El alemán Thomas Tuchel se convertirá en el nuevo seleccionador de Inglaterra tras llegar a un acuerdo con la federación inglesa (FA, por sus siglas en inglés).
Tuchel, que tiene pasado en Inglaterra con el Chelsea, al que llevó a la conquista de la Champions League en 2021, sustituirá en el cargo a Lee Carsley, que ha sido técnico interino de los ingleses desde la salida de Gareth Southgate tras la Eurocopa en la que Inglaterra llegó a la final contra España.
La contratación del preparador alemán ha sido cuestión de horas, después de la derrota la semana pasada de Inglaterra contra Grecia en un tétrico partido en Wembley. Tras la derrota, la primera de los ‘Tres Leones’ en la Liga de Naciones, Carsley, ex de la sub21, dejó en el aire que no era el técnico adecuado para este equipo debido a su falta de experiencia al máximo nivel.
La FA, que sondeó a Pep Guardiola el pasado verano, no ha querido perder el tiempo, ya que como pronto, no abandonará el Manchester City hasta verano, y se ha hecho con un entrenador de renombre, que salió el verano pasado del Bayern de Múnich tras no ganar un solo título con los bávaros.
Tuchel, sin embargo, sí ganó la Champions, la Supercopa de Europa y el Mundial de clubes con el Chelsea, dos ligas francesas con el Paris Saint Germain y una copa alemana con el Borussia Dortmund.
El anunció será oficial en las próximas días y supondrá el tercer técnico extranjero en la historia de Inglaterra, tras Sven-Goran Eriksson, que estuvo desde 2001 hasta 2006, y Fabio Capello (2008-2012).
Sus primeros partidos con la selección será en el próximo parón por fútbol de selecciones, del 11 al 19 de noviembre, y su primera gran tarea serán los clasificatorios del Mundial de 2026 que comenzarán en marzo.
El fútbol le ha salvado la vida a Gianluca Scamacca (Roma, 1999) y no duda en reconocerlo. En el barrio a las afueras de Roma donde nació, Fidene, no había futuro y el presente era perseguir la pelota en la calle con los amigos. "Era difícil no acabar en determinados círculos. Gracias al fútbol no me he descarriado", confiesa el máximo goleador de la Serie A que hoy pondrá en aprietos a España.
A sus 25 años ha trotado por media Europa para acabar encontrando su lugar en el Atalanta en una temporada en la que ha marcado 19 goles, ha sido campeón de la Europa League y se le han abierto las puertas de la selección. Pero para radiografiar a Scamacca hay que volver al extrarradio romano y al origen de la fama de pendenciero que, según el propio jugador, arrastra desde los 16 años.
"Siempre la liaba en el colegio. Un día corté la luz de todo el edificio", relata el delantero, que comenzó a enmendarse en la cantera de la Lazio para después dar el salto a la Roma, donde comenzó a moldearse como goleador y a fijarse en los movimientos de Totti cuando le tocaba ser recogepelotas en el Olímpico. Nunca pudo ni siquiera entrenar con él. Con 16 años, la Roma lo traspasó al PSV, con 270.000 euros.
"Holanda es una escuela de fútbol. Fue una decisión atrevida de la que no me arrepiento", asegura el futbolista, que tuvo como entrenador a otro mítico Ruud Van Nistelrooy. Pero aquel no era su lugar. Scamacca, sin haber cumplido la mayoría de edad, tenía tres o cuatro tatuajes y en el campo era capaz de todo, algo que chirriaba en un equipo modosito. "Si hacía un taconazo me decían si quería imitar a Ibrahimovic. Me veían raro. Y yo no entendía que para ir a tomarme un helado con ellos tuviera que decirlo diez días antes", contaba el delantero en una entrevista a su regreso al Calcio.
Fue incapaz de pasar más de dos años en Eindhoven pero su figura ya apuntaba y sí, además de por los tatuajes, se asemejaba a la del astro sueco. 1,95 de altura, buen juego aéreo, potencia en el remate y capacidad de asociarse en el área. Un tanque que complica la vida a las defensas: "La verdad es que veía sus vídeos y pensaba que sí nos parecíamos. Me gustaba su atrevimiento y yo en el campo me transformo y soy capaz de todo: de dar una carrera más que el rival o de pegarle".
Eso vio el Sassuolo para llevarla de nuevo a Italia A en 2017, pero las lesiones complicaron su carrera y comenzó a trotar por el Cremonese, el Ascoli o el Génova antes de volver para despedirse con 16 goles. Fue entonces cuando la Premier, el West Ham, sacó el talonario y pagó 29 millones. Eso a pesar de un sambenito que arrastraba sin poder evitarlo.
Familia conflictiva y prejuicios
Meses antes, su abuelo fue detenido por amenazar con un cuchillo a los clientes de un bar y su padre por destrozar con una barra de hierro varios coches de directivos de la Roma en la ciudad deportiva de Trigoria. "A mí padre lo veo muy poco. Mi familia son sólo mi madre y mi hermana", tuvo que aclarar el delantero.
Cinco goles en su primer mes en auguraban que había encontrado su lugar en el mundo en Londres, pero todo cambió por una lesión. "En la Premier, si no estás al 100%, te barren". De allí se trajo un enorme león tatuado en la espalda y un convencimiento: "Nunca subestimes el poder que tienes dentro".
Ese poder le llevó a Bérgamo el pasado verano. Gasperini iba a ser su domador y el Atalanta el equipo que le catapultara. 12 goles en la Serie A, seis en la Europa League, y el título, y otro más en la Copa. Son 19 en total y siete asistencias, números que no pasaron desapercibidos para Spalletti, que también ha tenido que amansar a la fiera.
En marzo lo dejó fuera de la convocatoria para los amistosos ante Venezuela y Ecuador. La razón es que en la anterior concentración se había quedado jugando a videojuegos hasta la madrugada.
"Nadie sale lo que hago en la habitación, pero hay prejuicios hacia mí desde que tenía 16 años", contestó airado el jugador, pero el aviso surtió efecto y Scamacca apretó para estar en Alemania: de sus 19 goles que le convierten en el máximo goleador azurro, diez lo consiguió desde marzo. Imposible que Spalletti, necesitado de acierto, le dejase de vacaciones, pero no lo tiene ganado.
Le da una de cal y otra de arena. "Me gustan las mechas con las que ha venido", dijo el primer día de concentración para rebajar la tensión. Después volvió a repartir elogios y avisos. "Veo crecimiento y tiene un poco de todo: tamaño, velocidad, técnica y goles. También un poco de pereza", advirtió el convencido de que, si agita el látigo, Scamacca despertará para ser letal.
Este martes ha comenzado el juicio en el Tribunal Superior de Dublín contra la estrella irlandesa de artes marciales mixtas Conor McGregor, acusado de violación y agresión sexual por una mujer identificada como Nikita Ní Laimnhin, que sitúa los hechos en un hotel de la capital irlandesa el 9 de diciembre de 2018, y que involucra además a otro hombre llamado James Lawrence.
La mujer reclama daños civiles contra ambos alegando que fue agredida sexualmente. Sin embargo, los abogados del excampeón alegan que se trata de un intento de extorsión, informa The Guardian.
El juez Alexander Owens ha señalado que el caso es de carácter civil, por lo que no implica una condena penal, sino una indemnización en el caso de que se demuestren los hechos.
Según ha detallado la mujer, ambos se conocían de antemano ya que, según su versión, son de la misma zona en Dublín y tenían amigos en común. En la reconstrucción de los hechos presentada por el abogado de la denunciante, Ní Laimhin y una amiga quedaron con el luchador esa noche, quien las recogió en su coche para ir a casa de Lawrence.
Acto seguido, según continúa, McGregor consumió cocaína con ellas y posteriormente se fueron a una suite de un hotel donde el boxeador supuestamente intentó mantener relaciones sexuales con ella a pesar de que esta se negaba.
Ante el tribunal, ella dijo que se sintió intimidada y que McGregor la inmovilizó en la cama sin escuchar sus negativas y ejerciendo presión sobre ella pese a que intentó persuadir al luchador mencionando que conocía a su mujer y familia.
Asimismo, el ginecólogo y testigo en el caso, el doctor Kane, alegó que la mujer presentaba lesiones tras el suceso en su cara, cuello y cuerpo y múltiples hematomas "consistentes con el esquema de los eventos descritos por la demandante".
Con todo ello, el juicio se espera que dure alrededor de dos semanas y durante este tiempo se presentarán testimonios adicionales y se evaluarán más pruebas para determinar si el especialista en artes marciales es o no responsable de los hechos que se le acusa.
El español de origen francés Robin Le Normand, flamante fichaje del Atlético de Madrid procedente de la Real Sociedad, confesó este miércoles en su presentación que una de las cosas por las que se ha incorporado al conjunto rojiblanco es para dar un "paso adelante" en su carrera.
"El Atlético de Madrid es un gran club que ha demostrado en los últimos años la manera que tiene de competir y yo es lo que buscaba, un equipo que me permitiera dar un paso adelante en mi carrera", dijo el zaguero, durante su primer acto oficial como jugador del equipo madrileño.
Le Normand llega al Atlético tras militar seis temporadas en la Real Sociedad, durante las cuales ha disputado 221 partidos, ha anotado seis goles y se ha proclamado campeón de la Copa del Rey en 2020. Además, ha sido 17 veces internacional con la selección española, 17 apariciones que le han permitido sumar a su palmarés la Liga de Naciones en 2023 y, recientemente, la Eurocopa 2024.
Ha firmado para las próximas cinco temporadas por 34,5 millones de euros más cinco en variables, según las cifras que reveló Jokin Aperribay, presidente del club donostiarra.
"Partido a partido"
El zaguero, de 27 años, que reconoció estar "muy contento, ilusionado y con ganas de empezar", agradeció la acogida por sus compañeros y todos los miembros del club, que definió como "espectacular" y remarcó la calidad que tiene el grupo con las nuevas incorporaciones de la talla del argentino Julián Alvarez y el noruego Alexander Sorloth.
Para saber más
"El grupo es muy fuerte. Lo he visto entrenando y hay un grupo de muchísima calidad con un entrenador que ya ha demostrado la calidad que tiene. Hay que mantener la cabeza fría, ir partido a partido, trabajar duro como lo estamos haciendo y luego ir a ganar los partidos y ya veremos donde podemos llegar, pero ganas no va a faltar", afirmó.
"Hemos hecho una buena pretemporada y tenemos que empezar con buen pie ganando el primer partido y luego exigirnos, pero creo que entre nosotros nos estamos exigiendo todos. Después, ir partido a partido y competir y luchar como lo han hecho en los últimos años", añadió el futbolista, que reconoció que la confianza que le ha transmitido Diego Pablo Simeone ha sido fundamental. "Hemos tenido muchas charlas con el 'míster', con Antoine (Griezmann) y otras personas. Desde el primer minuto he notado esa confianza y ayuda mucho a elegir y lo he hecho de manera espectacular", declaró.
Volver a ser los mejores
Sobre los problemas defensivos que tuvo el Atlético de Madrid la pasada campaña, Le Normand aseguró que están trabajando para solventarlo y seguir en la línea de los años anteriores. Como aseguró el francés, "el Atlético de Madrid siempre ha sido de los mejores del mundo a nivel defensivo y estamos trabajando duro para estar fuertes este año y seguir con esa línea". Y recalcó: "Para mí es un lujo estar con el míster que ha sido una leyenda como futbolista y como entrenador. Este es el mejor lugar para seguir mejorando en mi puesto y yo intentaré dar mi mejor nivel en cualquier esquema".
Al ser preguntado por si siente presión al venir como campeón de Europa con España, el defensa fue contundente: "Me siento muy cómodo entrenando. Estoy ya poniéndome fuerte y todos me están exigiendo para volver ser fuerte a nivel defensivo y yo creo que es ahí donde tenemos que centrarnos. Debemos estar enfocados, escuchar lo que pide el entrenador y seguramente los resultados vendrán".