La continuidad del Gran Premio de Aragón, en el aire a partir de 2027

La continuidad del Gran Premio de Aragón, en el aire a partir de 2027

Actualizado Jueves, 5 junio 2025 - 19:40

Desde los tiempos de Fernando el Católico no existía en Aragón un rey como Marc Márquez, capaz de dominar con mano de hierro el rápido circuito de MotorLand, una de las pruebas más espectaculares del mundial. El piloto cervariense ha logrado subir al cajón más alto del podio en hasta siete ocasiones desde que está en la categoría reina siendo la última, quizá, la más especial, al lograr poner fin a una etapa de cuatro años sin victorias.

Desde que entrara a formar parte del calendario del mundial de MotoGP en 2010, el circuito de Aragón ha sido escenario de batallas memorables entre varios de los corredores más importantes de este siglo, como Dani Pedrosa, Valentino Rossi, Jorge Lorenzo o Pecco Bagnaia, quien, precisamente, estrenó en Alcañiz su casillero de victorias en la categoría.

"En España siempre hay afición, pero como en Aragón hay pocos sitios. Son de esos circuitos en los que vienes con otro pie: vienes con un estado emocional diferente. Fue el primer circuito donde volví a ganar tras mi lesión. Esperemos dar 'show'", expresaba Pedro Acosta, el joven piloto de KTM que pretende seguir con ese legado, durante la presentación del evento en la Plaza del Pilar de Zaragoza.

El circuito, situado en pleno desierto aragonés, con 17 curvas, es uno de los que más giros tiene de todo el mundial y además es de los pocos que se corren en sentido antihorario, es decir, a izquierdas. Dominio absoluto de Márquez en ese aspecto. Estas cualidades hacen de MotorLand una de las citas más vibrantes del año, capaz de llenar el Bajo Aragón con más de 100.000 visitantes durante todo el fin de semana y haber logrado tener un impacto de 650 millones de euros en el territorio desde su apertura, según el Instituto Aragonés de Fomento.

Las cifras, como señala el presidente autonómico, Jorge Azcón, son "espectaculares" y, por ello, uno de los principales objetivos de su primera legislatura es evitar perder la celebración de este Gran Premio, como ya ocurrió en 2023. El año pasado, el Gobierno de Aragón y Dorna firmaron un acuerdo que establecía que el circuito albergaría el mundial hasta 2026, lo que abre un marco plagado de incertidumbres a partir de esa fecha.

Un país con cuatro eventos

La intención de la empresa española, que posee en exclusiva los derechos de la competición, es reducir el número de circuitos europeos para ampliar fronteras y aumentar su presencia en mercados pujantes como Arabia Saudí u otras potencias del continente asiático. Ese deseo, tal y como reconoció el director general de la compañía, Carmelo Ezpeleta, pone en riesgo a España, ya que es el único país que cuenta con hasta cuatro eventos en el calendario.

"Existe una alta demanda de países que quieren formar parte del calendario, lo que hace que, muy a nuestro pesar, Aragón tenga que ser uno de nuestros puntos de mira. Sin embargo, Dorna no quiere decir que España sea el sitio que tenga que perder carreras inmediatamente. Estamos viendo todas las posibilidades para seguir en Aragón todo el tiempo que sea posible", explicó Ezpeleta al respecto.

Sin embargo, la realidad es que los circuitos de Valencia y Cataluña tienen asegurada su presencia en el campeonato hasta el año 2031, al igual que Jerez, uno de los mayores templos del motociclismo a nivel mundial. Por ello, Alcañiz, que además fue el último de estos en incorporarse, parte, al menos de primeras, con un menor número de opciones de mantenerse.

El compromiso del Ejecutivo regional para que siga celebrándose es "pleno", consciente del peso que tiene este evento en el resultado electoral del Bajo Aragón. Para ello ya invirtió 6,2 millones en el reasfaltado del circuito y está dispuesto a destinar otros 12 millones en su continuidad. Por el momento, las negociaciones entre las partes se desarrollan de forma "discreta", según indicó Manuel Blasco, consejero de Medio Ambiente y Turismo del Gobierno de Aragón, quien bromeó con estar dispuesto a disfrazarse de "jeque árabe" si es necesario para mantener el Gran Premio.