El jugador del Valencia, Rafa Mir, de 27 años, fue detenido por la Guardia Civil en la noche del pasado lunes por una denuncia que recibió el Instituto Armado por agresión sexual.
Fuentes de la investigación han confirmado que la presunta agresión se habría cometido contra dos mujeres de unos 25 años en casa del futbolista. En los hechos, habría participado otro hombre que también está detenido. Una de las víctimas denunció al futbolista y la otra a su amigo.
Las víctimas, además de interponer las denuncias que realizaron en el cuartel de Massamagrell, necesitaron de asistencia hospitalaria.
Según ha podido saber EL MUNDO fueron los vecinos los que llamaron a la Guardia Civil por lo que estaba ocurriendo en la vivienda del jugador, situada en una población cercana a Valencia.
El futbolista ha pasado la noche en los calabozos de la Comandancia de Valencia de la Guardia Civil de la calle Calamocha a la espera de que se le tome declaración y pueda pasar a disposición judicial.
Las alarmas saltaron la mañana de este martes cuando el jugador no se había presentado al entrenamiento junto a sus compañeros en la ciudad deportiva de Paterna.
El delantero, canterano del conjunto ché, volvió esta temporada a la disciplina valencianista cedido por parte del Sevilla, club que no contaba con él.