La polémica del Bernabéu y los enfados de Madrid y Alavés: de tres amarillas “exageradas” a “es roja a Endrick”

La polémica del Bernabéu y los enfados de Madrid y Alavés: de tres amarillas "exageradas" a "es roja a Endrick"

Pocos quedaron contentos anoche en el Santiago Bernabéu. El Real Madrid se llevó la alegría de la victoria, de tres puntos que le acercan a uno de un Barcelona que hoy recibe al Getafe, pero terminó sufriendo y mucho. Los blanco arrancaron el duelo de forma imparable y se fueron a vestuarios 2-0. Rodrygo, nada más salir de nuevo al césped, marcó el tercero. Parecía sentenciado. Pero empezaron los “despistes”, así lo admitió Ancelotti. Y la bronca, mucha bronca, con el colegiado del encuentro, Alejandro Muñiz Ruiz, como protagonista.

Todo empezó como los goles, muy pronto. El Madrid, que venía de recibir ante el Espanyol tres tarjetas amarillas por protestas de sus estrellas (Vinicius, Bellingham y Mbappé), se encontró con la primera tarjeta en el minuto 4. Fede Valverde protestó una falta levantando su brazo en señal de enfado y Muñiz Ruiz no dudó en sancionarle. Primeros abucheos del estadio, que ya venía caliente del duelo del sábado.

El ambiente fue elevando el tono mientras el Alavés acumulaba faltas (6 en la primera parte, 3 el Madrid) y llevó a su punto más alto de los primeros 45 minutos con la amarilla a Vinicius. El brasileño sufrió una dura entrada de Mouriño que Muñiz Ruiz no señaló, a lo que el delantero respondió arengando a la grada y repitió “balón, sí, balón…”, mientras caminaba hacia la portería rival. Otra tarjeta por protestar.

En el tramo final llegaría la gran polémica para un enfado general en ambos banquillos. Primero con una patada de Endrick a Mouriño que el colegiado no vio pero sí el VAR. El brasileño impactó con su rodilla en las partes íntimas del defensa, el VAR avisó al colegiado y éste y le sacó amarilla. “Lo de Endrick es roja, tendríamos que haber jugado los últimos 10 minutos con uno más. Es roja clara y nada más. No voy a hablar más del tema”, admitió García Plaza ante los medios.

El técnico del Alavés también reconoció que el colegiado había sacado “alguna amarilla de más” al Madrid, “pero otra cosa es la acción de Endrick, eso es roja”, insistió.

Después llegó el cambio de Vinicius por Fran García, justo cuando el Alavés más apretaba la meta de Courtois (3-2 en el marcador). El brasileño se fue del campo riéndose y recriminándole al cuarto árbitro los seis minutos de añadido.

En el tiempo extra, por si fuera poco, Muñiz Ruiz sacó una amarilla a Luka Modric, capitán del Madrid en ese momento, por dirigirse a él. Algo que en el conjunto blanco no entienden. “Habría que preguntarle a él“, aseguró Ancelotti en la sala de prensa.

El italiano fue directo hacia el colegiado cuando pitó el final del duelo y conversó con él durante unos segundos. “Le he dicho que me parecían exageradas las amarillas que ha sacado por las protestas, nada más. Ahora yo tengo que hacer lo mío para evitarlo, y nada más”, contó ante la prensa.

Ancelotti fue sutil a la hora de responder a las preguntas sobre el arbitraje. No quiso meterse en mayores problemas: “Tenemos que acostumbrarnos a la nueva norma (la de que solo habla el capitán) y nada más. Tenemos que dejar la protesta y punto. Justas o injustas hay que adaptarse a las nuevas reglas”. Y añadió después: “Tenemos que evaluar el tema de las amarillas por las protestas y lo haremos entre nosotros. Pero le ha sacado una amarilla al capitán, Modric, que sí puede hablar”, repitió.

Las tres amarillas por protestar ante el Alavés hacen que el acumulado total del Madrid este curso sea de 16, nueve de ellas por gestos o palabras en relación a los colegiados de los encuentros. Vinicius, por ejemplo, suma ya tres tarjetas, por lo que está a dos de la suspensión, teniendo el clásico contra el Barcelona en apenas un mes.

Creo que están siendo muy severos. Creo que lo que hace Fede en el minuto tres que no justifica la tarjeta. El otro día lo de Kylian es muy suave. Nosotros entendemos que los árbitros quieren cortar un poco los aspavientos, pero creo que hay que tener un punto medio. Todos en el campo estamos con muchas revoluciones y hay que entender al jugador y bajar un poco eso”, declaró Lucas Vázquez en la zona mixta, donde recordó que “ha penalizado más la protesta que la patada“. “Teníamos dos tarjetas sin haber hecho ni una falta y ellos con 10 faltas no tenían ni una sola tarjeta. Creo que es para mirarlo”, finalizó.

kpd