El PSG se libra de un incómodo Bayern y espera en semifinales

El PSG se libra de un incómodo Bayern y espera en semifinales

Actualizado Sábado, 5 julio 2025 - 20:20

Una genialidad de Désiré Doué y un zarpazo de Ousmane Dembélé cuando más apurado estaba el PSG le permitió al equipo francés batir al Bayern en un duelo intensísimo, reedición de la final de la Champions 2020, y sellar así su pase a las semifinales del Mundial de Clubes. El vigente campeón de Europa padeció múltiples dificultades para sacar adelante el partido, en cuya recta final perdió a Pacho y Lucas Hernández por sendas rojas directas. [Narración y estadísticas (2-0)]

El equipo de Luis Enrique, perfecto en la ejecución del fuera de juego para frustrar dos goles del gigante bávaro, se complicó en los minutos finales frente a un rival mermado por la gravísima lesión de Jamal Musiala. En el añadido del primer tiempo, el internacional alemán sufrió un encontronazo con Gianluigi Donnarumma en una acción donde el Bayern reclamó penalti del guardameta.

En los primeros 45 minutos ambos contendientes protagonizaron un intenso toma y daca. Aunque el Bayern parecía llegar con más frecuencia al área rival, las aproximaciones más peligrosas caían una y otra vez del lado de un PSG en el que Khvicha Kvaratskhelia hacía diabluras. Siempre excelentemente contestado, eso sí, por un Manuel Neuer que sigue luciendo una tremenda calidad bajo los palos.

Imagen desgarradora

Y, si brillantes fueron varias de las acciones del arquero, también lo fueron en la otra área las de Donnarumma, cuyo exceso de ímpetu al ir al suelo acabó por costarle una gravísima lesión a Musiala. La imagen del tobillo izquierdo del joven delantero, completamente torcido tras el choque, fue desgarradora. Su baja acabaría por sumarse a la de Josip Stanisic, quien también se había visto mucho antes a ceder su puesto a Sacha Boey.

Pacho, Coman, Olise y Kimmich, tras la lesión de Musiala.

Pacho, Coman, Olise y Kimmich, tras la lesión de Musiala.AP

Tras el descanso, por mucho que Bradley Barcola forzara a Neuer otra gran parada, fue de nuevo el Bayern el que se las arregló para buscar con más intensidad la opción de romper la igualada. Sus primeros intentos, con todo, se estrellaron fácilmente contra un Donnarumma aparentemente repuesto del golpe anímico de haber provocado la lesión de otro futbolista.

Michael Olise, molestado por Pacho, acabó enviando por encima del travesaño el mejor de ellos. Más clara incluso fue la del PSG, tras un fallo fuera del área de Neuer que un Dembélé suplente de inicio envió fuera por muy poco. Doué, tras una gran recuperación de Joao Neves ante Harry Kane, en cambio, no desaprovechó su oportunidad. Su disparo al palo corto, que tomó por sorpresa al meta, acabó por convertirse en el 1-0. Y Dembélé, cuando más apurados estaban los suyos tras las expulsiones de Pacho y Lucas Hernandez, se encargó de dictar sentencia con el 2-0.

Así convirtió Luis Enrique al PSG en una máquina perfecta: "Es un líder que se ha ganado la credibilidad"

Así convirtió Luis Enrique al PSG en una máquina perfecta: “Es un líder que se ha ganado la credibilidad”

Tres equipos han deslumbrado en Europa: uno en todo el continente y otros dos, principalmente, en sus competiciones domésticas. PSG, Liverpool y FC Barcelona han sufrido una transformación de un año a otro. No han sido los futbolistas los responsables sino la llegada o consolidación de entrenadores que han impuesto sus ideas por encima de los privilegios de ciertos jugadores.

El equipo francés comenzó el Mundial de clubes como terminó la temporada: ganando. Ha logrado todos los títulos del curso y es favorito también para este. Lo ha hecho, además, justo el año en que Kylian Mbappé dejaba su disciplina. Luis Enrique ya avisó que mejoraría al equipo tras la salida del francés: "Tener un jugador que se movía por donde él quería implica que hay situaciones de juego que yo no controlo. Este año las voy a controlar todas. Prefiero once que piensen juntos a uno que rompa el mapa por talento", avisó.

"Decirlo es fácil, lo difícil es llevarlo al césped", alaba Antonio Castaño, director académico de la Escuela de Entrenadores de la RFEF y explica: "Hoy no hay nadie que pueda permitirse tener jugadores que en una fase del juego, la defensiva, no participen". Y los once del PSG lo han hecho y de qué manera. De la final ante el Inter de Milan, muchos como Castaño recuerdan más las carreras de 70 metros de Kvaratskhelia para recuperar posición que los regates en área italiana, como hizo también ante el Atlético.

"Un instante en perderla"

Por citar otro nombre propio, Desiré Doué, aunque no brillara ante los rojiblancos, tiene uno de los mejores ratings defensivos del equipo del asturiano. Es el sexto que más disputas gana y el tercero en faltas cometidas. Ese compromiso, Castaño dice que se resume en una frase: "Es un líder que se ha ganado la credibilidad" y añade que esta credibilidad "tardas una vida en ganártela y un instante en perderla". Habrá que valorar este Mundial y, especialmente, la temporada siguiente, pero parece que la fe en Luis Enrique es total.

La mejora del rendimiento colectivo afecta al individual y, volviendo a Doué, el francés ha sido el tercer jugador que más se ha revalorizado este año empatado con el segundo. Su precio ha crecido 60 millones de euros igual que el del barcelonista Pedri. El que lidera esta clasificación, claro, es otro culé que ha deslumbrado al mundo, Lamine Yamal, con un crecimiento de 110 millones de euros.

En el top-20 también están Cubarsí (6º, +50 millones) y Raphinha (14º, +40 millones), pero no hay futbolista del Barça que no se haya revalorizado este año y eso es gracias a la llegada de Hansi Flick. "Cuando un equipo a nivel colectivo funciona bien, todos los individuos se ven beneficiados en su rendimiento, el nivel parece más alto", explica Castaño.

Hansi Flick, en un entrenamiento del Barça.

Hansi Flick, en un entrenamiento del Barça.AFP

Y el equipo del alemán ha sido un reloj con una defensa que, a juicio del director académico de la RFEF, daba "una sensación angustiosa" por su altura. "La ventaja es que tienes más espacio para robar al rival cuando pierdes la pelota", apunta Castaño y cree que Flick "ha exagerado" la obsesión de Guardiola del 3-5, intentar robar la pelota en menos de tres segundos y finalizar en cinco.

Hay una cuestión táctica que, será por la estancia de Luis Enrique en el club barcelonista, o será por el sello del asturiano pero, tanto Barça como PSG, tienden a juntarse hacia los delanteros y no hacia los defensas. "Lo que vemos en la tele es donde está el balón, pero no vemos como una presión adecuada arriba sube la línea de defensa", apostilla el entrenador.

Beatles y Rolling Stones

Otro de los equipos que se ha construido a imagen y semejanza de su entrenador es el Liverpool de Arne Slot. "Un equipo se tiene que parecer al entrenador, como los perros al dueño, el suyo es más los Beatles y el de Klopp, los Rolling Stones", comienza Castaño sobre un conjunto red que ha ganado con holgura en la Premier, pero que fue descabalgado a las primeras de cambio por el PSG de Luis Enrique en la Champions. "Han cambiado la visceralidad por la racionalidad", razona el director académico de la escuela de entrenadores de la RFEF sobre un técnico que se ha unido a la lista de debutantes que antes han alcanzado 20 victorias con su equipo en la liga inglesa, el holandés tardó 24 duelos.

Otro de los cambios aplicados al Liverpool y que se diferencia de PSG y Barça es la presión defensiva que no es inmediata sino que se produce cuando el potencial robo sea en una zona peligrosa del rival. "A veces dejan dar dos o tres pases antes de ir a por el balón", apunta Castaño. Y han cambiado también las transiciones veloces y "a tumba abierta" por tener un poco más el balón para "descansar" con él.

Tres equipos, tres técnicos que han dado la vuelta a sus plantillas y las han revalorizado. Pero sólo uno podrá mostrarlo al mundo desde Estados Unidos. Luis Enrique ya ha empezado desde el primer duelo.