El campeón en Queen’s y de nuevo número 1 del mundo reitera su respeto por Djokovic: “Es el gran candidato. Tengo que dar mi máximo para tener oportunidades”
Si algo le podía faltar a Carlos Alcaraz, a una edad y después de una trayectoria en la que no caben mayores exigencias, era dar una nueva muestra de su carácter intrépido ganando un título sobre hierba. Con siete trofeos sobre arcilla y tres en pista dura, entre ellos el Abierto de Estados Unidos, esta superficie estacional, circunscrita a las semanas previas a Wimbledon, representa un serio desafío y suele presentarse como particularmente escurridiza, más aún para quienes no cuentan con una cualidades específicas para desenvolverse sobre ella.
Sin ser el mejor con el servicio, con el resto ni con la volea, tres valores prioritarios en este terreno, Alcaraz se maneja con notable habilidad en todas las suertes y dispone de la actitud adecuada para acelerar el proceso de aprendizaje. Como en su momento Rafael Nadal, nunca le ha hecho ascos al césped, rompiendo con la conducta a menudo esquiva de muchos jugadores españoles, renuentes al esfuerzo de intentar aclimatarse a ella. En 2022 no acudió a Queen’s por molestias físicas y este año se presentó con el corto bagaje de seis partidos y tan sólo dos torneos disputados sobre hierba, las dos últimas ediciones en el All England Club.
Superadas las lógicas dudas iniciales ante Arthur Rinderknech, el murciano ha viajado por el torneo como un avión, hasta coronarse vencedor tras imponerse a Alex de Miñaur por un doble 6-4. «Para ser la primera vez que juego este torneo es una magnífica noticia comprobar que puedo dar un gran nivel en hierba», dijo recién concluida la final.
Puede ya hablarse de un tenista integral, que con 20 años, un mes y 20 días, ha ido más deprisa que los integrantes del denominado Big Three a la hora de hacer valer su fortaleza en distintas superficies: Roger Federer lo consiguió con 21 años y 10 meses, Nadal, con 22 años y una semana, precisamente en Queen’s, tras una inolvidable final contra Novak Djokovic, y el serbio con 24 años y dos meses, al ganar el primero de sus siete títulos en Wimbledon.
El regreso al techo de la ATP
El triunfo viene acompañado por el complemento de volver a instalarse en el número 1, que había cedido tras la victoria de Djokovic en Roland Garros. Abrirá este lunes su cuarta etapa en lo más alto, la vigesimosexta semana con el mejor dorsal. Nadie a su edad ha pasado en tantas ocasiones por el ático del circuito. Se proyectó como el más joven en subirse a él con su victoria en el Abierto de Estados Unidos, el pasado 12 de septiembre, y lo lució durante 20 semanas, hasta que Nole logró, el 29 de enero, su décimo Abierto de Australia. Lo rescató el 20 de marzo, con el título de Indian Wells, perdiéndolo dos semanas más tarde, tras caer en semifinales de Miami ante Jannik Sinner. Su tercera etapa se abrió el 15 de mayo, pese a perder ante Fabian Marozsan en tercera ronda del Masters 1000 de Roma.
«Por supuesto que recuperarlo justo antes de Wimbledon te da una motivación y una confianza extra, pero no creo que cambie mucho jugarlo como número 1 o como 2. Novak también estará allí» valoró.
Además de Nadal, que ganó el primero de sus dos títulos en Wimbledon tras su victoria en Queen’s, también completaron la secuencia Boris Becker, en 1985, Pete Sampras, en 1995 y 1999, Lleyton Hewitt, en 2002, y Andy Murray, en 2013 y 2016.
El único contratiempo de la final ante De Miñaur se produjo cuando debió ser atendido en adductor de la pierna derecha, tras la conclusión del primer parcial. Se le aplicó un vendaje y volvió a la cancha sin evidenciar motivación alguna. Había rentabilizado su única bola de rotura, justo después de que su rival no pudiese cazar ninguna de las dos de que dispuso en ese parcial. En la reanudación, quebró en el quinto juego. Dos de dos en pelotas de break. Así se habla en esta superficie.
«Me siento unos de los favoritos para Wimbledon, pero necesito más experiencia, solo he jugado once partidos en hierba», comentó en conferencia de prensa. «He visto una estadística de que Novak ha ganado más partidos que el resto de los otros 20 favoritos. Es el gran candidato. Tengo que dar mi máximo para tener oportunidades», agregó, reiterando su respeto por el serbio, que no pierde un partido en el All England Club desde 2017.