Alcaraz, el abrazo de Sinner tras la derrota, un viaje en furgoneta por delante y la duda para la Copa Davis: “Mi intención es darlo todo con España”

Actualizado Lunes, 17 noviembre 2025 - 02:44

El tenis ha normalizado una amistad que es extraña se mire por donde se mire. Jannik Sinner desesperó este domingo a Carlos Alcaraz en la final de las ATP Finals, le llevó al error, incluso celebró un punto con uno de sus gestos icónicos y minutos después ambos se fundieron en un abrazo. Rafa Nadal y Roger Federer, precedente y ejemplo, no llegaron a tanto mientras estuvieron en la cima. Pese a episodios como la remontada de Roland Garros, la relación de los dos mejores jugadores del mundo resiste ante todo, tanto que incluso en pleno partido, durante el primer set, se animaron a una tertulia improvisada mientras los sanitarios atendían a un aficionado indispuesto.

"Es un jugador increíble, siempre vuelve más fuerte de las derrotas. Una vez más ha demostrado a todos lo que es capaz de hacer. Especialmente con el saque, con el que siempre te presiona mucho. Es realmente difícil jugar contra él", alababa Alcaraz, cuyo equipo pasó al completo por el palco de Sinner para felicitar a sus entrenadores.

En cuanto acabó el partido, el número uno del mundo se sentó en su banquillo y pasó unos minutos mirando al vacío, serio, muy serio. Una derrota en una final nunca es fácil de asimilar, pero luego tampoco tardó tanto en recuperar la sonrisa. En cuanto se subió a la tarima de la ceremonia de premios, el público del Inalpi Arena de Turín empezó a corear su nombre y su alegría habitual regresó de inmediato.

Antonio CalanniAP

"Estoy contento. Creo que he hecho un torneo espectacular, yendo de menos a más, jugando un tenis increíble. En la final me he sentido muy bien. Jannik y yo hemos jugado a una velocidad que yo mismo decía: ¡Joder! No estoy ni dolido ni jodido. Tengo que dar valor a haber llegado a la final de la Copa de Maestros y de haberlo hecho bajo techo", valoró quien aceptó que había cometido "un par de errores" en momentos decisivos y que eso le condenó.

La duda con la Davis

Este lunes al mediodía, después de un merecido descanso, saldrá en furgoneta del Hotel Principi Di Piemonte de Turín para recorrer los 332 kilómetros hasta el Bologna Fiere, la sede de la Final a Ocho de la Copa Davis. No entrenará hasta el miércoles, pero se reunirá allí con sus compañeros del equipo español y probará su físico. En el primer set de la final ante Sinner notó un pinchazo en los isquiotibiales de la pierna derecha al realizar un saque y toca analizar la gravedad del asunto.

"Mi intención es jugar la Copa Davis y darlo todo con España. Creo que no me perjudicará, espero que no, haremos pruebas. Cuando te haces un poco de año empiezan los pensamientos, pero he acabado bien el partido. Quizá no podía hacer el loco, correr bolas imposibles, deslizarme varios metros, pero he podido jugar normal, con fuerza, llegando a los apoyos", comentó Alcaraz, que este domingo cerró su temporada individual, la mejor temporada de su carrera.

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Fueron dos Grand Slam, tres Masters 1000 y tres ATP 500, fue recuperar el número uno -y lo que le queda con él-, fue una consistencia que nunca había tenido. "No ha sido una temporada perfecta porque no he ganado todos los títulos, pero ha sido una temporada brillante. Le doy mucho valor al crecimiento. Desde el principio de año he sabido lidiar con todo tipo de momentos, he crecido como persona y como tenista", proclamó el español.

Después de la Copa Davis tendrá un par de semanas de vacaciones -aunque en medio juega una exhibición en New Jersey ante Frances Tiafoe y otra en Miami ante Joao Fonseca- y 13 de diciembre volverá a los entrenamientos para preparar 2026 con una tarea pendiente. "Voy a intentar ponerlo todo en esa pretemporada para empezar la próxima temporada aún más fuerte. Una de las cosas que haremos es analizar esta final, valorar el partido, ver qué he hecho bien y qué he hecho mal. Lo estudiaremos todo", finalizaba Alcaraz, con una cercanía realmente única con el único rival que le discute.

Sinner desconcierta a Alcaraz, le derrota por segunda vez este año y se lleva las ATP Finals

Actualizado Domingo, 16 noviembre 2025 - 21:06

El futuro debe ser su consuelo. Carlos Alcaraz tiene ahora nuevas razones para desvivirse, una derrota que recordar en sus entrenamientos, alimento para los días que vendrán. En su mejor temporada lo ha ganado casi todo y en ese casi crecen las leyendas. La final perdida en Wimbledon fue una rareza, pero la final de las ATP Finals demostró este domingo que Jannik Sinner es superior en ciertas condiciones. Cuando un techo cubre sus cabezas, cuando ni el sol ni el viento molestan, el italiano es imbatible, como confirmó su victoria por 7-6(4) y 7-5 en dos horas y 15 minutos.

Sin duda, una decepción para el español, que además acabó tocado. Al mismo tiempo un protector de estómago para el empacho de éxitos de este 2025. Si hubiera ganado a Sinner en su superficie y en su casa, ¿Qué le quedaría para el año que viene?

En su duelo, el sexto del año, hubo tensión, mandíbulas apretadas, hubo dudas, como siempre. Los encuentros entre Alcaraz y Sinner generan ‘highlights’ para la historia, puntos tan inverosímiles que parecen generados por IA, pero también guardan muchísimos nervios. Acostumbrados a ser muy superiores a sus rivales, frente a frente se agarrotan. Son demasiados días pensando el uno en el otro, analizando, preparándose. Este domingo si una genialidad les otorgaba un punto los dos resoplaban antes de celebrar. Sin ahondar mucho más, Sinner acabó con cinco dobles faltas.

Los saques vertiginosos y los errores no forzados en ambos lados hicieron avanzar el marcador hasta que se llegó al tie-break del primer set. Antes, con el 5-4, atendieron al español por primera vez por unas molestias en los isquiotibiales de la pierna derecha. Antes, con 6-5, él mismo contó con una bola de break y de set que se perdió con un revés desafinado. Los dos sucesos seguramente estaban en la mente de Alcaraz en plena muerte súbita cuando intentó dos precipitadas subidas a la red que le sentenciaron. Nuevamente estaba obligado a remontar, como aquella mágica tarde en Roland Garros. Pero esta vez en territorio hostil.

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Al acabar ese primer set, el Inalpi Arena de Turín se venía abajo. La afición italiana alucinaba con un Sinner inventor, capaz de sobrepasar a su rival con dos globos y sorprenderle con unas dejadas. El esquema de juego del italiano no fue radicalmente distinto al habitual -golpes veloces y planos en todos los intercambios-, pero en determinados momentos se vistió de Alcaraz para asombrar. En el segundo set incluso celebró uno de sus puntos señalándose la oreja como habitúa su rival generacional. Un gesto raro en él, propio de la importancia del momento.

La desesperación de Alcaraz

En ese periodo Sinner empezó cediendo un break por primera vez en estas ATP Finals -llevaba ganados 45 juegos al servicio consecutivos-, pero poco después le dio la vuelta y desesperó a Alcaraz. "Desahógate, desahógate", decía el entrenador Samuel López a su pupilo cuando, con 4-4 en el marcador, soltaba sus primeras quejas. Luego vendrían más. En el desenlace del encuentro, el número uno se fue desesperanzando hasta encadenar una serie de malas decisiones que fueron su sentencia. Cada vez que visitaba la red se iba trasquilado hasta que al final cayó derrotado. Al acabar pasó unos minutos sentado en su banquillo mirando a la nada, digiriendo lo que acababa de ocurrir.

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"Estoy muy contento, muy contento con mi actuación en el torneo. He jugado con alguien que no ha perdido un partido bajo techo en dos años. Jannik es un gran jugador y hace un gran trabajo con su equipo. Después de cada derrota vuelve más fuerte. Espero que descanse para el año que viene y esté preparado porque yo voy a estar preparado", advirtió Alcaraz en la ceremonia de entrega de premios a un adversario que hará que en 2026 sea todavía mejor. Ahora toca la Copa Davis, una competición que le obligará a rehacerse rápido, y luego empezará unas vacaciones que apenas durarán un par de semanas.

A mediados de diciembre, el número uno de la ATP volverá a los entrenamientos en Murcia con las subidas a la red falladas este domingo en la cabeza. E incluso antes del Open de Australia, el 10 de enero, se reencontrará con su querido enemigo en una exhibición en Seúl. "Has tenido una temporada increíble, dejas muchos recuerdos. Si no soy yo el número uno quiero que lo seas porque realmente te lo mereces", consoló Sinner, cuya afición italiana ovacionó a Alcaraz y le devolvió la sonrisa. La rivalidad entre ambos seguirá haciendo crecer el tenis mientras uno y el otro continúan creciendo por el camino. El futuro debe ser su consuelo. Si hubiera ganado a Sinner en su superficie y en su casa, ¿Qué le quedaría para el año que viene?

Alcaraz, las prisas por irse a dormir, una camiseta para el recuerdo y la falsa alarma por el resfriado de Sinner: “No me he sonado la nariz”

Actualizado Domingo, 16 noviembre 2025 - 10:05

Corre, corre, corre. Desde que salió de la pista del Inalpi Arena de Turín, Carlos Alcaraz inició una carrera contrarreloj para meterse en la cama de su habitación del hotel Principi di Piemonte lo antes posible. La única parada obligatoria fue la bicicleta estática, donde estuvo apenas 15 minutos. Antes ventiló las entrevistas con las televisiones a toda prisa y después hizo lo mismo con las radios y la prensa escrita. En lugar de la conferencia habitual, con un protocolo fijo y todos sentados, la organización improvisó unas preguntas en zona mixta.

Al final, tras pasar por la ducha, Alcaraz salió del pabellón antes de la medianoche, cruzó la ciudad en un coche oficial en apenas 15 minutos, cenó y se echó a dormir. El objetivo era acostarse antes de que la madrugada se le echara encima. Conseguido. Este domingo (18.00 horas, Movistar), ante Jannik Sinner, en la sexta final del año entre ambos, necesitará estar lo más descansado posible para levantar su primer título de las ATP Finals.

El enésimo enfrentamiento entre ambos permite centenares de análisis distintos, factores a favor de uno y de otro, pero Alcaraz proclamó este sábado que el favorito es su rival generacional. Esta vez, que a él no le presionen. "Jannik juega mejor en pista indoor y estaremos delante de su público, así que es el favorito", aseveró el español, que pese a ello no renunció en absoluto al triunfo: "Eso no quiere decir que no pueda ganarle. Si pensara que voy a perder ni siquiera saltaría a la pista. No me jugaría el físico, no me jugaría nada. Sé de lo que soy capaz y sé que será complicado, las dos cosas. Veremos qué pasa".

ALESSANDRO DI MARCOEFE

Ambos han demostrado que el recuerdo de sus enfrentamientos pasados no les influye, aunque en los momentos tensos Sinner quizá recuerde que ya perdió cuatro veces esta temporada. No fue con intención —seguro que no lo fue—, pero este sábado Alcaraz apareció en el calentamiento de su semifinal ante Felix Auger-Aliassime con una camiseta que evocaba su épica victoria en el último Roland Garros.

El tercer español

Los precedentes son una buena herramienta para decantar la previa. Porque el español se presentará en la final con un gran hándicap: el público. Ya le ocurrió en Roma, donde venció, y esta vez será peor. Más de 15.000 italianos se entregarán a animar a Sinner mientras que por Alcaraz solo estarán sus amigos recién llegados de Murcia. "No es ningún secreto, el público juega. Jannik ha hecho mucho por Italia y es normal que se lo devuelvan. Si yo cometo un error, le ayudarán a venirse arriba. Por eso debo ponerlo todo sobre la mesa", analizó Alcaraz, que podría ser el tercer español en entrar en el palmarés de las ATP Finals.

Desde que se empezó a disputar en 1970, solo Manolo Orantes (1976) y Álex Corretja (1998) se proclamaron campeones, mientras que otros —Carlos Moyà, Juan Carlos Ferrero, David Ferrer y Rafa Nadal, dos veces— se quedaron a las puertas. "En la última parte del año he trabajado muy duro y me he concentrado especialmente para llegar en forma a este torneo. Levantar el trofeo significaría mucho para mí. Estar en la misma lista que Orantes y Corretja sería genial", finalizó Alcaraz antes de despedirse con prisas.

MARCO BERTORELLOAFP

Sabía el español que Sinner llevaba ya horas descansando en el mismo hotel después de ganar su semifinal con la placidez con la que siempre derrota a Álex de Miñaur. Como Alcaraz, el italiano no sufrió lo más mínimo para vencer, aunque durante el partido hubo un instante que alertó a los periodistas de su país. Los aficionados apenas se dieron cuenta, pero en la tribuna de prensa hubo incluso quien se llevó las manos a la cabeza. A medio partido, Sinner se echó una toalla a la cara, como si estuviera jugando en verano a pleno sol. La calefacción del Inalpi Arena funciona bien —a veces demasiado bien—, pero la única razón por la que el número dos del mundo podía sentir tanto calor era que estuviera constipado.

"¿Yo? ¿Resfriado? No, no, solo lo hacía para refrescarme porque hay mucha humedad en el pabellón. No me he sonado la nariz ni una vez", respondió Sinner, sorprendido por la alarma encendida entre la prensa. Este domingo habrá duelo entre Sinner y Alcaraz, el sexto del año, y los dos llegan en sus mejores condiciones.

Un Alcaraz rebosante de energía y motivación

Un Alcaraz rebosante de energía y motivación

Actualizado Sábado, 15 noviembre 2025 - 22:59

Cualquier reserva que pudiera haber sobre una hipotética relajación de Carlos Alcaraz después de conseguir cerrar el curso como número 1 del mundo quedó pronto desmentida en la semifinal ante Felix Auger-Aliassime. El español completó un primer set de película. Poco importó que con su victoria ante Lorenzo Musetti en el último partido de la fase de grupos hubiera suscrito uno de los objetivos que le llevaron a Turín. El despliegue realizado, la voracidad en cada acción, el instinto de cazador, demostraron que el trabajo aún no estaba hecho y que quería su primera final en el torneo que reúne a los ocho mejores de la temporada. Contaba con el margen suficiente como para consentirse alguna distracción en el segundo set, algo que no podrá hacer este domingo ante Jannik Sinner.

Están ellos dos. Y luego, a una distancia más que estimable, los demás. Roland Garros, Wimbledon, US Open y ahora la antaño denominada Copa de Maestros. Otra vez mano a mano. El italiano tiene el desafío de superar al número 1 del mundo, y de hacerlo frente a su público. Al español se le presenta la opción de cerrar a lo grande un año de auténtico ensueño y ratificar la jerarquía recién adquirida.

El partido, más aún al mejor de tres sets, se resolverá en dos o tres jugadas, dos o tres instantes, en apenas unos centímetros, en un alarde, en un desliz. De entrada, la superficie ayuda más a Sinner, que cuenta con automatismos para favorecer la toma de decisiones. Alcaraz siempre precisa una pequeña adaptación. El partido con Cameron Norrie en Paris-Bercy seguramente no lo habría perdido en otra superficie.

Pero tal y como le hemos visto en estas ATP Finals, está claro que llega en magníficas condiciones, después de que junto a su equipo haya elegido con mimo el último tramo del calendario, que en alguna ocasión le resultó incómodo.

No se puede hablar de un favorito. Los dos se presentan en el partido definitivo sin perder un set y en un estado de forma esplendoroso, como si no les pesase el trabajo de una temporada de máxima exigencia. Sinner no duda. Sigue siendo el jugador efectivo y reconocible y estará deseoso de dar respuesta a lo ocurrido en Nueva York, un partido en el que su gran rival marcó considerables diferencias.

No lo tendrá fácil. Carlos está que se sale del cuerpo. Es todo energía,y extramotivación, frescura. Se vislumbra una final apasionante, como suele ser cada uno de sus enfrentamientos. Abróchense los cinturones. Y no parpadeen demasiado.

Sinner ya espera a Alcaraz en la final: vence por decimotercera vez a De Miñaur, su víctima favorita

Actualizado Sábado, 15 noviembre 2025 - 16:34

Este sábado, antes de su semifinal de las ATP Finals, tanto Felix Auger-Aliassime como Carlos Alcaraz pudieron calentar tranquilamente en la pista central del Inalpi Arena. Una rareza, porque jugaban en el último turno. En realidad, un privilegio esperado: todos los presentes sabían que la semifinal anterior, entre Jannik Sinner y Alex De Miñaur, se resolvería rápido. Jugadores, aficionados, periodistas, entrenadores y, por supuesto, organizadores no dudaron al hacer su planning. Si normalmente reservan la pista tres horas para cada partido, esta vez solo bloquearon dos. ¿Para qué más?

Hasta 12 veces habían jugado antes Sinner y De Miñaur, y en las 12 previas el italiano había dominado con autoridad. La decimotercera no fue la excepción. Para alcanzar su tercera final consecutiva de las ATP Finals, Sinner se impuso por 7-5 y 6-2 en apenas una hora y 52 minutos ante su adversario favorito, un tenista cuyo estilo le favorece.

Esta vez De Miñaur intentó algo diferente, pero el resultado fue el mismo. Su estilo defensivo, correoso y conservador es ideal para la voracidad de Sinner. A un lado, un tenista sólido; al otro, un tenista destructivo. En el primer set, De Miñaur empujó al italiano al error y forzó los intercambios todo lo que pudo, pero en cuanto le sobrevino cierto cansancio, todo quedó en manos de Sinner.

Antonio CalanniAP

Para ganar, el australiano necesitaba hacer el partido de su vida, estirar cada golpe, buscar ángulos más allá de sus límites; para ganar, el italiano solo tenía que hacer lo suyo. De Miñaur aguantó hasta el 6-5 del primer set y luego cedió con un break. El segundo set fue solo la constatación de la superioridad de uno sobre el otro. Si acaso, destacó la noble actitud de De Miñaur que, pese a estar ya dos breaks abajo, con 4-0 en contra, peleó el partido hasta donde le alcanzaron los golpes.

Sinner vence, felicita a Alcaraz por el número uno y reclama cambios en la Davis: “Así es difícil que los mejores participen”

Actualizado Viernes, 14 noviembre 2025 - 23:07

Jannik Sinner ya estaba clasificado como primero de su grupo para las semifinales de las ATP Finals, pero el partido aún repartía puntos y el hambre del italiano sigue siendo insaciable. Ante Ben Shelton venció por 6-3 y 7-6(3) con la clara sensación de que, de haberlo necesitado, habría ganado más rápido y con más contundencia.

«¡Bravo!», le gritó a Carlos Alcaraz antes del partido, justo después de la ceremonia de entrega del trofeo de número uno del año, y luego le dedicó unas bonitas palabras: «Si tuviese que elegir a otro jugador para acabar número uno en lugar de mí, siempre le elegiría a él; se lo merece». Sinner también reconoció su sana envidia: «Estoy feliz por él, pero si me preguntas si estoy muy, muy feliz, te mentiría. Ha tenido una temporada increíble: ha ganado dos Grand Slams, ocho torneos. Está jugando a un gran nivel y es competitivo en cualquier superficie».

Para Sinner, el número uno de Alcaraz es una motivación de cara al próximo año, y así lo expresó antes de entrar en una de las polémicas más comentadas estos días en Turín.

Tras conquistar dos Copas Davis consecutivas, Sinner ya anunció hace semanas que no estaría en la cita de la próxima semana en Bolonia, y su compañero Lorenzo Musetti hizo lo propio este jueves. Italia buscará su tercera corona con un equipo igualmente competitivo —Matteo Berrettini, Lorenzo Sonego, Flavio Cobolli, Andrea Vavassori y Simone Bolelli—, pero las ausencias, especialmente la de Musetti, han recibido numerosas críticas en el país.

«Veo más factible que la Copa Davis se juegue cada dos años, porque es difícil que los mejores participen cada temporada», reflexionó Sinner este viernes, en la misma línea que Alcaraz o Zverev. Como ya ocurría antes del cambio de formato, la Davis vuelve a convertirse en una incomodidad para los mejores tenistas, que deben defender a sus países en uno de los momentos más exigentes del año: finales de noviembre, en pleno cierre de temporada.

En este contexto, el debate sobre el calendario vuelve a cobrar fuerza. Los jugadores reclaman una mayor coordinación entre torneos, federaciones y organismos para evitar la saturación de finales de año, cuando el desgaste físico y mental es más evidente. La Davis, símbolo histórico del tenis por equipos, se encuentra así en una encrucijada: mantener su prestigio sin comprometer la salud y la disponibilidad de los mejores. La próxima edición podría ser decisiva para definir si el torneo necesita un nuevo ajuste o una reforma profunda para recuperar la presencia de las grandes estrellas.

Sinner se zafa de Zverev para llegar a semifinales en Turín

Sinner se zafa de Zverev para llegar a semifinales en Turín

Había argumentos contundentes para vislumbrar una victoria de Jannik Sinner ante Alexander Zverev en la segunda jornada del Grupo Bjorn Borg, que se disputó este miércoles en Turín. El italiano, defensor del título, venía de conseguir ante Felix Auger-Aliassime su vigésimoséptimo triunfo consecutivo bajo techo, donde no cede desde que perdió ante Novak Djokovic la final de estas ATP Finals en 2023. En este mismo escenario, la secuencia era de 12 sets seguidos desde que el año pasado se convirtió en el primer jugador en ganar el torneo sin ceder un parcial.

El estrecho 5-4 favorable a Sinner en el cara a cara entre ambos quedaba relativizado por el marcador más próximo: victoria del transalpino por 6-0 y 6-1 en semifinales del Masters 1000 de Paris-Bercy, y por los que le precedieron este mismo año, recientemente en la final de Viena y al comienzo del curso en la del Abierto de Australia.

El alemán, campeón del torneo en 2018 y 2021, volvió a caer, por tercera vez en los últimos 17 días, ante el hombre que gracias a su triunfo se convirtió en el primer semifinalista del torneo. Sinner venció por 6-4 y 6-3, en una hora y 37 minutos, ratificando su autoridad. Tuvo sus opciones de abrir la confrontación Zverev, pero no fue capaz de convertir ninguna de sus siete posibilidades de ruptura.

Otra variante más

A la solidez que le distingue, agregó el también ganador de Wimbledon en este 2025 una variante poco frecuentada en su juego. Se aventuró, casi siempre con éxito, en la utilización de la dejada, tal vez estimulado por la reactualización del golpe que ha llevado a cabo Carlos Alcaraz desde su estallido en el circuito.

Sinner sostiene así su candidatura a terminar el año como número 1 del mundo, si bien éstas fenecerán en la noche del jueves si Alcaraz gana a su compatriota Lorenzo Musetti y suma su tercera victoria en la fase de grupos.

Zverev sigue vivo y se jugará plaza en semifinales ante Auger-Aliassime, que venció en el otro partido del miércoles al debutante Ben Shelton (4-6, 7-6 [7], 7-5). Al igual que le sucediese en su primer encuentro, el estadounidense volvió a emitir síntomas de bisoñez y dejó escapar un triunfo que tuvo muy cerca.

Sinner logra ante Auger-Aliassime su vigesimoséptima victoria consecutiva bajo techo

Sinner logra ante Auger-Aliassime su vigesimoséptima victoria consecutiva bajo techo

Son ya 27 victorias consecutivas las que ha suscrito en pista cubierta Jannik Sinner, que este lunes derrotó a Felix Auger-Aliassime en el inicio de la defensa de su título en las ATP Finals de Turín. El número 1 del mundo, rango que cederá si Carlos Alcaraz suma tres victorias en la fase de grupos del torneo o alcanza la final, venció por 7-5 y 6-1 al mismo hombre a quien derrotó recientemente en la final del Masters 1000 de Paris-Bercy.

El canadiense, un tenista especialmente cualificado en este tipo de superficies, sólo presentó oposición en el primer parcial, para sucumbir después ante un hombre que maneja todos los resortes en indoor. Este miércoles buscará frente a Alexander Zverev, ganador ante Ben Shelton en su debut, una plaza en las semifinales, en el que será el segundo partido del Grupo Bjorn Borg.

Sinner queda ahora a dos victorias de igualar uno de los registros de Roger Federer, quien encadenó 29 triunfos bajo techo entre los años 2010 y 2012. Está a gran distancia aún de John McEnroe, impoluto a la luz de los focos en una secuencia de 47 victorias entre 1978 y 1987. Novak Djokovic, ausente en esta edición tras salir campeón en Atenas, con 35, de nuevo Federer, con 33, e Ivan Lendl, con 32, aún le preceden en la lista.

El italiano, que ha renunciado a liderar a su país, ganador de las dos últimas ediciones, en las Finales de la Copa Davis que se celebran la semana próxima en Bolonia, tiene en este torneo su último gran objetivo de una temporada en la que ganó Wimbledon frente a Alcaraz y se vio superado por el español en las finales de Roland Garros y el Abierto de Estados Unidos.

Sus posibilidades de volver a cerrar el curso como número 1 pasan por ganar el título y esperar que su gran rival no consiga esas tres victorias en el round robin ni alcance el partido definitivo.

En el otro partido de la jornada de este lunes, dentro del Grupo Jimmy Connors, Taylor Fritz derrotó a Lorenzo Musetti, que ha entrado en el torneo gracias a la baja de Djokovic, por 6.3 y 6-4. El estadounidense se medirá este martes con Alcaraz (14.00 h., Movistar), quien se impuso el domingo, también en dos sets, a Alex de Miñaur. Fatigado después de la durísima final de Atenas que perdió ante Nole, Musetti poco pudo hacer ante la eficacia del estadounidense, que cerró el encuentro con 13 aces.

Cortar la circulación de la sangre, la última estrategia para fortalecer a Alcaraz: "Es desagradable, como si te tomaran la tensión durante cinco minutos"

Cortar la circulación de la sangre, la última estrategia para fortalecer a Alcaraz: “Es desagradable, como si te tomaran la tensión durante cinco minutos”

Aparece Carlos Alcaraz en un entrenamiento en el Inalpi Arena de Turín, el enorme pabellón que acoge las ATP Finals, y realiza el calentamiento bajo las órdenes de su fisioterapeuta, Juanjo Moreno. Nada raro, todo normal en el último torneo de la temporada, excepto unas cintas negras debajo de sus rodillas. Con ellas puestas realiza apenas un par de ejercicios de movilidad, Moreno se las quita y ya entonces el tenista agarra la raqueta para empezar a golpear bolas. ¿Qué son esas cintas? ¿Arrastra Alcaraz alguna lesión? Más bien todo lo contrario. Esas cintas se llaman bandas de oclusión o bandas BFR -las siglas de blood flow restriction-, se utilizan para restringir el flujo sanguíneo en las extremidades del cuerpo y sirven tanto para fortalecer la musculatura como prepararla para los partidos.

Alcaraz empezó a utilizarlas en 2023 en su brazo derecho; luego se las colocó varias veces en ambos brazos -en el último US Open aún lo hacía antes de los calentamientos- y, en las últimas semanas, las está usando en las piernas, tanto en sus sesiones de gimnasio de Murcia como en sus sesiones preparatorias en París. Varios miembros de su equipo, especialmente Moreno, son seguidores de las últimas tendencias en fisiología, y las bandas BFR son una de ellas.

«Las bandas de restricción sanguínea surgieron hace décadas en el ámbito de la rehabilitación de lesiones porque se comprobó que con ellas se puede provocar el mismo estímulo a un músculo utilizando menos carga. Una persona que sólo puede levantar 20 kilos en sentadilla por culpa de alguna dolencia puede simular un esfuerzo de 100 kilos con bandas BFR en las piernas. Al cortar el flujo de sangre al músculo se provoca igualmente la hipoxia muscular aunque el peso sea menor. Sin ir muy lejos, Carolina Marín las utilizó durante la recuperación de su última lesión grave de rodilla. De la rehabilitación se pasó a los gimnasios, porque la restricción sanguínea facilita la hipertrofia, y en los últimos tiempos ha llegado a los deportes de equipo y especialmente a los deportes de resistencia. Ya hay muchos ciclistas completamente sanos que utilizan este tipo de bandas en las piernas para forzar un esfuerzo extra, incluso en sus concentraciones en altura», cuenta Pedro L. Valenzuela, investigador del Hospital 12 de Octubre de Madrid y editor de la revista científica Fissac.

Según un metanálisis de 53 estudios clínicos sobre BFR realizado en 2022 por investigadores de universidades como la St. George de Londres o la McMaster de Hamilton, los beneficios del BFR son «medio-altos» entre los adultos en baja forma, pero no son tan espectaculares entre deportistas. Por eso Alcaraz, aunque utiliza esta técnica para tonificarse cuando entrena en casa, la usa más habitualmente en los torneos con otro objetivo.

Un pack por unos 150 euros

«Si las utiliza antes de sus entrenamientos en un Grand Slam o estas ATP Finals lo hace por otro motivo: es un preacondicionamiento isquémico. Se utilizan las mismas bandas, pero en este caso la presión es mayor. En lugar de restringir la sangre, se corta totalmente la circulación durante un máximo de cinco minutos para que el músculo genere sustancias vasodilatadoras como el óxido nítrico y que, al quitarse las bandas, se produzca una hiperemia, es decir, que llegue más sangre. Así se mejora el oxígeno en sangre, la movilidad e incluso hay una sensación analgésica», concluye Valenzuela, que indica que las bandas BFR son cada vez más populares, aunque hay contraindicaciones.

Bandas compresoras Carlos Alcaraz

Cualquier deportista con problemas de vasculatura debería evitar utilizarlas porque existe riesgo de trombosis y, además, acostumbrarse a su uso no es sencillo. «A algunas personas no les funciona porque provocan una sensación desagradable. Es lo que llamamos efecto nocebo. Es como si te estuvieran tomando la presión arterial durante cinco minutos: se te empiezan a dormir los pies, sientes un cosquilleo... Hay quien no quiere utilizarlas», cuenta el investigador.

Hace un par de temporadas, Alcaraz lucía unas cintas de la marca Akrafit, y este curso utiliza otras de Viok Sport. Aunque esta última es una empresa de Murcia, concretamente de Yecla, no hay en su uso un fin económico; es más, normalmente intenta que no se vean demasiado para evitar posibles conflictos con sus patrocinadores. Un pack como el que él utiliza cuesta unos 150 euros en tiendas como Decathlon o Carrefour, aunque hay modelos más avanzados que pueden superar los 1.000 euros. Esos artilugios permiten regular la presión a través de una aplicación móvil y no obligan a hacerlo de manera manual.

Djokovic, Fritz y De Miñaur, rivales de Alcaraz en las ATP Finals

Djokovic, Fritz y De Miñaur, rivales de Alcaraz en las ATP Finals

Actualizado Jueves, 6 noviembre 2025 - 13:23

El tenista Carlos Alcaraz se enfrentará en las ATP Finals a Novak Djokovic, Taylor Fritz y Alex de Miñaur para intentar lograr un trofeo que se le resiste al murciano y en el que su mejor resultado son las semifinales que alcanzó en 2023 y en las que cayó con rotundidad, precisamente, ante el jugador serbio.

El murciano se enteró del sorteo en medio de su entrenamiento junto a Alexander Zverev en Turín, ciudad que acoge la anteriormente conocida como Copa de Maestros. Su grupo ha sido rebautizado como Jimmy Connors.

En el otro, denominado Björn Borg, han quedado encuadrados el propio Zverev, Ben Shelton, Jannik Sinner y Felix Auger-Aliassime o Lorenzo Musetti. El italiano, que se encuentra en Atenas disputando un ATP 250, podría desbancar al tenista canadiense del torneo de maestros si obtiene el título en la ciudad griega.

No obstante, los grupos también están pendientes de la decisión de Djokovic sobre si jugará o no este torneo. El serbio anunció que lo decidiría después del torneo de Atenas, que también está disputando porque lo organiza su familia. De hecho, el director es su hermano Djordje. Así, si renuncia, Musetti ocupará su plaza junto a Alcaraz como primer suplente, salvo que el torneo lo ganara el italiano y entonces entraría Auger-Aliassime en su lugar.

Alcaraz llega a este torneo de maestros como primer cabeza de serie porque aún no se han restado los puntos del torneo del año pasado lo que colocaría a Sinner, de nuevo, en lo más alto del escalafón tenístico mundial. No obstante, el del Palmar podrá recuperarlo si gana tres partidos a lo largo del torneo.