necesidad y por ignorancia. Fue una época preciosa.
Han pasado 35 años de aquello y la tele deportiva española sigue siendo en un alto porcentaje lo que se inventó en aquel primer Canal+.
Sí, porque unimos cómo vivía la gente el deporte con cómo lo mostrábamos en pantalla. La gente reconocía en la tele las cosas que pasaban en los campos y antes no se veían. No era sólo el seguimiento a Hugo Sánchez para ver si pisaba al defensa o le metía un pellizco, eran historias de aficionados en los campos de fútbol que la gente reconocía como propias. Esa unión entre la gente y el periodismo generó una gran identificación, nos sentían próximos, lo gracioso es que nuestro único mérito es que lo hicimos así porque no sabíamos hacerlo de otra manera.
Corren muchas leyendas sobre el piso que compartisteis durante años Daimiel, Maldini y tú. Hay un libro ahí.
Hay mucha leyenda, pero lo que se puede contar ya lo sabe todo el mundo y lo que no se puede contar tampoco se puede escribir, así que sería un libro intrascendente y va a quedar sin escribirse. Al piso lo llamamos Southfork, como el rancho de la serie ‘Dallas’, y cuando empecé en Twitch hacíamos una vez al mes una sección llamada así. Nos juntábamos los tres a hablar de cualquier cosa, como cuando vivíamos juntos, y eso lo petaba, lo reventaba en números. Lo dejamos de hacer porque las agendas se nos complicaron, pero tenía un efecto nostalgia brutal. Aquellos años fueron muy especiales.
Has hablado antes de Robinson. Cuando acabe está serie, le daré el MVP: nadie genera un elogio general ni medio parecido en el gremio.
Normal, porque ha sido un tío muy importante en la comunicación deportiva en este país. Más que importante, te diría trascendente. Él dio crédito y puso en valor ese periodismo nuevo que nos estábamos inventando. Con un presentador tradicional que no lo entendiera o no lo quisiera, esa revolución habría muerto en ese mismo momento. Pero Robinson le dio cuerpo. Y como jefe y compañero era inmejorable. Nos invitaba a comer dos veces por temporada a todos los reporteros en un restaurante caro, se gastaba un pastizal y nos decía: "Chicos, no me deis las gracias porque yo firmo autógrafos gracias a vosotros". Y como comunicador era sensacional. Nos daba toda la libertad del mundo y luego él lo recogía y lo convertía en oro. Muchas veces traíamos cosas a las que no sabíamos darle el sentido y él le encontraba el chiste y lo hacía brillar. Ha sido un tío definitivo en la comunicación en este país. Eso lo supo ver Relaño en cuanto comentó en TVE el Mundial de Italia 90. Dijo: "Hostia, este pavo que habla medio raro el español, pero es muy gracioso va a ser una estrella" Y lo fichó de inmediato. Relaño también ha sido trascendente en la información deportiva en este país.
Otro que estaba desde el inicio es Josep Pedrerol. ¿Te ha sorprendido su evolución de aquel Canal+ al actual ‘El Chiringuito’?
A lo mejor te sorprendes, pero Pedrerol siempre ha querido hacer ‘El Chiringuito’, también en Canal+. Al menos, lo intentaba. Cuando estuvo presentando con Robinson ‘El Día Después’ se desesperaba: "¡Qué hacemos un lunes por la noche contando lo que ha pasado el sábado! Tenemos que contar lo de hoy". Quería un tío el lunes al Bernabéu a ver qué podía rascar y Michael le decía: "Tranquilo, Pedre, tranquilo, relájate" [risas]. Y Robinson era el que mandaba, pero Josep lo que quería era actualidad, actualidad y actualidad, lo que hace ahora. Y hablaba mucho de su época en la radio, en Barcelona. Era un entusiasta del directo.
¿Por qué te fuiste de Canal+?
Porque Disney Channel estaba abriendo en España, por medio de alguien que conocía a alguien les propusimos un proyecto que les gustó mucho y yo estaba un poco rayado en Canal+ porque quería que me pagasen más. Ya no estaba Relaño, el jefe era Carlos Martínez, entré en su despacho y le dije: "Deberías subirme el sueldo porque si no voy a acabar yéndome". Y me respondió: "Bueno, pues vete". Fue tan rápido que salí casi contento, pensando que no me había puesto pegas, pero a los cinco minutos reflexioné: "Coño, qué cabrón, no ha hecho ni lo más mínimo por retenerme el tío". En ese momento pensé que era un gilipollas, pero ya se me ha pasado y no se lo tengo en cuenta.
Regresaste a la cadena en 2004.
Hice cinco temporadas de ‘La Liga Disney Channel’ y, por las cosas del destino, acabamos grabando el programa en los estudios de Canal+. Allí me vieron los de ‘Lo más Plus’ y Ana García Siñeriz me dijo que necesitaban a alguien de deportes, hice una prueba, les gusté y me ficharon. Me fui de allí siendo un reportero y acabé haciendo cámara en Canal+ gracias a que me fui. Si no, probablemente nunca lo habría logrado. ‘Lo más Plus’ fue un exitazo, hice ‘La hora Wiki’ con Raquel Sánchez Silva, nació Cuatro y entré en el trasvase de presentadores al abierto, allí hice entretenimiento y me rescataron en Los Manolos.
Nico Abad posa para la entrevista en Castelldefels.

Nico Abad posa para la entrevista en Castelldefels.David Ramírez (Araba Press)

¿No te gustaba presentar concursos?
Sí, era una manera de hablar. Yo estaba flipado con el entretenimiento, muchísima gente trabajando desde un papel en blanco para poner algo en la tele que enganchase, había una energía muy fuerte, muy bestia, gente supercreativa, y tú tenías que presentar eso y estar a la altura. Me encantaba y la audiencia era la hostia, ahí sí te sientes una estrella de la tele… Cuando sale bien, claro, porque si no lo cancelan y el bajón es tremendo. Me estaba enganchando a eso cuando me llamaron de Deportes.
¿Y por qué decidiste volver?
Bueno, yo nunca he tomado decisiones sobre mi futuro. Eso está al alcance de muy, muy pocos en la televisión. Somos trabajadores y cuando tú estás en una empresa y te dicen que quieren que hagas algo, no puedes decir que no salvo que tengas una razón muy grande. Ni siquiera hubo negociación de dinero, me dijeron que pasara a hacer eso y pasé. Elena Sánchez, que era la directora de Cuatro, nos dijo a Juanma Castaño y a mí que Los Manolos estaban funcionando como un tiro de lunes a viernes y, luego, el fin de semana el bloque de deportes se caía. Nos encargó, directamente, copiar a Los Manolos. Lo intentamos hacer y no nos salió, porque no somos ni Lama ni Carreño, pero nos salió una cosa híbrida que le moló mucho a la gente también y ese formato de fin de semana lo hicimos siete temporadas. Fue de las épocas más bonitas mías en televisión.
¿Y la más fea?
Cuando nadie veía ‘Soy el que más sabe de televisión del mundo’ [risas]. Las audiencias son las notas del colegio y hay dos maneras de afrontarlas. Una es estar seguro de lo que haces, pensar que es bueno, que a la gente le va a acabar gustando y darse un tiempo, ir tranquilo. Pero esa teoría confronta con los directores que lo quieren todo ya, ya, ya para vender publicidad y presentar un dato que les ponga como líderes: Casi siempre se impone su versión, claro.
Mediaset compró Cuatro en 2010 y tú te quedaste hasta 2020, cuando acabas saliendo de manera fea. ¿Qué pasó?
Se afeó porque yo creía que tenía derecho a una indemnización y ellos me decían que no, así que decidió un juez y me dio la razón. Después de las motos, volví a informativos, pero ya fue todo raro. Mediaset, por la razón que fuera, empezó a recortar mucho la partida de deportes y salió Lama, salió Juanma Castaño y solo quedábamos Manu Carreño y yo. En 2020 me dijo Telecinco que nos iba a renovar ya el contrato, que acababa en diciembre de 2021, para quedarnos todos tranquilos, pero pasaron los meses y nadie me decía nada. Renuevan a Manu Carreño y siguen sin llamarme, así que subo al despacho del jefe y, cuando me ve, hace contacto visual conmigo y se pira sin decirme nada. Ahí ya dije: "Hostia, mala cosa".
Sí, no tenía buena pinta.
Bueno, pues se quedó ahí. Llegó la pandemia, hice todos los informativos porque teníamos el pase de trabajador indispensable y cuando los jefes se reincorporaron en abril, me dijeron: "Nico, hemos tomado una decisión. Te dijimos que íbamos a renovar, pero no te vamos a renovar. Háblalo con el abogado para ver una indemnización tonta que te quedará". Lo hablé con el que me lleva las cuentas y me dijo que de tonta, nada. Me querían meter un gol por toda la escuadra. Reclamé una indemnización y, aunque aún me quedaban varios meses de contrato y estaba currando normal, de repente un día me dicen que suba al despacho del presidente y me mandaron a casa. Me echaron y les demandé por despido improcedente. Al final les gané, claro.
¿Das por cerrada tu etapa en la tele?
No es que yo la dé por cerrada, es que las teles me han cerrado esa puerta creo que definitivamente. Cuando me despidieron de Telecinco, como sé que los jefes de las cadenas se conocen entre ellos, llamé a los directivos de todas las demás cadenas para que se enterasen por mí y no por la prensa. Llamé a Movistar, Atresmedia y a Dazn, les expliqué lo que había pasado para que tuvieran mi versión, porque sabía que iban a escuchar la otra, y les dije que me molaría seguir trabajando en la tele y estaba a su disposición. Acabábamos de salir de pandemia y todos me dijeron lo mismo: "Hostia, Nico, qué buena noticia. Ahora tenemos una cola de trabajo por sacar que no hemos hecho en pandemia, pero te llamaremos". Esto fue en junio. En septiembre, vuelvo a hacer ronda de llamadas. "Hostia, Nico, sí, sí, sí. Espera al cierre de año, pero seguro que algo podremos hacer. Te llamaremos". No me llaman. Y en Navidad pensé que estarían tiernitos y ya hubo uno que directamente ni me cogió el teléfono. Ahí supe que esto se había acabado.
¿Crees que te pusieron la cruz por la pelea con Mediaset?
No, creo que el problema estaba en que yo era un presentador caro y ninguna cadena me quiso contratar teniendo en cuenta lo que ofrecía y lo que costaba. Al final todas las televisiones funcionan con una escalera de la que yo también he sido parte. Te van formando y cuando te dan el paso a presentar un programa tú siempre eres más barato que el que sale. Entonces, yo ya voy con un caché alto y todos los chavales que han estado durante ese tiempo subiendo la escalera llegan a mi punto costando mucho menos dinero. Empresarialmente no compenso porque no soy un presentador que te da dos puntos de share, eso hay que tenerlo claro también.
¿Lo has pasado mal?
No. Hago un balance superpositivo, tío, porque sigo vivo. ¿Sabes qué pasa? Que tengo grabado a fuego que de bebé estuve a punto de morir. Salí en las revistas médicas como un caso milagroso de recuperación de una deshidratación extrema. Eran los años 70 y me dieron un 90% de no salir y salí. Y tengo una anécdota brutal muchísimos años después con Joaquín Luqui, el mito de Los 40 Principales. Un día coincidimos en los estudios y me escuchó locutar. Al salir, me dijo: "Qué pasión los de deportes. ¿Te importa que te lea la mano?". Yo flipando. Me coge la mano y suelta: "¡Hostia, esto es imposible! Tú te has muerto justo cuando empezó la vida". Y yo, que no creo en esas cosas, aluciné.
Hombre, surrealista es.
Mucho. El caso es que tengo grabado que soy un superviviente desde el minuto cero de vida. O me matas tres veces o no me muero. Voy adaptándome, voy haciendo camino y mantengo la misma ilusión. Me gusta tanto el periodismo que estoy totalmente atado a él. Además no sé hacer otra cosa porque fui a MasterChef y me echaron antes de semifinales. Así que más me vale seguir con esto.
Jorge Martín tiene 11 costillas rotas y sufre un neumotórax en un 2025 aciago: "Esto podría haber sido mucho peor"

Jorge Martín tiene 11 costillas rotas y sufre un neumotórax en un 2025 aciago: “Esto podría haber sido mucho peor”

Actualizado Lunes, 14 abril 2025 - 11:11

A Jorge Martín le está persiguiendo el infortunio en 2025. El año en que iba a defender su primer campeonato del mundo de MotoGP está siendo todo un calvario. Antes del arranque oficial de la temporada, sufrió un par de caídas que le obligaron a permanecer en el dique seco hasta un Gran Premio de Qatar al que llegaba consciente de que acabar el fin de semana ya sería una grandísima noticia.

Según recalcó el pasado jueves, aún sentía bastante dolor y no se encontraba al 100% a nivel físico, con lo que dejar la prueba antes de tiempo era algo que no se atrevía a descartar en absoluto. Con lo que no contaba, seguro, es que sería a causa de una nueva caída que ha vuelto a provocarle graves secuelas y que le llevó de nuevo a pasar por un ingreso hospitalario, en este caso en el Hamad International Hospital del país de Oriente Medio.

En las últimas vueltas del Gran Premio de Qatar, Jorge Martín dio con sus huesos en el suelo. Lo preocupante, en este caso, es que tardó mucho más de lo habitual en abandonar el asfalto. Trasladado al centro médico, se indicó inicialmente que sufría una contusión torácica complicada a su vez con un neumotórax. El hecho de que tuvieran que ponerle un drenaje no hizo más que multiplicar una serie de malos presagios que acabarían por confirmarse unas horas después, tras pasar por nuevas pruebas médicas.

El español suma 11 nuevas fracturas, en este caso, en las costillas del lado derecho del tórax, ocho en los arcos costales posteriores de la primera a la octava y tres en los arcos laterales de la séptima a la novena. Además, tiene también una leve inflamación de la pleura relacionada con el neumotórax. Por lo menos, eso sí, se ha descartado que tenga afectados el cerebro, la columna a nivel de cervicales o los órganos del abdomen. Algo que no impedirá, no obstante, que tenga que estar varios días hospitalizado antes de que pueda recibir el alta médica.

En este contexto, su participación en el próximo Gran Premio de España, que se celebrará en Jerez entre el 25 y el 27 de abril, se antoja como más que complicada. El piloto, que compartió un par de imágenes de su ingreso en el hospital a través de sus redes sociales en la mañana de este mismo lunes, sabe que las cosas se le podrían haber puesto aún más en contra.

"Doy gracias a Dios porque esto que me ha pasado podría haber sido mucho peor", aseguraba el de San Sebastián de los Reyes, que cuenta, cómo no, con el apoyo incondicional de Aprilia. "El rendimiento pasa a un segundo plano tras lo sucedido. Nuestros pensamientos están con Jorge en estos momentos tan difíciles, estamos con él", ha recalcado Massimo Rivola, CEO del equipo italiano.

La temporada 2025, sin duda, se ha puesto tremendamente cuesta arriba para un Martinator que, si por algo se caracteriza, es por no darse nunca por vencido, si bien parece ahora mismo muy difícil que pueda estar entre los puestos más altos de la tabla este curso.

Marc Márquez tira de cabeza para ganar en Qatar

Marc Márquez tira de cabeza para ganar en Qatar

Actualizado Domingo, 13 abril 2025 - 20:37

Marc Márquez lo avisó: para ganar en Qatar, tenía que saber gestionar sus neumáticos. Y vaya si lo hizo. Tras unas primeras vueltas cautelosas, el seis veces campeón del mundo de MotoGP firmó un tramo final absolutamente espectacular, en el que fue capaz de batir hasta en dos ocasiones el récord de vuelta rápida, para convertirse finalmente en el piloto español con más victorias en Grandes Premios (ya suma 91, una más que todo un mito como Ángel Nieto) e igualar los 152 podios conseguidos por Jorge Lorenzo.

El segundo escalón, en este caso, no lo pisó su hermano Álex, quien cayó hasta la séptima plaza por un pilotaje menos fino que de costumbre, sino un Maverick Viñales sobre quien pendía una posible sanción por la presión de sus neumáticos, mientras que Pecco Bagnaia sí repitió de nuevo como tercer clasificado pese a arrancar desde el undécimo puesto de la parrilla.

Jorge Martín, quien ya advertía el pasado jueves que no sabía si sería capaz de acabar el fin de semana, tuvo que dejar la prueba antes de tiempo a causa de una caída que le tuvo un buen rato sobre el asfalto y que le obligó a ser hospitalizado a causa de una contusión torácica que, afortunadamente, no le provocó problemas a nivel pulmonar, según informó DAZN.

El toque entre los hermanos Márquez, nada más empezar la carrera y en el que el hermano mayor perdió una pieza del colín, y el arranque fulgurante de Franco Morbidelli, capaz de liderar con puño de hierro los primeros compases, pareció que iba a marcar el devenir de la prueba. El italiano, con todo, pecó quizás de un exceso de ímpetu que, al final, acabó de desplazarlo hasta el cuarto puesto de la general.

Maverick Viñales, mientras, supo jugar sus cartas y lideró también durante un buen rato la carrera hasta que Marc, a siete giros de la bandera a cuadros, se hizo con un primer cuarto que defendería con la solvencia a la que nos ha venido acostumbrando en lo que llevamos de campeonato.

"Antes de la carrera ya dije que tenía que gestionar el neumático delantero, por eso estuve más calmado al principio. Sabía que Franco no iba a poder mantener el ritmo, lo he visto muy lanzado, pero cuando Pecco se acercó, pensé: 'uy, aquí empieza la carrera'. Después, me pasó Maverick, que por un momento creí que era Acosta, por su agresividad, pero aproveché las tres décimas que me guardaba. Conseguir aquí la victoria es increíble", señaló el líder del Mundial, quien no dudó en dejar clara su gestión señalándose la cabeza al cruzar la línea de meta para lograr un triunfo en Qatar que se le resistía desde el año 2014 y que le permite llegar al Gran Premio de España, que se disputará el fin de semana del próximo 27 de abril, con unas sensaciones absolutamente inmejorables.

"Este podio significa muchísimo, quiere decir que estamos haciendo un trabajo increíble. Intenté mantenerme delante y quizás está carrera me ha permitido hacer un clic y estamos cerca de lo más alto. Estoy muy contento por cómo ha ido todo el trabajo", resumió, por su parte, Maverick Viñales.

Gestión y cabeza

"Es fantástico estar en el podio, pero estoy muy enfadado por lo que pasó en el sábado. Si lo puedo hacer el domingo, tengo que hacerlo también el sábado. He empujado mucho y en las últimas vueltas me quedé sin neumático trasero, pero estoy muy contento con el trabajo que ha hecho el equipo", aseveró por su parte un Pecco Bagnaia que, otra vez, se subió al tercer escalón del podio.

En cuanto al resto de pilotos españoles, Fermín Aldeguer fue sexto, Pedro Acosta, noveno, Álex Rins, decimotercero, y Raúl Fernández, decimoséptimo, mientras que Augusto Fernández, a causa de una caída, y Joan Mir no pudieron acabar finalmente la prueba.

Marc gana la guerra de los Márquez y recupera el liderato en el sprint de Qatar

Marc gana la guerra de los Márquez y recupera el liderato en el sprint de Qatar

Actualizado Sábado, 12 abril 2025 - 21:37

Marc Márquez (Ducati) controló a su hermano Álex (Ducati-Gresini) para ganar el sprint del Gran Premio de Qatar este sábado y recuperar el liderato del Mundial, que defenderá en la carrera del domingo.

Álex Márquez, líder por un punto antes del sprint, luchó por el por primer puesto, sobre todo en la primera parte de la prueba, mientras ambos hermanos se alejaban de Franco Morbidelli, tercero.

El vigente campeón Jorge Martín, que regresaba tras lesión, terminó 16º en su primera carrera de la temporada, debutando con su nuevo equipo, Aprilia.

Marc Márquez dominó la carrera de principio a fin para conseguir una cuarta victoria en la temporada en el ejercicio en cuatro carreras. "Las sensaciones fueron buenas, es un fin de semana inesperado para ser honesto porque aquí normalmente tengo problemas", señaló Marc a la llegada. El seis veces campeón mundial de MotoGP solo ganó una vez en Qatar, en 2014.

En la general, el hermano mayor tiene ahora 98 puntos, dos más que el pequeño (96 puntos). Morbidelli (Ducati-VR46) fue tercero bajo la mirada de su jefe, la leyenda del motociclismo Valentino Rossi, fundador del equipo VR46.

El italiano aventajó al español Fermín Aldeguer (Ducati-Gresini), cuarto tras superar al francés Fabio Quartararo (Yamaha) en los últimos metros de la carrera

El regreso (con dudas) de Jorge Martín a MotoGP: "Aún tengo dolor, no sé qué esperar"

El regreso (con dudas) de Jorge Martín a MotoGP: “Aún tengo dolor, no sé qué esperar”

Actualizado Jueves, 10 abril 2025 - 18:52

Jorge Martín ya está aquí. Ha tardado mucho más de lo que le hubiera gustado, seguro, pero el vigente campeón del mundo de MotoGP, por fin, volverá a tomar parte en un fin de semana de Gran Premio, 49 días después del arranque de la temporada 2025 y sólo a una semana de que se cumplan cinco meses desde que logró hacerse con el campeonato. Su tan esperado gran triunfo ya se vio en parte empañado por el anuncio de Ducati de contar con Marc Márquez como nuevo compañero de Pecco Bagnaia en el equipo oficial, algo que, a su vez, precipitó su fichaje por Aprilia. Y, justo cuando iba a empezar el trabajo más serio para estar en forma para disponerse a defender su título, llegaron dos graves caídas, la primera, en Sepang, el primer día de los tests de pretemporada, y la segunda en una prueba privada que acabaron obligándole a perderse las tres primeras carreras de la temporada.

El ya de por sí duro proceso de recuperación, tal vez, se habrá vuelto aún más complicado al ver a un Marc Márquez intratable, aparentemente dispuesto a no perdonar triunfo alguno hasta que llegó esa caída en el circuito de Las Américas que le obligó a ceder el liderato, por solo un punto, a su hermano Álex. Y, también, al ver que la Aprilia no parece estar por el momento precisamente cerca de unas Ducati que siguen contando con mucha ventaja con respecto al resto. «Sin duda, estoy algo nervioso. Es fantástico volver a estar aquí con todos estos pilotos. Han sido dos meses difíciles, he estado trabajando mucho para estar aquí y ya veremos, no sé exactamente qué cabe esperar, pero trataré de dar el máximo. No me siento aún al 100%, así que creo que lo importante es empezar a dar vueltas. Me siento con fuerzas, pero aún tengo dolor, así que ya veremos qué nos deparará el fin de semana y trataremos de adaptarnos mejor a la Aprilia», señaló Martín, declarado apto para competir por los doctores del campeonato, en la rueda de prensa previa al inicio del fin de semana de Gran Premio en Qatar.

Ahora mismo, el español sabe muy bien que tratar de competir por revalidar su título es casi una quimera, viendo lo que ha hecho hasta ahora Marc. En su caso, se trata sobre todo de tener paciencia. Incluso, asume sin problemas que es muy probable que no pueda competir durante todo el evento en Losail, a las afueras de Doha. «Iré sesión a sesión, día a día. No sé siquiera si seré capaz de finalizar este fin de semana, conseguirlo ya sería un gran éxito. Aún no ha llegado mi momento, no estoy al 100%, así que necesito tiempo para recuperarme, para acostumbrarme a la moto y luego, ya veremos. En dos o tres meses ya estaremos en disposición de ver si puedo batirme con todos estos pilotos», adelantó.

Los problemas de Aprilia

Su reto es complejo porque no se trata de llegar a su mejor estado físico. También debe poner convenientemente a punto su moto. Aunque, eso sí, no va a partir desde cero. «Ahora mismo, esta moto es muy distinta de la que probé en Sepang o en Montmeló. Han desarrollado muchas cosas, así que, para mí, es como si fuera una moto nueva. Los reglajes que utilizaré como base para la puesta a punto van a ser los de Marco (Bezzecchi, su compañero en el equipo oficial de Aprilia), y él también está cambiando muchas cosas, porque se está adaptando a la moto, pero comenzaremos desde ahí y luego ya trazaré yo mi propio camino», explicó un Jorge Martín que, según comentó, ha ido siguiendo estos primeros compases del curso.

«No he visto todas las sesiones, pero sí todas las carreras. Tailandia fue fácil de ver desde fuera, porque estaba en una situación negativa, pero ya a partir de Argentina resultaba difícil, me costaba más, tenía las emociones a flor de piel. Vi las carreras, ha habido un gran dominio de Ducati, como cabía esperar, he estado siguiendo de cerca a Aprilia y he visto que han dado un gran paso desde el año pasado, están más cerca de Ducati. Creo que el potencial es muy alto y pienso que iremos acortando esa distancia», aseguró el piloto de 27 años de San Sebastián de los Reyes.

Para él, lo que sí fue muy importante fue el hecho de poder vivir el Gran Premio de Las Américas desde dentro, por mucho que no pudiera estar aún en el paddock con el resto de los pilotos. «Para mi era importante estar en Austin, porque todo es nuevo y así las cosas no me iban a venirme de nuevas aquí en Qatar. Así, ya conocía al equipo y es como si hubiera estado ya compitiendo, como mínimo estaba ahí en el box con ellos. Creo que llego aquí sintiendo más el equipo y más acostumbrado a todo, así que tengo muchas ganas de arrancar. Sin duda, será un fin de semana duro, pero intentaré dar el máximo», sentenció.