Tercera jornada
Scheffler cierra su ronda del sábado con un ‘eagle’ y un ‘birdie’, que le acercan a tres impactos del liderato, en poder de Clark y Fowler (-10).
Cuatro golpes para cambiar el rumbo de la historia, sólo cuatro golpes para recuperar la fe en que el número uno del mundo, Scottie Scheffler, puede ganar el US Open. Quedan aún 19 jugadores por debajo del par del campo a falta de los 18 hoyos definitivos y Scheffler es uno de ellos.
A eso de las cuatro de la mañana de España, no parecía este major predestinado a sus vitrinas. Scheffler, por entonces, manejaba un -4, un mundo por detrás de los líderes. Tras una buena salida en el hoyo 17, un monstruoso par 4 de más de 500 yardas, el más complicado de Los Angeles Country Club, empuñó su hierro 6 y desde 178 metros logró el milagro de embocar. Un eagle que hizo temblar al campo angelino.
La otra bestia final, el hoyo 18, cayó en poder del número uno, que con un putt de unos siete metros cambiaba su destino con un birdie. Un zarpazo de cuatro golpes en los últimos dos hoyos que dejan al texano con -7, a sólo tres del dúo de cabeza.
Menos dureza de la esperada
Wyndham Clark (-1) y Rickie Fowler (par), con un resultado acumulado de -10, lideran la tabla a falta de lo que suceda el domingo. Clark nunca se ha enfrentado a esta situación, mientras que Fowler ha sido líder a falta de 18 hoyos dos veces en el pasado y en ambas, allá por 2014, terminó segundo.
La tercera jornada en Los Angeles transcurrió con más dificultades que las dos primeras, pero lejos de convertirse en el test de dureza que todos esperaban. Tampoco fue el sábado cuando la USGA diese la vuelta de tuerca al campo, porque quizá los greenes se mostraron un poco más duros, lejos de esas maquiavélicas condiciones de 20 años atrás que llegaban a desesperar a los más pacientes.
A la espera del desenlace, subrayar de nuevo que no habrá protagonismo español tras los naufragios de nuestros cinco representantes. Jon Rahm y Sergio García sigue siendo los mejores ubicados en la clasificación. Tras dos aseadas rondas de par y +1, respectivamente, comparten el puesto 38º en la clasificación, a 12 impactos de los líderes. David Puig, tercer superviviente tras el corte, siguió con su lucha particular, con más sufrimiento representado en una tarjeta de +5 y la posición 59º en el torneo.
McIlroy, otra vez bajo par
A un solo golpe de la cabeza aparece Rory McIlroy probablemente el más consistente del todo el torneo. El norirlandés volvió a firmar ayer otra vuelta bajo el par (69). Y es que únicamente tres jugadores han firmado esta semana tres tarjetas por debajo de 70 golpes (McIlroy, Clark y Scheffler).
La mejor ronda del sábado correspondió al coreano Tom Kim. Lo más espectacular de sus 66 golpes (-4) llegó en la primera mitad del recorrido, que completó con -7, con récord de 29 golpes en nueve hoyos. El coreano concluyó a siete golpes de la cabeza.