Primera jornada (88-94)
El vigente campeón, con un 56% desde el 6,75, debuta con victoria ante el combativo equipo de Aíto García-Reneses (88-94).
Una gran actuación de Mario Hezonja (23 puntos, 26 de valoración), especialmente inspirado en el segundo cuarto, y una puntería absolutamente letal en los triples fueron las claves en las que se apoyó el Real Madrid para llevarse un al final trabajado triunfo ante el Girona en el estreno de la nueva temporada de la ACB (88-94). Por parte de los locales, Marc Gasol (21 puntos, 34 de valoración) evidenció que aún tiene mucho por decir en su retorno a la máxima categoría. Sobre todo, si cuenta a su lado con un jugador con tanto talento como Kameron Taylor (22 puntos) y los fulgurantes destellos que puede aportarle al equipo Dusan Miletic (13 puntos).
El grupo de Aíto García-Reneses, deseoso de confirmarse al menos como heredero espiritual de aquel Akasvayu tan fulgurante como efímero, firmó un arranque cargado de arrojo y potencia de la mano de Gasol. El jugador-presidente, con dos triples y su siempre intimidante presencia en la cancha, fue una de las claves, junto con los ya nombrados Taylor y Miletic, para que los locales llegaran a vencer por 20-8 a un conjunto madridista inicialmente sorprendido por un arranque del todo explosivo. Guerschon Yabusele, con todo, mantuvo con vida suficiente a los suyos como para dar paso a tres triples consecutivos de Dzanan Musa, Hezonja y Sergio Llull que acercaron al Madrid (20-17) y pusieron las bases para el que sería su golpe sobre la mesa en el segundo cuarto.
Hezonja, con 15 puntos, sólo uno menos en el cuarto que la totalidad de un Girona al que le faltó resolución final en sus llegadas, fue sin duda la clave para que el Madrid le diera la vuelta con un 16-28 en el segundo periodo. Los blancos, haciéndose con un control del rebote que hasta ese momento habían echado mucho de menos, se estiraron hasta el 29-39 frente a un Girona que seguía dependiendo demasiado de la inspiración de Gasol, Taylor y Miletic. El 36-45 enfriaba los ánimos de un equipo tremendamente ilusionado, pero al fin y al cabo debutante en la categoría.
Voluntad de hierro
Tras la pausa, Taylor, Miletic y Gasol, fueron de nuevo los grandes argumentos de los locales para llegar a ponerse a sólo un punto (55-56). Poco antes, además, los seguidores locales se mostraron muy molestos por una aparatosa acción entre Miletic y Yabusele en la que el serbio dio espectacularmente con sus huesos en el suelo, pero que no tuvo finalmente graves consecuencias. El Madrid, con Hezonja un poco en barbecho, pero con una tremenda efectividad en los triples, a pesar de todo, se las arregló para desbaratar de un plumazo la reacción y acabó por marcharse al último periodo con un colchón de 12 puntos (57-69).
Los locales, con una voluntad de hierro, se las arreglaron para recortar hasta cuatro la ventaja de 14 puntos, la máxima del partido, que logró el Madrid de la mano de Yabusele nada más arrancar el último cuarto y trató de resistirse a un destino que muchos daban por más que seguro de antemano. El equipo que dirige Chus Mateo, no obstante, exhibiendo una puntería absolutamente letal en los triples y la veteranía de algunos de sus hombres clave, se las arregló para sobrevivir ante el empuje de un Girona capaz de cerrar un parcial final de 31-25 para acabar encajando una finalmente agridulce derrota por 88-94.
