El incidente se produjo cuando los aficionados intentaban ingresar a una de las zonas populares del estadio para presenciar un partido
Doce personas han fallecido y otras 100 han resultado heridas de consideración este sábado tras una estampida en el Estadio Cuscatlán de la capital de El Salvador cuando se disputaba un partido entre el Alianza y el Club Deportivo FAS en la vuelta de los cuartos de final del Torneo Clausura 2023.
Testigos de la tragedia han manifestado a medios locales que había exceso de aforo en el estadio, lo que habría provocado la estampida. El presidente salvadoreño, Nayib Bukele, ya ha anunciado en sus redes sociales una “investigación exhaustiva” de los hechos por parte de la Policía Nacional Civil y la Fiscalía General de la República. “Todos serán investigados: equipos, directivos, estadio, boletería, liga, federación, etc. Sean quienes sean los culpables, no quedarán en la impunidad”, avisó el mandatario.
La Secretaría de Presidencia de El Salvador ha informado que además de los equipos de servicios de salud, se han trasladado al lugar equipos de las Fuerzas Armadas para poyar la atención de emergencia. Así, se han vivido momentos de caos debido al enfrentamiento de las barras de los equipos Alianza y Deportivo FAS en las afueras del estadio Cuscatlán, lo que ha impedido en un primer momento que ambulancias y policía pudieran avanzar para atender a las víctimas de la estampida. Posteriormente, han podido trasladar a un centenar de heridos a varios hospitales cercanos y al menos dos personas se encuentran en condición crítica.
El partido entre dos de los equipos más populares de Centroamérica tuvo que ser suspendido en el minuto 21 cuando el marcador estaba empatado sin goles para que los cuerpos de socorro pudieran hacer su trabajo. Por su parte, el ministro de Salud de El Salvador, Francisco Alabi, informó en un primer momento que estaban atendiendo a unas 90 personas lesionadas: “Los pacientes, tanto femeninos, como masculinos, entre ellos menores de edad, en su mayoría han sido tratados por múltiples traumatismos”, reveló en su cuenta de Twitter, donde incidió en que “la mayoría de ellos se encuentran estables y al momento no reportamos muertes intrahospitalarias”.
Mientras, la Presidencia desveló que las primeras líneas de investigación de las autoridades apuntan a “la venta de boletería electrónica y la restricción en los accesos al estadio Cuscatlán, especialmente la zona sur”. En este sentido, el fiscal general de El Salvador, Rodolfo Delgado, detalló que “las investigaciones incluyen la actuación de Estadios Deportivos de El Salvador (EDESSA) y las dirigencias de los clubes involucrados”.
Por su parte, Carlos Fuentes, portavoz de Comandos de Salvamento ha explicado que la estampida se produjo “al parecer cuando cayó uno de los portones de Sol General y eso hizo que la gente se aglomerara y se montara una trifulca, lo que provocó problemas respiratorios por el calor que había en uno de los túneles”. Así, medios locales han publicados imágenes de varios cuerpos de personas fallecidas en uno de los túneles del estadio.
ENTRADAS FALSAS EN EL MERCADO NEGRO
El ministro de Gobernación, Juan Carlos Bidegain, ha considerado “repudiable” que las personas encargadas de estos escenarios no tengan un control estricto” tras conocer las informaciones preliminares que desvelaban que aficionados habían mostrado que les vendieron boletos falsos permitiéndoles la entrada, tras una sobreventa en el mercado negro. Como haya sucedido, recordó que Bukele ha ordenado una investigación para que “nada quede impune”.
En esta línea, el director de la Policía Nacional Civil, Mauricio Arriaza, ha manifestado que, como institución policial, en conjunto con la Fiscalía “vamos a llegar hasta los últimos detalles de una investigación criminal del incidente”. Arriaza desveló que “preliminarmente, hemos encontrado que hubo sobresaturación de venta electrónica” y apuntó que “se recomendó a las autoridades que abrieran el otro acceso al sur, pero ellos no quisieron y esas son parte de las investigaciones”.
Precisamente, el director de Protección Civil de El Salvador, Luis Alonso remarcó que “uno de los detonantes de este hecho es que se le permitió el ingreso a muchas personas porque no solamente se había sobrevendido, sino que hasta querían entrar personas con boletos que no eran los apropiados. Al final eso es lo que ha provocado esta situación”. Según ha apuntado, los cuerpos de socorro han atendido a más de 500 personas y han tratado desde crisis nerviosas hasta personas que se debaten entre la vida y la muerte, aunque finalmente se han trasladado a 100 heridos a centros médicos.
Por su parte, la Federación Salvadoreña de Fútbol (Fesfut) ha lamentado “profundamente” los hechos, al tiempo que se ha solidarizado con los familiares de las personas afectadas y fallecidas en este incidente. Asimismo, ha avanzado que solicitará de inmediato un informe de lo sucedido y comunicará lo pertinente en el “más breve plazo”. Asimismo, ha informado que, tras la muerte de 12 personas en el estadio Cuscatlán, todo el fútbol a nivel nacional queda suspendido, de modo que los partidos de vuelta de cuartos de final de la primera división entre Águila y Jocoro y 11 Deportivo ante Isidro Metapán no se disputarán este domingo. Asimismo, también se realizarán las respectivas jornadas en la segunda y tercera división, ni la liga femenina de la liga mayor y los duelos en la categoría de reservas.