El belga y su compatriota Evenepoel conforman la pareja más fuerte del campeonato de este domingo, en el que España apuesta por García Cortina y Marc Soler
Uno golpea de lejos y el otro remata. Bélgica es un monstruo de dos cabezas que intimida en el Mundial de ruta que se disputa en la madrugada del domingo en Wollongong (Australia). Remco Evenepoel y Wout Van Aert es la pareja más temida en un campeonato muy abierto y propicio para esa nueva generación de corredores que no se detiene ante nada. En un recorrido quebrado, la selección española apuesta por las opciones de Iván García Cortina y Marc Soler.
Evenepoel, pletórico tras su triunfo en la Vuelta a España, acude a la cita con la intención de coronar su excelente temporada con la conquista del arco iris. Los precedentes históricos no sonríen al Pequeño Caníbal, pero eso no le preocupa, porque desde niño rompe moldes. El último vencedor de una de las tres grandes rondas por etapas que se impuso en el mismo año en un Mundial de ruta fue el estadounidense Greg Lemond, en 1989, con victoria en el Tour y en el campeonato de Chambéry (Francia).
Sven Vanthourenhout, seleccionador belga, es una afortunado al disponer dos cartas ganadoras en un Mundial que será muy complicado de controlar. El recorrido consta de 266,9 kilómetros de longitud y con un desnivel acumulado de 3.945 metros de desnivel. No es una cita para velocistas, ni para escaladores puros. El trazado, que incluye es ascenso al Monte Keira, de más de ocho kilómetros, antes de llegar al complicado circuito de Wollongong, con 12 ascensos a una cota de más de un kilómetro y pendiente media de 7,7%, es adecuado para ciclistas potentes y clásicómanos.
Van Aert, con una notable punta de velocidad, es un candidato al oro si se llega al tramo decisivo con una carrera muy endurecida. En la estrategia de eliminación de rivales, Evenepoel es fundamental. No extrañaría una ataque a falta de tres vueltas para el final.
En la nómina de favoritos también figura el esloveno Tadej Pogacar, que viene de ganar a Van Aert en Montreal y que ha preparado el Mundial con ahínco. El maillot arco iris serviría de consuelo a la derrota del Tour. Lo mismo que Evenepoel, no se descarta una ofensiva suya desde larga distancia.
El neerlandés Van der Poel también atesora elevadas opciones. Mas complicado lo tiene el francés Julian Alaphilippe, que defiende título en una temporada en la que ha estado lastrado por caídas y lesiones.
La selección española busca la sorpresa en un campeonato incómodo. Pascual Momparler, tras los obstáculos puestos por el Movistar, las angustias de los equipos por los descensos de categoría y la ausencia de Juan Ayuso, presenta un equipo con escasa experiencia. Sin Alejandro Valverde, la apuesta es García Cortina (Movistar), fuerte y rápido en esprints reducidos. Marc Soler (UAE), que ha firmado una fenomenal Vuelta, tiene libertad de movimientos, peleará por meterse en la escapada buena. El resto del equipo lo componen Urko Berrade (Kern Pharma), Jesús Ezquerra (Burgos), Eduard Prades (Caja Rural), Roger Adrià (Kern Pharma), Gotzon Martín (Euskaltel) y Oier Lazkano (Movistar).
El Mundial de fondo en carretera arrancará a las 2.15 horas del domingo y se espera que concluya alrededor de las 9.00 horas.