Cuando se trata de una final de la Champions, nada puede dar lugar a la mala suerte. Y al igual que la copa no se puede ni mirar ni tocar antes del comienzo del partido, viajar en un avión con publicidad del máximo rival puede que no sea la mejor forma de iniciar el viaje para vivir el encuentro ante el Borussia Dortmund.
Eso es lo que le ha ocurrido a varios aficionados del Real Madrid que se disponían a coger el avión con destino a Wembley desde la Ciudad Condal. Cuando ya se disponían a embarcar, veían desde fuera como la aeronave estaba decorada con las imágenes de las jugadoras del Barça femenino, que acaban de conquistar su tercera Champions League en San Mamés. Todo ello con los colores y el escudo del conjunto blaugrana. Una escena graciosa que se ha viralizado en las redes sociales.
El avión, con decoración blaugranaGonzalo Torralba
En las imágenes se puede ver como la mayoría de los seguidores se han tomado la escena con sentido del humor, silbando al ver que el avión tenía los colores de su máximo rival y riéndose de la anécdota que les estaba tocando vivir.
El aeropuerto Adolfo Suárez- Madrid Barajas operará este fin de semana 90 vuelos adicionales para cubrir la demanda de los desplazamientos a la final.
Novedades en el caso Negreira a pocas horas de que acuda a declarar como investigado ante el Juzgado de Instrucción número 1. La Audiencia de Barcelona ha ordenado admitir a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) como acusación particular del caso, que investiga los pagos -de casi 8 millones de euros- del FC Barcelona al ex vicepresidente del Comité Técnico Arbitral (CTAA) José María Enríquez Negreira entre 2001 y 2018 a cambio de supuestas asesorías verbales encaminadas, según él mismo declaró ante la Agencia Tributaria, a que el club azulgrana tuviera "arbitrajes neutrales".
En un auto hecho público este lunes, la sección 21 del tribunal estima el recurso que presentó la RFEF cuando el juez instructor rechazó que la entidad formara parte de la causa, una decisión que respaldaron tanto la Fiscalía como el club azulgrana presidido por Joan Laporta.
El Juzgado de Instrucción 1 de Barcelona, responsable de la investigación en curso, justificó su decisión en que la RFEF ejerce funciones públicas bajo la tutela del Consejo Superior de Deportes (CSD), que a su vez depende del Ministerio de Cultura y Deporte, y consideró que la Federación no está habilitada para personarse como acusación popular. En cambio, la RFEF argumentó que como entidad privada, "su condición de ofendido no ofrece lugar a dudas" y por tanto cree que es necesario que esté habilitada para ser acusación popular, porque podría personarse como acusación popular.
"El bien jurídico protegido"
Los jueces de la Audiencia de Barcelona tienen en cuenta que en este presunto delito de corrupción en el deporte "el bien jurídico protegido era el juego limpio en la práctica del deporte", un ámbito que corresponde a la RFEF. "Si las conductas que están siendo objeto de investigación se produjeron, y es lo que se está investigando, debieron necesariamente tener repercusión en el desarrollo de los encuentros deportivos, puesto lo que perseguían alteración de sus resultados o la obtención de unos arbitrajes más favorables", señalan los magistrados antes de concluir que la RFEF sí está legitimada para ejercer como acusación particular.
Una novedad que se conoce a pocas horas de que el propio Negreira deba acudir a declarar como investigado ante el juzgado de instrucción número 1 de Barcelona, en la Ciudad de la Justicia este martes 19 a las 11:00 horas.
Además de Negreira y el FC Barcelona, en la causa están imputados el actual presidente del club, Joan Laporta, y los ex mandatarios Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu. El ex dirigente arbitral es el primero citado a declarar ante el instructor por los pagos millonarios que recibió durante años, en concreto entre 2001 y 2018.
Laporta y el presunto cohecho
En concreto, la Audiencia Provincial de Barcelona advierte la comisión de sendos delitos de corrupción deportiva y administración desleal por parte del FC Barcelona y sus últimos ex presidentes en estos momentos de la investigación.
La Audiencia debe resolver próximamente si, además de los delitos de corrupción deportiva y administración desleal, advierte el de cohecho, señalado por el juez Aguirre -del juzgado de instrucción número 1 de Barcelona- y con el que mantiene como investigado a Laporta. El Ministerio Público se ha opuesto a esta imputación y se ha alineado con las defensas para pedir que Laporta sea apartado del sumario que investiga el mayor escándalo de la historia del fútbol español.
En paralelo, Aguirre ha prorrogado seis meses la investigación sobre los pagos millonarios del FC Barcelona a quien fuera vicepresidente del Comité Técnico Arbitral.
Es verano y en la playa de Castro Urdiales, tan amplia, tan larga, un chaval corre, corre y corre con una colchoneta bajo el brazo cuando de repente se arrebata: la lanza delante y se tira encima sin parar siquiera. ¿Se ha vuelto loco? No. Es uno de los mejores pilotos de skeleton del mundo y, de alguna manera, como puede, está entrenando.
«Estoy intentando poner un raíl en la pista de atletismo de Castro, pero mientras utilizo un trineo con ruedas de patines o me invento cosas, como tirarme a la colchoneta en la playa. También hago visualizaciones tirado boca abajo en el sofá. No somos un país de hielo, hay que echarle imaginación», reconoce Adrián Rodríguez, que entre el jueves y el viernes disputó su tercer Mundial y acabó vigésimo tercero, la segunda mejor posición de un español, sólo por detrás del vigésimo puesto de Ander Mirambell en 2017. El año próximo, de hecho, Rodríguez debería seguir los pasos de Mirambell como olímpico en los Juegos de Milán-Cortina d'Ampezzo.
Mirambell, Mirambell, Mirambell; él se inventó el skeleton en España, él lo organizó todo y ahí sigue, haciéndolo crecer, como entrenador. Hace ya más de seis años, Mirambell organizó un casting para buscar pilotos y apareció Rodríguez, aún no sabe muy bien por qué.
"Conocía el skeleton por la Wii"
«Desde pequeño había hecho atletismo: al principio crosses, luego triple salto y finalmente, a partir de los 16 años, velocidad. Llegué a dos finales del Campeonato de España de 200 metros [su mejor tiempo, 21.45 segundos]. Un día me llegó un mensaje por Whatsapp de mi club de atletismo con una noticia del Marca que decía que la Federación Española buscaba nuevos pilotos de skeleton. Yo sólo conocía el skeleton por la Nintendo Wii. Pinché, vi que cumplía los requisitos y me presenté. Ahora estoy en mi sexta temporada», recuerda Rodríguez, de 28 años, que ha tenido compañía en el último Mundial: Clara Aznar, de sólo 18 años, debutó con un vigésimo séptimo puesto.
¿Recuerda su primera bajada de skeleton?
Perfectamente. Tuve la suerte de debutar en Sankt Moritz, que es la cuna de este deporte, una pista de hielo natural. Sin correr, me tumbé en el trineo y Ander me empujó hacia abajo. Pasé muchos nervios, pero me enamoré de la sensación de velocidad, de la adrenalina.
Una dura caída hace un año
Desde aquel día, Rodríguez ha ido mejorando en el skeleton, pero hace justo un año, en el Europeo de Europa de Sigulda, en Letonia, vivió el susto de su vida. Su trineo no giró en la salida de la curva 11 y salió volando a más de 110 km/h. «No esperaba ningún problema justo en esa curva, pero toqué el techo, fue un susto muy grande. Por suerte no me rompí nada», rememora quien también trabaja como profesor de Ciencias de la Actividad Física de la Universidad Europea del Atlántico en Santander, que reconoce que España todavía está muy lejos de optar a las medallas en skeleton.
La Federación Española de Deportes de Hielo está potenciando la especialidad, pero faltan sponsors y, por supuesto, instalaciones. El mayor éxito fue la creación hace dos años una pista de arranque de skeleton en el Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Madrid, donde Rodríguez entrena como mínimo una vez al mes. Pero imaginar un circuito en los Pirineos o en Sierra Nevada es utópico.
«Hemos mejorado porque cuando Ander empezó no había nada, pero todavía falta. Es muy difícil competir con países que viajan con ingenieros mientras los españoles ajustamos las tuercas nosotros mismos. También el trineo, la variedad de cuchillas... piensa que los mejores entrenan en túneles de viento, como en la Fórmula 1 o en MotoGP. Estamos muy lejos de eso», reclama Rodríguez que a su vez cuenta con algo que envidian alemanes, suizos, austriacos o canadienses, es decir, los mejores de su disciplina. «Alucinan cuando me ven en Instagram entrenando en la playa», finaliza.