Propuesta de sanción un millón de euros a LaLiga por el control biométrico de los ultras

Propuesta de sanción un millón de euros a LaLiga por el control biométrico de los ultras

La Agencia Española de Protección de Datos ha propuesto una sanción de un millón de euros a LaLiga por vulnerar el derecho a la protección de datos por el control biométrico de los asistentes a las gradas de animación de los estadios de Primera y Segunda división.

El organismo ha ordenado también el cese del mismo hasta que se pueda producir “una evaluación de impacto de protección de datos del tratamiento que sea válida” y que examine “la necesidad, idoneidad y proporcionalidad del tratamiento y que tenga en cuenta los riesgos para los derechos y libertades de los interesados”.

La resolución, de casi 150 folios y a la que ha tenido acceso EL MUNDO, habla de una infracción del artículo 35 de conformidad con el artículo 83.4 a) del Reglamento General de Protección de Datos y establece esa cuantía según la estimación de ingresos que hace el organismo que tiene la patronal del fútbol.

El ente público considera a LaLiga como la responsable de los controles que realizan sus asociados a la hora de identificar con datos biométricos a los aficionados que acceden a las gradas de animación. La organización citó a ocho clubes de LaLiga EA Sports y otros ocho de la Hypermotion que utilizan sistemas de identificación de huella dactilar mientras que habla también de uno en cada categoría que usa el reconocimiento facial.

La Agencia explica que el sometimiento a ese tipo de controles está sujeto al consentimiento del usuario y recuerda que la empresa que, mayoritariamente, brindó esta tecnología a los clubes, tiene como empresa matriz a la propia Liga.

Citando un artículo del propio reglamento de competición, el organismo apunta que entre las funciones de LaLiga está el “determinar las condiciones que deben reunir las instalaciones deportivas de los estadios para la celebración de las competiciones profesionales, normas de seguridad, control de accesos, así como cualesquiera otras que pudieran establecerse”. Y que son los clubes los que deben “tener instalado el control de accesos que indique LaLiga, que deberá ser básicamente igual para todos sus miembros”.

Estos sistemas biométricos comenzaron en la temporada 2015/2016, pero el expediente sancionador se inició con una denuncia del 4 de noviembre de 2022 a la que se han ido añadiendo otras porque consideraban que se estaba excediendo el uso de los controles biométricos. En 2023, la agencia ya advirtió a LaLiga de que continuaría con “las acciones legales pertinentes para conseguir la eliminación de este tipo de identificación para el acceso a las gradas de animación de varios estadios de fútbol de España” tras una denuncia de una peña del Burgos CF.

Alegaciones de LaLiga

No obstante, LaLiga había alegado y alega actualmente que “no puede ser legalmente responsable del tratamiento de los datos biométricos utilizados en las gradas de animación de los estadios, al no tratar ningún dato biométrico, no mantener ninguna relación con los aficionados de los clubes, ni tomar decisiones sobre dichos datos”.

Asegura que la normativa de control de accesos, aunque viene recogida en su reglamento, ha sido aprobada por el Consejo Superior de Deportes (CSD) y que se sustrae de varios acuerdos por parte de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Intolerancia, la Xenofobia en el Deporte (CEVRXID).

La institución de preside Javier Tebas mantiene que trabajan desde el convencimiento de continuar avanzando en “garantizar la seguridad de los jugadores y de los aficionados que acuden a nuestros estadios” y seguirá ejerciendo las acciones oportunas para promover modificaciones legislativas que “resulten adecuadas para afrontar la lacra que supone el aumento de las conductas violentas, racistas, xenófobas e intolerantes en el deporte”. Además, también ha informado de que recurrirá la resolución en la vía jurisdiccional.

kpd