El Atlético se aferra a la Copa y supera con sufrimiento a un aguerrido Arenteiro

El Atlético se aferra a la Copa y supera con sufrimiento a un aguerrido Arenteiro

Copa del Rey


Arenteiro – Atlético (1-3)

Actualizado

Victoria trabajada de los de Simeone, que no sentenciaron hasta el descuento de la segunda parte. Carrasco y el canterano Pablo Barrios, los más destacados

Carrasco dribla a Diego para hacer el terceroBRAIS LORENZOEFE

El Atlético no tenía margen para otro tropiezo y respondió, no sin dificultades, para demostrar que quiere continuar vivo esta Copa y salvar una temporada muy pobre hasta el momento. El equipo de Simeone se llevó una victoria muy sufrida ante un rival que, pese a la diferencia de potencial, no entregó la cuchara hasta bien entrado el segundo tiempo.

El Arenteiro mostró en los compases iniciales ese ímpetu que sólo te da la ilusión de conseguir una gesta del calibre de eliminar a un equipo de Primera División. El Atlético, que le vio las orejas al lobo, dejó de especular. El canterano Pablo Barrios robó en medio campo y filtró un buen balón para Lemar, aunque su disparo raso salió ligeramente desviado. Pero ni siquiera un aviso así por parte de un campeón del mundo achantó a los gallegos, que continuaron intentándolo fieles a su estilo y espoleados por un Estadio Municipal de Espiñedo abarrotado.

Fue el Atlético el que probó primero al portero rival. Dos veces, primero Koke y después Morata. Pero ninguno de los dos inquietó a Diego García.

El partido dio un giro inesperado cuando, por aparentes protestas al cuarto árbitro, el entrenador del Arenteiro vio la roja directa. Dio igual. Los gallegos siguieron fiel a su plan, presionando la salida de balón de los rojiblancos y avisaron en dos ocasiones. La primera, tras una pérdida incomprensible de Savic que Antón Escobar casi manda al fondo de la portería. La segunda, tras otro robo, pero el disparo de Markitos fue demasiado blando.

A la tercera, el Arenteiro no perdonó. El propio Markitos controló dentro del área ante la pasividad de la defensa y picó el balón por encima de Oblak para hacer el primero. La fiesta en O Carballiño no duró mucho, ya que tres minutos después, justo en el 45, el árbitro señaló un penalti de Pol Bueso sobre Giménez en un córner. Carrasco no falló esta vez y consiguió la igualada antes del descanso.

HÉROES Y VILLANOS

En la reanudación, al Atlético salió con algo más de confianza, fruto del empate y del desgaste físico del Arenteiro en la primera parte. Y esa seguridad dio sus frutos. Carrasco provocó otro penalti que inexplicablemente no tiró. El cambio de lanzador no salió bien y Diego García detuvo un lanzamiento horrible a Morata, al que amargó la noche con varias intervenciones decisivas. Si el primer penalti no sentó bien en Espiñedo, el segundo convirtió a González Fuertes en enemigo declarado de la grada.

Precisamente Diego García, que estaba siendo el héroe local tras varias paradas, no estuvo afortunado en la jugada del segundo gol. Un disparo de Pablo Barrio, sin aparente peligro, sorprendió al meta gallego. Premio merecido para el canterano rojiblanco, el mejor de los visitantes junto a Carrasco, que fue precisamente quien liquidó el partido y puso el 1-3 ya superado el minuto 90 al culminar un contrataque con el Arenteiro volcado al ataque.

Lo intentó hasta el final el equipo gallego, buscando la portería de Oblak y haciendo disfrutar a los suyos. Al Atlético, sin Champions, sin Europa League y a una distancia considerable en Liga, le sobrababan los motivos para llevarse esta victoria y aferrarse a la Copa del Rey, su única opción real de levantar un título esta temporada. Y terminó consiguiéndolo.

kpd