El multimillonario norteamericano está destrozando el mercado de fichajes del fútbol con unas cifras superiores a las de su predecesor, Roman Abramovich.
Un solo club británico se ha gastado en enero más dinero en fichajes que todos los equipos de la Liga, la Bundesliga, la Ligue 1 y la Serie A juntos. Con una inversión estimada en 325 millones de euros, el Chelsea ha acaparado el 39% de la tarta de la Premier y ha roto el mercado de invierno gracias al talonario sin fin de su nuevo propietario, el multimillonario norteamericano Todd Boehly, dispuesto a emular en megalomanía a su predecesor, el oligarca ruso Roman Abramovich.
La campanada final la puso el fichaje del argentino Enzo Fernández, que fulminó el récord de la Premier con 118 millones de euros, días después de asegurarse por 99 millones al ucraniano Mykhailo Mudryk en dura pugna con el Arsenal, más los refuerzos del francés Benoît Badiashile en la zaga y del británico con sangre nigeriana Noni Madueke, y por supuesto el préstamo impagable de Joao Félix, que demostró con su gol ante el West Ham lo que puede dar de sí.
Con todo su nuevo potencial, el Chelsea vuelve a la Champions este miércoles. Lo hará enfrentándose en la ida de octavos al Borussia en Dortmund, con la misión imposible de satisfacer a su ambicioso propietario y emular el éxito del 2021, cuando se proclamó campeón de Europa bajo la batuta de Thomas Tuchel. El técnico alemán cayó sin embargo en desgracia a principios de temporada y fue defenestrado por el propio Todd Boehly, que parece haber heredado también de Abramovich otra de sus cualidades: la impaciencia.
El cambio de Tuchel por Graham Potter, responsable del irresistible ascenso del Brighton, no ha surtido de momento el efecto deseado: el Chelsea está perdido en la mitad de la tabla en la Premier, en noveno puesto y con apenas 23 goles en 22 partidos, lo que dice mucho de su desesperante carencia de un nueve, pese al dispendio que no cesa desde el verano (rescató el club londinense a Pierre-Emerick Aubameyang del Barcelona tras un notable rendimiento del delantero gabonés en el Camp Nou, pero no ha logrado siquiera pasar el corte para ser inscrito en la Champions).
Lejana ya cualquier remota aspiración en la Premier, Todd Boehly ha puesto toda la carne en el asador de la Champions. Graham Potter cuenta de momento con su respaldo, pero sabe que su futuro puede depender del éxito europeo de los blues con su plantilla millonaria. El romance y la ruptura de Abramovich con su entrenador talismán, José Mourinho, puede servirle de referencia para saber cómo se las gastan en el club.
Cualquiera diría que Todd Boehly ha seguido al pie de la letra el manual de Abramovich, que refundó a su manera el Chelsea en el 2003 y cosechó 21 títulos (incluidas las dos únicas Ligas de Campeones de la historia de la entidad en 2012 y 2021, y cinco Premiers) después de gastar hasta 2.200 millones de euros en fichajes y despachar hasta 15 entrenadores en las dos décadas que estuvo al frente del club.
Todd Boehly protagonizó de hecho una primera intentona para hacerse con la propiedad del Chelsea en 2019, pero Abramovich le cortó las alas. El magnate norteamericano, director ejecutivo de Eldridge Industries, con ramificaciones en sectores como la banca, los seguros, la tecnología, el entretenimiento y los deportes (copropietario de Los Angeles Dodgers de la Major League Baseball y accionista de Los Angeles Lakers de la NBA), llevaba tiempo planeando su personalísimo asalto al fútbol europeo.
La oportunidad le llegó en 2022, cuando las sanciones a Rusia por la guerra de Ucrania forzaron la salida por la puerta de atrás de Abramovich, obligado a vender el club el pasado mes de marzo.
De la lucha libre a la música
Stamford Bridge suspendió durante tres meses la venta de entradas a los aficionados, el club se apretó el cinturón y el futuro parecía más incierto que nunca. Hubo sin embargo al final hasta 250 postores, 12 ofertas «creíbles» y tres finalistas entre los que destacó el consorcio creado por Todd Boehly con Mark Walter, Hansjörd Wyss y Clearlake Capital. La venta se cerró al final por 4.250 millones de libras (unos 5.000 millones de euros).
La fortuna de Todd Boehly está estimada en unos 5.100 millones, según ha publicado la revista Forbes, que le otorga el puesto número 637 en la lista de los más ricos del mundo. A través de Eldridge Industries maneja un vasto «imperio» de inversiones estimado en 36.000 millones de euros.
Nacido en 1973, con un pie en California y otro en Connecticut, Boehly es descendiente de inmigrantes alemanes que huyeron durante la Segunda Guerra Mundial. El deporte lo lleva en la sangre: fue campeón juvenil de lucha libre. Pasó un tiempo en el Reino Unido, estudió en la London School of Economics (LSE) y dio sus primeros pasos en el mundo de las finanzas en el Citibank.
Boehly está casado, tiene tres hijos, y ha estado siempre muy involucrado en el mundo de la información y el entretenimiento. Entre sus múltiples ocupaciones está la de presidente de la Asociación de Periodistas Extranjeros de Hollywood, que otorga todos los años los Globos de Oro. Es un gran aficionado al rock y ha comprado, entre otros, los catálogos de The Killers y de Bruce Springsteen.
«He pasado toda mi vida siguiendo un mantra así de simple: si digo que voy a conseguir algo, lo consigo», declaraba recientemente el propio Boehly en el portal Yahoo News. «Y cuando uno tiene la reputación de ser capaz de hacer que pasen cosas, es increíble todo lo que llega a tu casillero».