En los presupuestos se contemplaba la clasificación para cuartos de final. La única manera de compensar las pérdidas sería hacerse con el título en la Europa League
El Barça está a las puertas de tropezar con la misma piedra. Un año después, el conjunto azulgrana puede verse fuera de la Champions en la fase de grupos. Para ello, al Inter le basta con ganar al Viktoria Plzen en casa. Será un golpe con duras consecuencias no sólo a nivel deportivo, sino también económico. Por lo pronto, los ingresos que tenía previstos el club por alcanzar, como mínimo, los cuartos de final de la máxima competición europea ya se han ido al traste. Y eso supone un impacto negativo de 20,2 millones de euros, a los que habría que añadir además las posibles pérdidas en taquilla.
Hasta ahora, el público del Camp Nou ha mostrado una gran respuesta, pero eso puede cambiar mucho en la Europa League. Basta con recordar, por ejemplo, la tristísima imagen que se dio cuando los seguidores del Eintracht tomaron el estadio en la vuelta de los cuartos de final de esta competición la temporada pasada.
Alcanzar los octavos de final de la Champions supone un pago de la UEFA de 9,6 millones de euros. Pasar a cuartos suma 10,6 millones más. Por meterse en las semifinales, los ingresos son de 12,5 millones de euros. Los finalistas, para terminar, reciben cada uno 15,5 millones de euros. Una cantidad que aumenta en 4,5 millones de euros más para el vencedor. A lo largo de su participación en esta edición de la máxima competición europea, el Barça ha ingresado 15,64 millones de euros por su participación en la fase de grupos, a los que les ha sumado 2,8 millones por su triunfo ante el Viktoria Plzen, el único que ha logrado hasta ahora, y 930.000 por el empate ante el Inter. De acuerdo con las estimaciones que hizo el año pasado la entidad, la única forma de compensar este futuro descalabro sería ganar la Europa League. Un objetivo que se quedó en el tintero de la peor manera posible en la temporada 2021-22.
La alegría del Real Madrid
Las comparaciones con el eterno rival, el Real Madrid, además, resultan odiosas. El conjunto madridista se aseguró su presencia en octavos con su empate a última hora con el Shakhtar Donetsk y el curso pasado, con su decimocuarta Copa de Europa, se convirtió también en el equipo que logró sumar más ingresos por premios deportivos en la Champions.
En total, se hizo con casi 120 millones de euros, gracias a abrirse camino paso a paso hasta la final de París, hacerse con el título frente al Liverpool, sumar cinco victorias en la fase de grupos y agregar a todos esos premios 36,4 millones de euros por su ranking de coeficientes a 10 años.
Los capitanes y sus sueldos
Además, la derrota ante el Inter subrayó el problema que suponen para el club los salarios de varios de sus capitanes, como Gerard Piqué y Sergio Busquets. Pese a su bajo rendimiento, sus sueldos (y las cantidades diferidas en años anteriores) siguen siendo elevados y el equilibrio, precario antes de la posible eliminación, ya parece imposible. El año pasado no se consiguió el recorte en la masa salarial que hubiera permitido alcanzar el objetivo (470 millones; se quedó en 518) y este año, con los fichajes, las cifras se han vuelto a disparar (656 millones).
“Lo hemos intentado con varios jugadores, pero no pudo ser y tuvimos que avalar 10 millones. Lo aceptamos con deportividad”, lanzó el presidente, Joan Laporta en la Asamblea General, en referencia a la inscripción de Jules Koundé. Con la cercana eliminación de Champions y la consecuente perdida de 20,2 millones, al Barcelona sólo le queda esperar al final de los contratos de sus veteranos para, en el futuro, volver a hacer ajustes e intentar otra vez cuadrar sus números.