Cuartos de final
El pívot africano firmó la segunda mayor valoración (41) de la historia de los playoffs. Decisivo el triple de Williams-Goss. “El cuarto será interesante”, avisa Obradovic
Nadie ha remontado un 0-2 jamás en la historia de los playoffs de la Euroliga, pero el Real Madrid se agarra a ese imposible de no pensar mucho más allá del cuarto partido, este jueves (20.30 h., DAZN) de nuevo en el Stark Arena, con los mismos 20.000 apasionados que rugieron ayer. “Tuvimos un problema ofensivo, pero será una batalla interesante”, lanzaba un Zeljko Obradovic -impresionante la pancarta con su rostro en el comienzo del partido en uno de los fondos- consciente de que ni mucho menos todo está finiquitado. Tampoco podrá contar esta vez con el tipo que más problemas ofensivos le resuelve, Kevin Punter (cumplirá su segundo partido de sanción por la pelea del WiZink).
Para saber más
No hubo incidentes en el Stark Arena y sí un ambiente descomunal. Sobre él sobrevoló Edy Tavares. Su rostro de agotamiento tras el duelo hablaba de su descomunal esfuerzo. El martes había salido cojo del Palacio, sin poder disputar la segunda parte ni el duelo del jueves. Una semana después estuvo en cancha casi 36 minutos para firmar una actuación para la historia. Sus 41 créditos de valoración (11 de 14 en tiros, 26 puntos, 11 rebotes, tres tapones…) es la segunda mejor marca de la historia de los playoffs de la Euroliga -la primera, 45, la conserva Luis Scola desde 2005-, además de su tope personal en la competición. El africano agradeció a los servicios médicos del Madrid sus cuidados y avisó para el siguiente round (donde ya se las verá con Mathias Lessort): “Estaré bien”. “Lo hicimos y ahora tenemos que centrarnos en el siguiente, que será más duro que este. Tenemos que recuperarnos de la mejor manera posible para jugar dentro de dos días”, añadió. “Tener a Tavares con nosotros nos ayuda a desarrollar el plan de partido”, le elogió Chus Mateo.
Que también tuvo palabras para Nigel Williams-Goss, el otro gran nombre propio del Madrid. Entre las lesiones y la irregularidad, el base nunca ha terminado de brillar de blanco. Escogió a su ex equipo para firmar su gran noche. Suyo fue el triple decisivo, pero todo lo de antes (22 puntos, tres robos…) fue vital. «Creo que ha sido un partido emocionante decidido en los últimos instantes con ese tiro de Williams-Goss. Ha sido un esfuerzo de todos los jugadores. Estoy muy orgulloso del equipo, supimos sobrevivir”, afirmó Mateo, cuya zona desconcertó a un Obradovic al que nunca había ganado. “Nigel está jugando una temporada sensacional. Ha tenido lesiones pero siempre que está disponible demuestra su potencial. Otros jugadores han estado hoy muy bien, como Mario Hezonja. Lo importante es que todo el mundo ha dado un paso adelante y ha aparecido”, concluyó.